Juliana Bonohá: "Mi corazón sigue en Monrovia recordando a los que luchan contra el ébola"
- Bonohá recuerda emocionada a sus compañeros que permanecen en Liberia
- La religiosa ha agradecido la atención sanitaria recibida en España
La religiosa Juliana Bonohá, que fue repatriada desde Liberia junto al sacerdote fallecido por ébola Miguel Pajares, no ha podido evitar las lágrimas al recordar a sus compañeros que luchan en el país africano contra la enfermedad "sin apenas recursos".
"Mi pensamiento y mi corazón están en Monrovia recordando a las víctimas del ébola", ha señalado la hermana en su primera rueda de prensa tras ser dada de alta el pasado jueves del Hospital Carlos III, donde estuvo 21 días ingresada y aislada.
La religiosa ha trasladado públicamente "la alegría" tras ser dada de alta y no haber padecido el ébola, y ha expresado su gratitud a todos los que han participado en su repatriación y en su atención sanitaria en el hospital madrileño
"Es una buena ocasión para manifestar la alegría que siento y la gratitud", ha dicho Juliana con una sonrisa y ha explicado que la decisión de retornar a Monrovia depende de sus superiores aunque ha asegurado que ella "estaría dispuesta".
También se ha alegrado de la curación de la enfermedad de la hermana Paciencia Melgar aunque ha señalado que aún no ha podido hablar con ella.
Juliana Bonohá es misionera de la Congregación de la Inmaculada Concepción; es de origen guineano y tiene pasaporte español. Bonohá llegó a Madrid el pasado 7 de agosto repatriada de Liberia junto con el sacerdote Miguel Pajares, fallecido el 12 de agosto a causa del virus, y ha sido sometida a varias pruebas de ébola, que han dado negativo, durante los días que ha permanecido en el hospital Carlos III.