Benicio del Toro, entre el pasotismo y el carisma

• El segundo premio Donostia de la edición presenta Escobar: paraíso perdido
• Una película sobre el narcotraficante colombiano Pablo Escobar
• “Cualquiera que lea sobre Escobar siente el dolor que pasó por Colombia”

Benicio del Toro recibe en San Sebastián el Premio Donostia como reconocimiento a su carrera

La presencia de Benicio del Toro en San Sebastián marca el principio del fin de la 62 edición, que se prepara para recapitular y entregar el sábado 27 sus galardones. Antes, el actor puertorriqueño, de 48 años, ha agradecido en rueda de prensa su Premio Donostia y presentado su nuevo trabajo Escobar: paraíso perdido, en la que interpreta al narcotraficante colombiano Pablo Escobar en la primera película del director por Andrea Di Stefano.

Del Toro se ha ajustado a su fama de pasota, sin entrar al trapo de las preguntas que la lanzaban más de lo que le ha apetecido. ¿Le gustaría hacer más comedias? “Sí”. Y silencio. ¿Le gustaría hacer más películas en España (acaba de rodar con Fernando León de Aranoa)? “Sí, pero como no vivo en España, no voy al cine a ver sus películas”. ¿La película más difícil que ha rodado? “La película del Che fue la más difícil, la más complicada”. Y sonrisa de encanto. Porque desidia al contestar aparte, nadie ha tenido más paciencia que Del Toro para aceptar fotografiarse con quien lo pidiese.

El actor, ganador de un Oscar a mejor actor de reparto por Traffic en 2003 y del premio de intrepración en Cannes por Ché, el argentino en 2008, se ha visto superado en el 'histeriómetro' de la alfombra roja por el joven Josh Hutcherson, protagonista de Los juegos del hambre.

Hutcherson es el verdadero protagonista de Escobar: paraíso perdido interpretando a un joven surfero irlandés que durante unas vacaciones en Colombia se enamora de la sobrina de Pablo Escobar. Aunque la película pivota sobre Escobar en muchos aspectos en un personaje en off.

“Es un honor es la primer vez que me dan un premio de ese tamaño, un premio por un carrera”, ha dicho del Premio Donostia. “También por ser del Festival de San Sebastián. Llevo años viniendo y es de los que más me gustan”. Hace dos años, Del Toro entrego a Oliver Stone su permio Donostia.

¿Qué ha aprendido de Escobar preparando el personaje? “Sé más”. Ante el silencio seguido de risas de los periodistas, amplia su respuesta. “Una de las cosas es como él vende una esperanza a un pueblo. Ese momento en el que se vuelve político, que es un momento crucial en su historia”, explica. “Yo sentí ese dolor que pasó por Colombia, cualquiera que lea sobre Pablo lo siente. Llegó a ser como el joker en un cuento de Batman: arrodilló al gobierno de un país”.

Y así se ha despedido hasta esta noche a las 22.00 h. cuando recibe el Premio Donostia. Aliviado de no contestar más preguntas. Haciéndose fotos durante un rato largo.