"Podemos se definió como gente corriente haciendo política y así debería seguir siendo"

• Arranca la Asamblea Ciudadana con la que Podemos se 'fundará' como partido
• Propuestas políticas, organizativas y éticas saldrán de muchos de sus círculos
• Miembros a pie de calle explican a RTVE.es qué esperan del proceso

Una asamblea de Podemos en Zaragoza con la presencia del eurodiputado Pablo Echenique.

El fenómeno Podemos está en construcción. Este lunes 15 de septiembre se ha dado el pistoletazo de salida a la Asamblea Ciudadana ‘Sí se puede’ con la que la pujante formación liderada actualmente por Pablo Iglesias se revestirá con los ropajes de un partido político -no un partido al uso, como insisten sus promotores y simpatizantes- con el que aspirar al cambio ciudadano, o como ellos mismos predican, al empoderamiento del pueblo frente a una clase política que consideran devenida en “casta”.

Podemos ha puesto a su servicio las nuevas tecnologías de la información, en especial internet y las redes sociales, para constituirse de abajo arriba, en un proceso asambleario con el que buscan dar el salto definitivo y en todos los frentes en la arena política y ser la organización "más democrática y más eficaz" de España.

¿Lo afrontan así en las calles donde empezó todo hace relativamente pocos meses? Miembros de dos de los casi 900 círculos (la unidad de agrupación territorial o sectorial de la formación) que conforman hoy Podemos cuentan su experiencia a RTVE.es.

Esther, vecina de Castilleja de Guzmán, municipio sevillano de algo menos de 3.000 habitantes, aceptó la propuesta de sus vecinos, “animados por el mismo interés por cambiar el actual sistema político” de crear un círculo después de las elecciones europeas, en las que Podemos fue la tercera fuerza más votada en el pueblo, en una localidad donde gobierna el PSOE sin mayoría.

En su círculo se viene reuniendo desde entonces gente "por lo general sin formación política", pero con muchas ganas de “cambiar la mentalidad para que la gente vea que sus propuestas pueden ser valoradas”, y se congratulan de una experiencia “gratificante” y “sorprendente”, en la que “las votaciones en más de un 90% son por consenso”, según explica su portavoz a RTVE.es.

A algo más de 200 kilómetros de allí, en Granada capital, ya existía el círculo de Podemos desde comienzos de año y en él participaban también personas con ganas de “transformar la indignación en ilusión, organización y propuestas en positivo”, rememora Jesús de Manuel, portavoz de Podemos en la ciudad andaluza. Hoy hay siete círculos en los barrios de Granada y otros cuatro sectoriales.

En las próximas dos semanas cualquier ciudadano con el aval de un círculo podrá enviar borradores con los principios éticos, organizativos y políticos con los que funcionará el partido y de los que el 27 de octubre saldrán las bases de Podemos.

¿Qué Podemos quiere la gente de Podemos? Hasta la apertura de la Asamblea Ciudadana, entre los debates políticos elevados por los círculos en la web Plaza Podemos han destacado el modelo energético, propuestas sobre el control del sistema financiero, los impuestos y la fiscalidad progresiva, o también sobre qué incompatibilidades debería tener un cargo político de Podemos, cómo revocarle de su responsabilidad o el límite temporal de sus mandatos.

Pero también tocan tierra. “A nivel más local, en Granada se ha elaborado una propuesta alternativa a la reestructuración del transporte público, con la creciente implantación de la Línea de Alta Capacidad (LAC)", expone el portavoz de Podemos en la capital andaluza, que destaca también "el PEPRI de Granada y su impacto en barrios como el Albaicín, que pueden acabar convirtiendo nuestro barrio patrimonio de la humanidad en una suerte de parque temático para el turismo masivo pero lleno de actividades ruidosas”.

El reto de aprender a trabajar en asambleas

Los participantes califican la experiencia de debatir y participar en asambleas como positiva, aunque “un proceso asambleario siempre es difícil, y más cuando se da en poco tiempo un aluvión de gente de perfiles muy diversos”, subraya De Manuel.

Podemos ha tenido que dedicar un esfuerzo específico para definir las normas y criterios mínimos de validación de los círculos, y aún está aprendiendo a gestionar esta modalidad asamblearia de participación política, no exenta de fricciones: ‘intrusos’, grupos organizados que intentan imponer su voto e ideas en varios círculos, círculos paralelos a partir de escisiones…

“Es inevitable que se acerquen personas con ánimo destructivo, organizadas o no, y tendremos que dotarnos de mecanismos democráticos, éticos y políticos para protegernos, sin encerrarnos en nosotros mismos. Es uno de los retos que tenemos por delante en este proceso constituyente”, explica Jesús de Manuel.

Entretanto, en los círculos luchan por vencer la falta de cultura participativa y la desconfianza de muchos, algo quizá más fácil en una población pequeña como Castilleja de Guzmán, donde “los vecinos más escépticos al sistema han sido invitados a una de las asambleas para que participaran, propusieran y votaran todo lo tratado en ella y así comprobar que cada persona es igual de valorada y escuchada”, subraya Esther.

Otro reto es el de superar las barreras a la participación, tanto física en las asambleas -por las limitaciones de horario para las personas que trabajan o con responsabilidades familiares- como telemática, para salvar la brecha digital de quien no tiene internet o no sabe manejarse con él.

Y al final del proceso, las elecciones

De las propuestas, debates, enmiendas y votaciones de las próximas semanas habrá de salir una estructura organizativa que convierta a Podemos en un partido político. Se imponga el modelo de partido esbozado por el equipo de Pablo Iglesias o cualquiera de las alternativas, la idea es que Podemos sea lo que la gente de Podemos quiere que sea.

En Podemos Granada esperan al menos que el proyecto político que salga de todo este proceso cuente “con las estructuras necesarias para favorecer la participación de cada vez más personas y hacer llegar las propuestas de la gente de a pie a las instituciones”.

“Podemos se definió desde el principio como gente corriente haciendo política y creo que así debería seguir siendo”, piensa Jesús de Manuel.

“De este proceso esperamos unas bases democráticas reales formada por todos los ciudadanos que queremos cambiar el sistema actual español”, coinciden en Castilleja de Guzmán.

Podemos obtuvo en las elecciones europeas casi 190.000 votos en Andalucía, un 7,11% del total, lo que lo colocó con apenas unos meses de vida como la quinta fuerza política en la región, y encuestas electorales recientes les sitúan ya como tercera opción, con el 18,1% de los votos.

“No sabemos cómo están todos los municipios de preparados para las elecciones, pero creemos que hay que seguir trabajando en ello. Nosotros estamos convencidos de que podemos irrumpir en el panorama político”, concluye Esther.