Montoro afirma que Pujol pudo cometer varios delitos y que llegarán hasta el final

• El ministro de Hacienda dice que Pujol no se acogió a la amnistía fiscal
• Critica un comportamiento “reprobable” y “30 años de clandestinidad fiscal”
• El PSOE replica que la amnistía ha sido una "pasarela" para defraudadores

Montoro: El Gobierno llegará "hasta el final" en el caso Pujol

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha asegurado en el Congreso que la responsabilidad del expresidente de la Generalitat Jordi Pujol no se agota con entonar un "mea culpa" en un comunicado de confesión y que su departamento tiene intención de actuar en su caso por la vía administrativa y la judicial, porque a la vista de las informaciones conocidas no puede descartarse "que se hayan cometido varios delitos".

"Con los datos de que disponemos hasta este momento no podemos descartar que se hayan cometido uno o varios delitos", ha afirmado Montoro, y ha advertido también al expresidente catalán de que su confesión no basta para exculparle.

"Si alguien como Pujol creía que con una confesión pública haría borrón y cuenta nueva, se equivocaba de pleno". "El fraude no se expía con una carta novelada", ha afirmado el ministro de Hacienda en su comparecencia en el Congreso a petición no sólo del PP, sino también del PSOE, la Izquierda Plural y el grupo Mixto, para explicar si Jordi Pujol o algún miembro de su familia se acogió a la amnistía fiscal.

Según ha informado el ministro de Hacienda, "Pujol no presentó declaración tributaria especial", o lo que es lo mismo, no se ha acogido a la amnistía fiscal del año 2012, aunque ha recordado que, de haberlo hecho, no estaría eximido de "ninguna responsabilidad o culpa" por hechos constitutivos de delito.

"La confesión no es espontánea"

Montoro ha empleado buena parte de su intervención parlamentaria en afear el comportamiento de Pujol, quien durante 34 años ocultó en el extranjero una parte de su fortuna familiar y no pagó impuestos por ese dinero incluso cuando presidía el gobierno catalán, un asunto que "ha causado alarma social", y ha criticado con dureza el comportamiento de Pujol por confesar el fraude "y no hacer nada más".

"¿De qué vale admitir el fraude cometido si no se repara el daño causado, si no se corrige el rumbo?", se ha preguntado Montoro, que se ha mostrado convencido de que "el señor Pujol está reaccionando cuando se ha visto acorralado por las investigaciones de la Agencia Tributaria y los servicios policiales". "No es un acto espontáneo o un repentino ataque de conciencia", ha apostillado.

“"Pujol reacciona cuando se ve acorralado por la Agencia Tributaria; no es un repentino ataque de conciencia"“

"Lo más asombroso es que confiesa el fraude, pero se queda en eso, no hace nada que demuestre que quiere hacerlo bien a partir de ahora", sino que "arremete contra la banca andorrana por dejar al aire sus vergüenzas", ha añadido.

"El señor Pujol", ha denunciado Montoro, "intenta humanizar su fraude aludiendo a que se trata de una herencia familiar, tratando de borrar con un hecho íntimo treinta años de clandestinidad fiscal".

Vincula el caso con el independentismo

También ha reprochado el ministro algunas réplicas recibidas desde Cataluña del ya conocido como 'caso Pujol': "Los indicios de delito, cuando se dirigen a algunas personas, no puede decirse que son una conspiración".

El titular de Hacienda ha abundado después en el argumento nacionalista, remarcando que no se trata "de una cuestión mas", sino la de un dirigente político histórico, "un baluarte del nacionalismo catalán, que en últimos tiempos, a la par que la Agencia Tributaria investigaba su fortuna familiar, se ha reconvertido también sorprendentemente en adalid del independentismo".

Así, ha criticado a quienes "pretenden lanzar pulsos al Estado y al mismo tiempo se están lucrando y sacando partido personal" y ha remarcado que "ningún dirigente político sensato puede tolerar la manipulación y el cinismo político de quienes sostienen un discurso político y en privado trabajan por el interés general de unos pocos".

El ministro ha ido más allá al advertir que estos casos generan indignación en los ciudadanos, y ve normal que se pregunten si los "herederos políticos" de Pujol "no estarán contaminados por esa presunta herencia".

A esto, desde las filas de CiU han replicado al ministro que ha cometido un "ejercicio de alto riesgo" al hacer "juicios de valor temerarios" sobre el 'caso Pujol'. Pere Macías ha asegurado que los miembros de CiU son "los más interesados en que las cosas se aclaren" y ha añadido que espera que no se use este caso para más que hacer Justicia.

La Agencia Tributaria se personará en los tribunales

Según ha explicado Montoro, el Gobierno ha dado instrucciones a la Abogacía del Estado para que se persone en los procesos judiciales abiertos a miembros de la familia Pujol para que la actuación de la Agencia Tributaria pueda estar presente en los procedimientos judiciales y no sólo en los administrativos.

Montoro ha adelantado a los parlamentarios que no podrá dar mucha información de las investigaciones de la Agencia Tributaria a la familia Pujol, pero ha abierto la puerta a que el Parlamento correspondiente cree una comisión de investigación y le solicite información.

Además, ha apuntado algunas de las investigaciones a la familia Pujol Ferrusola en las que ha colaborado Hacienda, entre ellos una entre 2000 y 2002 en la que estaba involucrada a una empresa del Ibex 35. Se ha referido también a la colaboración del servicio de vigilancia aduanera en el caso de las ITV y la investigación de posibles operaciones en Estados Unidos, suiza, Reino Unido, Holanda, México, Luxemburgo y Andorra.

"Uno de los casos más graves de fraude fiscal" en España

Como responsable de la lucha contra el fraude, Montoro se ha aplicado con dureza en criticar el comportamiento de Pujol, que considera "ética y políticamente reprobable" y que hace que "cunda el descrédito de los políticos".

El ministro ha basado sus amonestaciones en la idea de que "no todos los contribuyentes somos iguales", apelando al "plus de responsabilidad" que se debe exigir a los políticos que legislan, imponen y cobran impuestos.

“"El Estado ha de perseguir al defraudador, cualquiera que sea su poder económico, mediático o político"“

Para el ministro de Hacienda, el de Pujol es "uno de los más graves casos de fraude fiscal en términos cualitativos que se han conocido en España", ha calificado el ministro antes de su exposición ante los diputados de la situación fiscal del que fue presidente de Cataluña entre 1980 y 2003.

El PSOE plantea si Hacienda "ha hecho debidamente su trabajo"

El portavoz de Hacienda del PSOE en el Congreso, Pedro Saura, planteó este martes si la Agencia Tributaria "ha hecho debidamente su trabajo" ante el caso de Jordi Pujol.

"Ha sido la Justicia la que ha destapado el escándalo y no la Agencia Tributaria, entre otras razones porque no se ponen los medios ni la intensidad política" respecto a los grandes fraudes, indicó Saura, que ha acusado a Montoro de haber creado "una pasarela" para los grandes defraudadores con la amnistía fiscal, a la que se ha referido como "la vergüenza política del siglo".

El portavoz de la Izquierda Plural, Joan Coscubiela, ha acusado a Montoro de cinismo, recordándole que se ha olvidado de que el presidente de su partido ha puesto la mano en el fuego por comportamientos "deleznables" de dirigentes de su partido que incluso están en la cárcel. "Se olvida de que el PP tiene centenares de Pujoles dentro", ha dicho.

El PSOE recrimina a Montoro que no trate la amnistía fiscal de los familiares de Pujol

Este martes, además, la Comisión de Asuntos Institucionales del Parlament ha aprobado por unanimidad la petición de comparecencia de Pujolpara que dé explicaciones sobre el patrimonio oculto que confesó tener, aunque aún no se ha concretado en qué día.

Tras esta decisión, Jordi Pujol ha tomado también finalmente la suya y ha comunicado por carta a la presidenta del Parlament catalán, Núria de Gispert, que está dispuesto a comparecer para explicar su patrimonio oculto, pero ha pedido poderlo hacer a partir del 22 de septiembre para no influir en la Diada.