El ex primer ministro búlgaro gana las elecciones pero tendrá que buscar apoyos para gobernar

• El partido GERB ha conseguido la mayoría, pero no le basta para gobernar
• Los socialistas viven la mayor derrota en su historia a más de 15 puntos
• Expertos y políticos coinciden en la necesidad de un gobierno sólido
• Bulgaria ha celebrado las quintas elecciones en menos de dos años

Boiko Borisov, líder del partido de centro-derecha búlgaro GERB, al depositar su voto.

El partido de búlgaro de centro derecha GERB se perfila como ganador de las elecciones generales celebradas este domingo en el país. Sin embargo, ha fallado en lograr la mayoría en unos comicios muy fragmentados que han dejado un parlamento dividido en ocho partes que forzarán de nuevo a la creación de una coalición.

En las quintas elecciones celebradas en Bulgaria en los últimos dos años, el GERB se ha hecho con el 33% de los votos, a mucha distancia del Partido Socialista de Bulgaría (BSP), una coalición de partidos de izquierda que se queda con el 15% de los votos y protagoniza un descenso histórico. Sus resultados están tan solo un punto porcentual por encima de los del Movimiento por los Derechos y las Libertades (MRF) pero las posiciones podrían m cambiar cuando finalice el recuento de los votos enviados desde el extranjero según informa la agencia de noticias búlgara BTA.

En cuarto lugar, se encuentra la coalición del Bloque Reformist, entre el 8 y el 9%, seguida de la coalición Frente Patriótico con poco más del 7% y el partido Bulgaria sin Censura (BwC) con un 6%. Las coaliciones ABV y el partido Ataka se quedan a las puertas del emiciclo con un 4%.

En busca de un gobierno de estabilidad

Con esta correlación de fuerzas,  formar el próximo gobierno del país puede ser tremendamente difícil,  algo de lo que ya advertía el líder del GERB, antiguo guardaespaldas y experto en cárate, que aseguraba que su partido mantendrá reuniones internas este lunes para decidir cómo proceder.

"Con esta configuración no veo cómo se puede formar un gobierno", expresaba el ex primer ministro y ganador de las elecciones Boiko Borisov que baraja la idea de formar una coalición asumiendo los "riesgos" de gobernar y haciendo "todo lo necesario" para evitar otra elección.

El nuevo gobierno será el quinto para el país balcánico en dos años, un periodo en el que ha vivido protestas en las calles que casi logran hacer caer a su predecesor, también miembro del GERB.

En los últimos meses, la inversión directa extranjera ha caído una quinta parte, por lo que una búsqueda de más estabilidad es una necesidad para el pueblo, pero también para los inversores, que ven en el país un pozo sin fondo que va de una crisis a la siguiente.