Putin anuncia un plan de paz para Ucrania tras conversar con Poroshenko
- Cree que podría haber un acuerdo de alto el fuego en los próximos días
- El plan incluye la retirada de las tropas ucranianas de las ciudades del este
- El primer ministro ucraniano ha acogido la propuesta con desconfianza
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha presentado un plan de paz de siete puntos para el este de Ucrania tras mantener una conversación telefónica con su colega ucraniano, Petró Poroshenko.
"Quiero subrayar (...) que esta declaración se hace como resultado de nuestra conversación telefónica con el presidente Poroshenko", ha explicado Putin durante una visita a Mongolia.
El presidente ruso ha aclarado que pese a la prisa de Kiev de anunciar un alto el fuego, en las conversaciones sólo se ha hablado de los pasos para favorecerlo. Porque, según la lógica de Moscú, Putin no puede acordar un alto el fuego en una guerra de la que niega formar parte. Aún así, se ha mostrado optimista en que de aquí al viernes se llegue a un acuerdo definitivo.
El líder ucraniano también ha declarado que tiene puestas sus esperanzas en que el "proceso de paz arranque por fin el próximo viernes en Minsk", en las consultas del Grupo de Contacto para Ucrania, y ha confirmado que trató con su colega ruso "de qué manera se puede poner fin a los terribles acontecimientos" en el este de Ucrania.
Un plan de siete puntos
El plan de Putin insta a los dos bandos a poner fin a cualquier acción ofensiva en el territorio de las regiones de Donetsk y Lugansk y señala que las tropas ucranianas deben retirarse de las inmediaciones de todos las ciudades a una distancia que impida su cañoneo con artillería.
Contempla también el control internacional del alto el fuego, el intercambio de retenidos y prisioneros mediante la fórmula de "todos por todos", la apertura de corredores para los refugiados y la ayuda humanitaria, la prohibición de bombardeos aéreos y el envío de especialistas para la reparación de las infraestructuras.
En un tono mucho menos conciliador, el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, ha calificado la propuesta de Putin como un "intento de embaucar a la comunidad internacional en vísperas de la cumbre de la OTAN y un intento de evitar las inevitables decisiones de la Unión Europea sobre una nueva ola de sanciones contra Rusia".
El jefe del Ejecutivo ucraniano ha asegurado que "todos los acuerdos anteriores con Rusia -alcanzados en Ginebra, Normandía, Berlín o Minsk- fueron ignorados o sencillamente violados por el régimen ruso", al que Kiev acusa de apoyar con tropas y armamento a los separatistas prorrusos del este.
Para Yatseniuk, el mejor plan de paz para el este de Ucrania debería contener un sólo punto: la retirada de las tropas rusas y de las milicias separatistas de las dos regiones rebeldes.
Avance de los rebeldes
Uno de los líderes de los rebeldes, Miroslav Rudenko, aseguró que los sublevados cesarán la lucha "si Kiev repliega sus tropas desde los núcleos poblacionales, o mejor aún, desde el territorio" de las regiones de Donetsk y Lugansk.
Esteste miércoles se ha confirmado la muerte del fotógrafo de la agencia oficial rusa Rossía Segodnia Andréi Stenin, declarado desaparecido en el este de Ucrania a comienzos de agosto. Según el Comité de Instrucción de Rusia (CIR), los restos han sido identificados entre los de varias víctimas del bombardeo de una columna de refugiados por parte del Ejército ucraniano.
Sobre el terreno, Ucrania atraviesa momentos delicados en su operación militar contra los separatistas debido a la exitosa contraofensiva de las milicias, que en poco más de una semana han recuperado decenas de localidades controladas por las fuerzas de Kiev y han abierto un tercer frente en el sur de la región de Donetsk.
De hecho, los cuerpos de 87 soldados ucranianos muertos durante el cerco rebelde de la ciudad ucraniana de Ilovaisk llegaron en los últimos dos días a la región de Zaporozhie, según el mando militar ucraniano.
El imparable avance de las fuerzas de Kiev frenó en seco hace poco más de una semana tras varios meses de éxitos en su lucha contra los rebeldes, un giro que en Kiev achacan a la entrada de tropas regulares rusas en territorio de Ucrania.