Los bancos Lloyds y RBS se trasladarán a Londres si Escocia vota por la independencia
- Las entidades quieren asegurarse la protección del Banco de Inglaterra
- Alex Salmond asegura que no repercutirá en el empleo
- El FMI advierte de habrá un "efecto negativo a corto plazo" en los mercados
Dos grandes bancos británicos, Lloyds y Royal Banks of Scotland (RBS) han anunciado que se trasladarán a Londres si Escocia vota por la independencia en el referéndum del 18 de septiembre.
Ambas entidades están en parte nacionalizadas tras el rescate a la banca por la crisis económica. El Gobierno británico posee un 25% del grupo Lloyds, que a su vez controla el RBS y el banco Halifax.
El anuncio llega el mismo día en que una encuesta publicada por un diario escocés revierte la tendencia de los últimos días y otorga una ventaja de varios puntos a los votantes del "No", partidarios de mantener la unión.
El grupo Lloyd indicó el miércoles que ha elaborado planes de contingencia que incluyen el establecimiento de nuevas entidades legales en Inglaterra. El motivo es que la entidad siga estando regulada y protegida por el Banco de Inglaterra. El RBS, con sede en Escocia desde 1727, donde emplea a 11.500 personas, ha hecho un anuncio similar.
Las entidades han tomado esta decisión después de que numerosos clientes solicitasen una aclaración sobre la situación de sus finanzas si gana el "Sí" el día 18.
El FMI advierte de un efecto negativo a corto plazo
La compañía aseguradora y de pensiones Standard Life, con sede en Edimburgo, también ha informado de que podría trasladar a Londres parte de sus actividades si gana la opción independentista.
Las consecuencias económicas si Escocia se independiza son impredecibles porque no hay precedentes de secesión de un Estado miembro de la UE. Así lo ha subrayado este jueves también el El Fondo Monetario Internacional, que ha advertido de una "negativa reacción de los mercados" a corto plazo.
"El principal efecto inmediato (del triunfo del sí) es la probable incertidumbre sobre la transición hacia un potencialmente nuevo y diferente marco monetario, financiero y fiscal en Escocia", ha afirmado Bill Murray, portavoz del FMI, en la rueda de prensa quincenal del organismo. No obstante, ha matizado, "los efectos a largo plazo dependerían de las decisiones que se tomen durante la transición".
Salmond dice que no afectará al empleo
El ministro principal de Escocia, el nacionalista Alex Salmond, ha asegurado que, aun en caso de producirse este traslado, no habrá impacto en las operaciones bancarias ni en el empleo, ya que se trataría de un procedimiento meramente técnico.
No obstante, Salmond ha descalificado el anuncio como "parte de una campaña política del Gobierno británico" y ha pedido una investigación al respecto porque considera que el Gobierno británico está detras de la filtración a la cadena BBC.
Por su parte, el gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney, ha advertido que Escocia necesitaría una gran cantidad de reservas si decidiera adoptar la libra como moneda sin el acuerdo con el resto del Reino Unido.
El gobierno autónomo escocés ha indicado que tiene intención de conservar la libra si gana la independencia, pero Londres ha descartado esa posibilidad.