Francia pide más fondos en la cumbre europea del empleo y España, que le adelanten el dinero
- Hollande propone aumentar la dotación hasta 20.000 millones en 2020
- Rajoy quiere los fondos "cuanto antes" porque podrían rebajar el déficit
- Un millar de manifestantes han protestado contra las políticas de austeridad
Francia ha propuesto ampliar la dotación de la garantía juvenil hasta 20.000 millones y España ha pedido que el dinero ya aprobado, 6.000 millones de euros para 2014 y 2014, llegue cuanto antes. Ambos países han defendido sus posturas en la cumbre extraordinaria sobre el empleo, celebrada en Milán.
En la capital lombarda, la UE ha estudiado cómo dirigir mejor sus esfuerzos para luchar contra el paro, en especial el juvenil. Con este fin cuenta con los citados 6.000 millones, que aún no están destinados en su totalidad a proyectos específicos, han criticado algunos líderes.
Tras la cumbre, la canciller alemana, Angela Merkel, ha señalado que "la cuestión no es que no haya suficiente dinero", sino que este necesita fluir.
"Necesitamos invertir pero tenemos que saber dónde debemos invertir, necesitamos individualizar cuales son las profesiones del futuro y sobre esto hacer las inversiones justas", recalca Merkel, para quien no es coincidencia que el desempleo de algunos países duplique al de otros.
El presidente francés, François Hollande, que acudía a esta cumbre con la idea de reclamar que la Unión Europea (UE) apruebe fondos de 20.000 millones de euros hasta 2020, ha reconocido que antes de hablar de elevar las cantidades, hace falta usar los fondos que ya han sido aprobados.
El primer ministro italiano y presidente de turno de la UE, Mateo Renzi, ha advertido de que "estamos perdiendo una generación entera de europeos" y "algo no está funcionando en Europa cuando se han perdido los empleos que se han perdido desde 2008".
España aboga por aumentar la prefinanciación
La ministra de Empleo, Fátima Báñez, ha reclamado que a nivel europeo se complementen los esfuerzos de los estados miembros en la lucha contra el paro. En particular, España pretende un incremento sustancial de la prefinanciación europea de la garantía juvenil, y que vaya más allá del actual 1,5% para ser incluso superior al 50%.
Bruselas va a adelantar el primer porcentaje a los países miembros a partir de noviembre, cantidad que después se irá completando progresivamente. En el mismo sentido, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha pedido a la Comisión Europea que "adelante los fondos para la garantía juvenil cuanto antes" pero ha explicado que el Ejecutivo "ya ha puesto en marcha su programa".
De los 6.000 millones de euros hasta 2015 para facilitar el empleo a los jóvenes, 1.887 millones serán para España, y se repartirán con las comunidades autónomas. Rajoy ha apuntado que el adelanto del dinero "nos vendría bien para reducir el impacto en el déficit público".
Entre otras medidas, España va a facilitar la contratación indefinida de jóvenes menores de 25 años no ocupados y acogidos al plan de garantía juvenil, lo que supondrá un descuento para las empresas en las cotizaciones que pagan a la Seguridad Social de 300 euros mensuales durante medio año.
Un millar de manifestantes protestan por las políticas de austeridad
Alrededor de un millar de personas se manifestaron cerca del centro de congresos de Milán donde se celebra la cumbre sobre empleo de presidentes y jefes de Estado de 15 países de la Unión Europea (UE).
La manifestación ha recorrido esta mañana la distancia que va de la cercana plaza Lotto al Centro de Congresos (MiCo) de la capital lombarda, donde se desarrolla este encuentro organizado por la presidencia de turno del Consejo de la UE, que este semestre recae en Italia.
En cabeza de la manifestación los participantes llevaban una pancarta con el lema "Devolvamos el futuro a Italia" y coreaban lemas contra la austeridad.
El líder de la Federación de Operarios Metalúrgicos (FIOM), Maurizio Landini, ha avanzado que esta sería la primera manifestación de una temporada en la que se producirían más y añade que están preparados para "ocupar las fábricas".
En la movilización han participado los 150 empleados de Nokia en la planta milanesa de Cassina de' Pecchi y que recientemente han sido despididos. Durante la convocatoria, en la que se lanzaron algunas bengalas, los participantes han criticado las políticas de austeridad en la UE.