Alemania investiga presuntos malos tratos de guardas privados a asilados en Renania
- Se han conocido por unas imágenes difundidas el domingo
- El Gobierno local se compromete a actuar con contundencia
- Berlín exige el esclarecimiento total del caso
Las autoridades de Renania del Norte-Westfalia (oeste de Alemania) han abierto investigaciones por presuntos malos tratos a peticionarios de asilo de varios centros de acogida de ese "Land", infligidos por guardas de seguridad privados contratados para atender a los recién llegados. Unas imágenes de vídeo tomadas desde un teléfono móvil, difundidas el domingo y en que se ve a un acogido de un albergue de Burbach sometido a tratos vejatorios, han sido el detonante de las pesquisas, extendidas este lunes a varios centros del "Land".
En la grabación, de unos 10 a 15 segundos de duración, de observa cómo los guardas de seguridad intimidan e insultan a un acogido, echado en el suelo junto a un colchón manchado de vómitos.
En otras imágenes se ve a otro asilado, al que se retiene en el suelo mientras un guarda le pisa la nuca con la bota, en presencia de un compañero de los servicios de seguridad, mientras se sucede el goteo de denuncias de casos parecidos de insultos, palizas y trato vejatorio.
El portavoz del gobierno de Angela Merkel, Steffen Seibert, ha expresado su estupor por esas imágenes, ha apremiado al esclarecimiento total del caso, al tiempo que aludía el párrafo de la Constitución según el cual la dignidad humana "es inviolable" y recordaba que ello incluye a los refugiados.
Denuncias de malos tratos en otros albergues
Desde el ejecutivo regional del "Land", su ministro de Interior, Ralf Jäger, se ha comprometido a actuar con contundencia e investigar el asunto hasta sus últimas consecuencias.
De acuerdo a las informaciones difundidas este lunes por la policía local, existen denuncias de malos tratos en otros albergues de Essen, una de las principales ciudades renanas, así como en Bad Berleburg, otra localidad del "Land".
En todos esos casos, los responsables de los presuntos malos tratos son guardas privados, contratados por la entidad que gestiona esos albergues, European Homecare. Fuentes de esa compañía han afirmado este lunes estar investigando el asunto y han atribuido lo ocurrido a que, con las prisas por la llegada de un contingente de asilados, se vieron obligados a contratar personal adicional sin haber examinado su currículum y experiencia profesional.
Según medios alemanes, al menos cuatro de los guardas de seguridad implicados en esos casos tenían antecedentes penales. European Homecare ha rescindido el contrato que tenía con la empresa de servicios que suministraba ese personal y la ha sustituido por otra considerada de mayor solvencia.
Altas cifras de solicitantes de asilo
Estos casos se producen en un año con altas cifras en cuanto a nuevos solicitantes de asilo en Alemania, cuyo gobierno reclama un reparto equitativo de los peticionarios entre los distintos países de la Unión Europea (UE).
Entre enero y agosto se han cursado ya 99.592 solicitudes de asilo y para el conjunto del año se espera se superen las 200.000 peticiones, según cifras del departamento federal de Migración y Refugiados.