Argentina insiste en negar la suspensión de pagos y dice que podría a acudir al Tribunal de La Haya
- Jorge Capitanich dice que hablar de cese de pagos es "una patraña absurda"
- El jefe de Gabinete argentino dice que el país podría acudir también a la ONU
- Los fondos especulativos aseguran que Argentina eligió la suspensión de pagos
Los bancos privados vuelven a Argentina sin un acuerdo con los fondos buitre
Un día después de agotar el plazo de negociación sin llegar a un acuerdo con los denominados fondos buitre que litigaron en tribunales estadounidenses, el Gobierno argentino ha asegurado que hablar de cese de pagos "es una patraña absurda", ha cargado contra la Justicia de EE.UU. y ha avisado de que no descarta apelar a la Corte Internacional de La Haya o a la Asamblea de Naciones Unidas.
Así lo ha asegurado el jefe de Gabinete argentino, Jorge Capitanich, que ha reiterado que el país sudamericano ha cumplido sus obligaciones financieras con los acreedores de deuda reestructurada y que la responsabilidad de que no hayan recibido el pago recae en el juez neoyorquino Thomas Griesa.
Griesa, magistrado que falló a favor de los fondos de inversión litigantes, tendedores de deuda en mora desde el cese de pagos de 2001, ha convocado a las partes a una vista este viernes a las 11.00 hora local de Nueva York (17.00 hora peninsular).
“Que no vengan con que (el poder judicial de Estados Unidos) es independiente“
En una dura conferencia de prensa, el jefe de Ministros argentino acusó a la Justicia estadounidense de estar "cooptada por los fondos buitre" que reclaman el pago de 1.500 millones de dólares. "Que no vengan con que (el poder judicial de Estados Unidos) es independiente. Es independiente de la racionalidad, no es independiente de los fondos buitre", ha afirmado Capitanich.
"Decir que Argentina está en default técnico es una patraña absurda que pretende fulminar el proceso de reestructuración de deuda", subrayó el jefe de Gabinete argentino sobre los procesos de canje de deuda realizados en 2005 y 2010, a los que adhirieron el 92,4% de los acreedores.
Tras vencer el plazo de gracia para pagar a estos tenedores de bonos, Capitanich ha remarcado que se abren múltiples instancias en el plano internacional, como presentarse ante el Tribunal de la Haya o abrir un debate mundial en el seno de Naciones Unidas.
Además, ha rechazado que vaya a caer la inversión extranjera directa y ha sostenido que el Ejecutivo encabezado por Cristina Fernández va a continuar "con los estímulos para producir más bienes y servicios, para exportar más, y para lograr el crecimiento y la expansión de la economía en un mundo complejo".
"Argentina eligió el cese de pagos", dicen los fondos
Contra el discurso oficial de Argentina, el de la agencia de calificación de riesgos S&P -calificó parte de la deuda del país sudamericano como en impago selectivo- o el de los propios fondos buitre.
NML, el fondo especulativo que lidera el litigio, ha acusado al país de "elegir el cese de pagos" frente a las "soluciones creativas" del mediador, Daniel Pollack, que fueron "aceptables" para ellos. "Argentina rechazó considerar seriamente cualquiera de ellas y, en su lugar, eligió la suspensión de pagos selectiva", ha subrayado el fondo en un comunicado.
Mientras, el Bank of New York Mellon (BoNY), que recibió 539 millones de dólares procedentes de Argentina para pagar a los bonistas, tiene todavía ese dinero congelado por orden del magistrado Griesa.
El banco neoyorquino ha explicado a los bonistas la situación, todavía bajo "recomendación" del juez pero no sobre una orden judicial. "Hasta la fecha, el tribunal no ha emitido una orden sobre la moción del administrador (en este caso BoNY). Según las órdenes previas del Tribunal, el administrador seguirá manteniendo los fondos en sus cuentas del Banco Central (de la República)", explica en un comunicado.
En él añaden que estarán "pendientes" de esa nueva orden cuya "naturaleza y fecha todavía no es sabida". Por último, aunque ponen a disposición de los bonistas un correo electrónico de consulta, asegura que los bonistas "no deberían tener el banco como única fuente de información" y que el BoNY "no hace recomendaciones y no da asesoría legal o de inversión" a los afectados.
Los bancos privados tampoco llegan a un acuerdo
Mientras, la delegación de la Asociación de Bancos Privados de Capital Argentino (ADEBA) encargada de negociar en Nueva York la compra de los títulos de deuda a los fondos buitre regresa este jueves a Buenos Aires tras fracasar las gestiones, según han anunciado a Efe fuentes del organismo.
“La negociación fracasó y los representantes de ADEBA se están volviendo al país“
"La negociación fracasó y los representantes de ADEBA se están volviendo al país", ha indicado la portavoz de la asociación a Efe, confirmando el cierre de las negociaciones.
La delegación está integrada por miembros de entidades de capital argentino que pretendían adquirir los bonos de deuda a los fondos especulativos y solicitar así una medida cautelar que desbloqueara los giros de dinero efectuados por el Gobierno de Cristina Fernández a los acreedores que se acogieron a las reestructuraciones de 2005 y 2010.
La Asociación de Bancos de Argentina la integran 27 entidades bancarias de capital argentino, entre ellos el Galicia, Hipotecario, Ciudad de Buenos Aires, Macro, Supervielle, de Córdoba, de Santa Fe, de San Juan y de Entre Ríos.