David Catalán triunfa en EGO con una colección inspirada en los "sin techo"
- Destacan los trabajos de Eva Soto Conde, Miguel Alex y Leonor Pando.
- La literatura marginal y el cine de palomitas inspiran a los jóvenes talentos
- Destaca la presencia de Satu Maaranen, de Finlandia
- Los ecos de la fiesta de Alvarno se siguen escuchando en MBFWM
"El dinero me da igual, yo quiero desfilar en una pasarela internacional". Decía David Catalán antes del desfile. Y lo ha conseguido porque el premio a la mejor colección de EGO le permitirá presentar su próxima colección en Estambul.
Este riojano ha convencido al jurado con una propuesta inspirada en la vestimenta de los vagabundos, los habitantes de la calle."Me fijé en que llevan muchas capas, una encima de otra, y que se visten con lo primero que cogen, da igual que sea rosa o azul", cuenta el joven que vive en Oporto y ha participado en desfiles en Portugal.
Look deportivo, la máxima tendencia
La improvisación, el querer llevar todo lo que se posee y el querer pasar desapercibido se trasladan a la colección. Vemos prendas deportivas, siluetas XXL y una carta de colores en contraste, con amarillo, rosa, azul cielo, crudo, azul noche y negro.
Trabaja Catalán con tejidos termocolados y propone para las chicas vestidos de manga acampanada mientras que para ellos la manga se estrecha. Los pantalones, en cambio, son amplios para los dos, casi una falda-pantalón o una minifalda-short.
Hay sudaderas en felpa que imita el denim y acolchados gráficos y otras en neopreno muy fino con cremalleras laterales. Destacan los vestidos de mujer con detalles tridimensionales y los abrigos oversized cruzados que llevan elásticos en el bajo.
El joven ha hecho practicamente toda la colección con sus manos, incluso los bolsos, collares y hebillas que van en plástico, y que están inspiradas en los pastilleros. "Espero darme a conocer", dice, "ya me tocaba".
Fin de la jornada, fin de un sueño
Tras anunciarse el premio fue el turno de Victor Von Schwars; imaaginamos que algo triste al saber que no era el ganador. Está en EGO por tercera vez en tres años porque viene cada doce meses y lo hace con colecciones de "largo recorrido" para que le abarque varias temporadas. Su colección habla de narcos y sirenas, de malotes y mujeres seductoras.
En la pasarela vemos a los chicos con prendas urbanas,en negro, looks raperos, códigos del hip-hop y prendas de abrigo oversized. Para ellas, vestidos muy trabajados, en todos los tonos suaves de azul y rosa, entre los que destacan los que llevan volantes deshilachados en degradé.
El cierre de la jornada lo ha puesto la finlandesa Satu Maaranen, con una propuesta solida, de espíritu joven que exhibe un gran trabajo de patronaje, jugando con los estampados y las texturas en contraste.
Un trabajo inusual
Horas antes fue el turno de Eva Soto Conde y sus prodigiosas manos. La gallega insiste en trabajar sin costuras, realizando las prendas uniendo piezas y elementos que trabaja con la técnica de la papiroflexia y el origami.
Colores alegres, como fucsia, rojo y malva, alegran aún más prendas de volúmenes inventados, vestidos-joya con patrones asimétricos y otros con delicadas flores de escayola que pintó a mano. Toda la propuesta desprende un aroma de alta costura, de preciosismo, de artesanía.
Esta colección es más fácil de llevar que otras anteriores pero no por eso menos trabajada. Al contrario, Soto Conde se ha dejado la piel en ella y también algunas lágrimas que se han transformado en emociones que van escondidas entre los pliegues de cada vestido.
Jóvenes ocultos
Las Vivian Girls, obra de Henry Darger, inspira la propuesta "peculiar" de Elena Rial. Una colección de tintes siniestros edulcorada con colores y motivos college. Las prendas, un tanto invernales, llevan escudos y banderas bordadas, y estampados, ¡ojo!, de ET con peluca rubia. Increíble, pero cierto
.Películas como Las Virgenes Suicidas, series como Twin Peaks y cintas de serie B sobre asesinatos en institutos norteamericanos inspiran a Laura González para hacer una colección unrbana, gótica y joven. Lleva estampados con dibujos de perritos calientes, lápidas, rosas y hamburguesas y también de chicas que hacen surf. "No he querido ambientarlo en Halloween, más bien trasladarlo a la costa californiana".
Vuelve Miguel Alex, vuelve la moda
Nos convenció en febrero y ahora vuelve a hacerlo. Miguel Alex tiene un talento especial y una gran sensibilidad para trabajar los tejidos y utilizar el color. La niebla le sirve de pretexto para ahondar en una sensación con la que convive.
Cuenta que quiere aislarse, protegerse de comentarios ajenos y centrarse en su trabajo. Por eso la niebla, fenómeno que lo envuelve todo, como una coraza.
Y esa niebla se representa con la organza que contruye chaquetas, una bomber, tops y casacas, a veces deshilachadas, rotas, para expresar el momento final, el clímax, la salida del ostracismo.
Vemos detalles metálicos, en oro y plata, que se presentan empolvados, al estilo del resto de la propuesta. Destacan los bordados de cristal de Swarovski, sencillos, velados por una transparencia, casi escondidos pero con una misión: sujetar la prenda para que no se desboque.
Se apuesta por las superposiciones que crean juegos de texturas y color, por las asimetrías y los tirantes de plexiglás que hacen que las prendas parezcan flotar en el aire. Los bolsos, geométricos y con asa elástica, y los pendientes, de geometrías y capas de distintos materiales de la colección, son detalles de buen gusto que aportan un plus a la colección.
Vamos de procesión
Una saeta y gemidos dan paso a un fashion film que precede al desfile de Beatriz Peñalver que se estrena en EGO y lo hace revisando la cultura de su Granada natal, de Andalucía. “Es mi primer desfile y quiero entrar en la moda por la puerta grande”, dice esa joven que hasta hace poco trabajaba en un banco.
Para salir al ruedo revisa la iconografía de tierra, Granada, y mezcla códigos de la Semana Santa, la cultura gitana y los años 80. ‘Perdón’, título de la colección, mezcla colores intensos como el morado nazareno y rojo clavel, “como en los tronos de las procesiones”.
Destacan las serigrafías con motivos religiosos y un estampado que se repite en varias prendas basado en la una pared de la Cartuja de Sevilla que lleva peladillas, porque “los gitanos en vez de arroz tiran peladillas a los novios”.
Algunas prendas llevan volantes pero “alejados del traje de gitana porque me inspiré en los candelabros de los tronos. Otras llevan adornos en punto realizados por un anciano artesano de Almuñecar, donde está su estudio, su taller, su laboratorio de ideas.
Nuestros orígenes
La murciana Leonor Pando aterriza en Madrid con una colección atemporal inspirada en las vestimentas clásicas del Mediterráneo. Vainicas mallorquinas, tintes naturales con colores neutros y siluetas en forma de ‘T’ o rectangulares .
No podía faltar una prenda tan apegada a nuestras costas como la túnica, prenda unisex, versátil y que “gusta a todas las edades”, dice Pando. Tampoco texturas como el lino, que es la base de la colección. Al principio con yutes tejidos a mano, troquelado y teñido después.
Y todo hecho a mano, cuidando cada detalle, “desde dentro, rematando las costuras y los dobladilos". Así, lo que parecen pinzas son en realidad pliegues que recuerdan a los vestidos griegos o romanos y las superposiciones que envuelven el cuerpo son herencia de los tuareg.
Yono Taola, en la sombra, ayuda en los minutos previos al desfile. “Ha sido mi profesor, mi compañero y ahora es mi amigo. Estoy muy arropada y estoy viviendo esta primera vez aquí mejor de lo que esperaba”.
Buscarse las habichuelas
Un pixel como punto de partida, como unidad para crear una imagen. Con esta referencia Paula Andrés, creativa de la firma POL, arranca la colección y lo hace con tres elementos que se repiten a lo largo de la colección: las tiras, las pinzas y los pliegues.
Tres elementos que aplica a todo tipo de prendas, casi siempre en tonos de blanco porque “ es el color con el que mejor se ven los patrones” y con destellos de lamé.
Vemos un buen trabajo de plisados y de bordados, unos con grandes círculos de plástico y otros de diferentes materiales que, al verlos, parecen un pixelado fotográfico multicolor que, sin embargo, parece azul.
Blanco, azul, verde menta y gris le sirven para unificar la propuesta que ha realizado con sus manos, en su taller de Madrid. Vende online, “sobre todo a países del norte como Finlandía y Holanda”.
Esta es la última vez que puede estar en EGO y ahora “quiero seguir desfilando, aquí o fuera, incluso fuera de España, donde me den una oportunidad” .
Costuras y electricidad
Pepa Salazar es la estrella del EGO. Las dos veces que ha pisado esta plataforma se ha llevado el premio a la mejor colección. Ahora ha abierto el calendario con el esperado desfile de Samsung Ego Innovation Project , un espacio dedicado a las tecnologías que se aplican a la moda. El futuro de la costura, o el presente.
Salazar ha trabajado con tejidos hidrocrómicos, que cambian de color al contacto con el agua, y tejidos hidrófugos, que repelen los líquidos.
Y para mostrarlo, ha colocado una estructura similar al lavado automático de coches para que las modelos pasaran bajo los chorros de agua y así pudiéramos comprobar las reacciones de las prendas.
La colección se tinta en azules, amarillos, verdes y rosa, siempre en tonos pastel, y se construye con patrones geométricos que llevan plisados, drapeados y juegos de superposiciones.
En el montaje ha colaborado el colectivo Taller de Casquería que extiende su labor en campos relacionados con el arte, la comunicación y la arquitectura. Lo dicho... no es el futuro, es el presente.