Cameron, el primer ministro conservador que arriesgó el Reino Unido y ganó a medias
- Pactó la celebración del referéndum con Alex Salmond
- Su perfil elitista y conservador no ha beneficiado al campo unionista
El 15 de octubre de 2012, David Cameron, primer ministro británico, firmó con el ministro principal de Escocia, Alex Salmond, el llamado acuerdo de Edimburgo para la celebración de un histórico referéndum sobre la independencia.
Entonces, la unión de Gran Bretaña no parecía en peligro, porque la pasión independentista no se había desatado y la opción secesionista aparecía muy detrás en las encuestas. Pero en las últimas semanas, en las que los sondeos auguraban un resultado ajustado, muchos han criticado al primer ministro tory por correr riesgos innecesarios.
Con la victoria del 'No', Cameron ha ganado su apuesta y ahora tendrá que cumplir su palabra de dar mayores competencias a Escocia. El primer ministro ha anunciado en Downing Street que la reforma será más profunda y afectará también a Inglaterra, que podrá obtener competencias e incluso un Parlamento.
Lastre para el campo unionista
Cameron ganará prestigio en Londres con este resultado, pero en Escocia seguirá siendo visto como el prototipo del inglés aristocrático, lo que ha provocado recelos durante la campaña en una región mayoritariamente laborista.
Es por eso que Cameron ha medido su presencia en la campaña para no perjudicar al bando unionista. Cuando finalmente, azuzados por el revés en las encuestas, los políticos de Londres visitaron el norte, Cameron elaboró un discurso a la vez emotivo y trufado de malos augurios económicos en caso de ganar el "sí". "No rompáis esta familia", rogó el primer ministro a los escoceses.
Nacido en Londres el 9 de octubre de 1966, Cameron procede de una familia aristocrática y sus antepasados estaban emparentados con el rey Guillermo IV (1765-1837) de Inglaterra, pero sus raíces paternas proceden del condado escocés de Aberdeenshire.
El jefe del Gobierno británico siempre ha remarcado estos lazos familiares escoceses para fortalecer la causa unionista.
Un curriculum conservador
Tras pasar por el colegio secundario de Eton, a las afueras de Londres, Cameron estudió Filosofía, Política y Economía en el Brasenose College de la Universidad inglesa de Oxford.
Después de graduarse, su padre le consiguió un trabajo como administrativo en una empresa de Hong Kong, donde estuvo apenas tres meses antes de volver a Londres para entrar en política. Fue asesor especial del exministro británico conservador de Economía Norman Lamont, bajo el mandato de John Major.
Tras un primer intento frustrado por lograr un escaño en 1997, entró finalmente en el Parlamento en las generales de 2001 por la circunscripción de Witney, en el condado inglés de Oxfordshire.
A partir de entonces, su carrera fue meteórica y, tras la victoria de los laboristas en las generales de 2005, fue elegido líder del partido en sustitución de Michael Howard.
Después de más de diez años de gobiernos laboristas y sumido el Reino Unido en una profunda recesión, Cameron llegó al poder en mayo de 2010 gracias a una coalición con los liberaldemócratas. Las políticas de recortes del Gobierno han sido muy criticadas por la oposición, que le acusan de beneficiar a las clases altas.
Además de pactar el referéndum de Escocia, Cameron ha prometido una consulta sobre la pertenencia o salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) si los tories ganan las generales de 2015.