La zona euro se estancó en el segundo trimestre y el conjunto de la UE creció un 0,2%
- El bloque, lastrado por el frenazo de Alemania y el estancamiento francés
- El crecimiento trimestral español triplicó el del conjunto de la UE
- El PIB de la eurozona aumentó un 0,7% respecto a igual período de 2013
La economía de la eurozona se estancó entre abril y junio respecto al primer trimestre de este año, lastrada por el frenazo en el motor alemán (se contrajo un 0,2% intertrimestral) y en Francia, que repitió el crecimiento nulo del comienzo del año, según los datos preliminares publicados este jueves por Eurostat. A eso se une la entrada en una nueva recesión técnica de Italia, la tercera economía del bloque del euro.
Entre enero y marzo pasados, el conjunto de los 18 países del euro creció un 0,2% y los analistas apostaban por repetir ese avance en el segundo tramo del año.
De los Veintiocho miembros del bloque, cuatro están en recesión técnica: a Grecia y Chipre se unen ahora Italia y Rumanía, mientras que Estonia y Finlandia salen de esa situación.
Por contra, el conjunto de la UE sí repuntó, aunque solo un 0,2% intertrimestral.
Si se compara este segundo trimestre con el mismo período del año pasado, el avance del PIB de la zona euro fue del 0,7%, mientras que el de la UE aumentó un 1,2%. Ambos datos están por debajo del crecimiento interanual en el primer trimestre (que era de 0,9% y 1,4%, respectivamente).
El crecimiento trimestral español triplicó el de la UE
Según los datos de Eurostat que recogen los adelantados por el INE, España creció un 0,6% entre el primer y el segundo trimestre y un 1,2% con respecto al segundo trimestre de 2013. En este sentido, el avance interanual de España igualó la media de crecimiento de la UE y casi dobló el crecimiento experimentado en la zona euro. Con la comparación de los datos intertrimestrales, el avance del PIB español en el segundo trimestre triplicó el registrado en el conjunto de la UE.
Solo cuatro países de la UE registraron aumentos trimestrales de su PIB superiores al español: Letonia (1%), Hungría (0,8%), Reino Unido y Lituania (ambos crecieron un 0,7%). Polonia, Portugal y Eslovaquia tuvieron un crecimiento igual al español (0,6%).
Otros cuatro países del bloque registraron una contracción de su PIB en este segundo trimestre: Alemania (-0,2%), Italia (-0,2%), Chipre (-0,3) y Rumanía (-1%).
Las economías de Bulgaria, Estonia y Holanda se incrementaron en un 0,5%. Austria y Suecia aumentaron su PIB en un 0,2%, y Bélgica y Finlandia crecieron un 0,1%. República Checa y Francia no experimentaron ninguna variación trimestral en el tamaño de su economía.
Bruselas insiste en las reformas
Precisamente, el portavoz de la Comisión Europea, Michael Jennings, ha puesto como ejemplo este jueves a España y Portugal, que -ha destacado- crecen más que otros países con un ritmo de reformas más lento.
"Siempre hemos subrayado la naturaleza frágil de la recuperación y mantenemos que el mayor riesgo para ella es la complacencia", ha explicado Jennings en rueda de prensa.
Frente a los críticos que reclaman a Europa que relaje la austeridad y apueste por invertir para estimular crecimiento, el Ejecutivo comunitario ha instado a mantener la senda de las reformas pese a la ralentización de la recuperación económica.
Rebaja de la previsión anual de los economistas
La publicación de estos datos ha coincidido con la rebaja de las previsiones de crecimiento para la zona euro realizada por los 59 expertos consultados cada trimestre por el Banco Central Europeo (BCE).
En la encuesta sobre sus pronósticos para el tercer trimestre que se ha publicado este jueves, el panel de economistas ha consensuado que la economía del euro crecerá este año una décima menos de lo previsto hasta ahora (limitan la expansión del PIB al 1%), mientras han mantenido estable el pronóstico para 2015, cuando esperan que la eurozona crezca un 1,5%.
"Según los encuestados, los riesgos están relacionados principalmente con el impacto de tensiones geopolíticas como las de Ucrania y Oriente Próximo, así como con la menor demanda externa, en gran parte desde China y EE.UU.", señala el BCE en su boletín mensual de agosto.
A pesar de estos riesgos a la baja, los expertos consultados por el BCE han mejorado una décima -hasta el 1,8%- su expectativa de crecimiento para la eurozona a más largo plazo.
En cuanto a la evolución de los precios, los analistas consideran que el entorno desinflacionario tendrá un mayor impacto del previsto el trimestre anterior y han rebajado sus pronósticos de inflación en la zona euro, una tasa que cerró julio pasado en el 0,4%.