CC.OO. dice que los sanitarios rechazan contratos por miedo y piden el cese de Mato y Rodríguez
- Reconocen que cosas erróneas en el protocolo "ahoran se están solucionando"
- Ven "desacertada" la repatriación de los dos misioneros por la falta de medios
El sindicato de CC.OO. de Madrid ha reconocido este viernes que algunos profesionales sanitarios han renunciado a sus contratos en el Hospital Carlos III por temor a contagiarse de ébola. "Han aceptado el protocolo tal cual nos lo han dado", y "se ha visto que no ha funcionado, esa es la inseguridad que ellos tienen", ha explicado la secretaria de la sección sindical de CC.OO. en La Paz- Carlos III, Esther Quiñones.
Quiñones ha asegurado que hasta el pasado lunes "se presentaban voluntarios" para atender a los enfermos de ébola, pero que las declaraciones de la ministra Ana Mato tras el contagio de la auxiliar de enfermería "no han dado seguridad". "Cojo un contrato y no sé lo que me puede pasar", ha añadido para trasmitir la inquitud de los empleados.
La investigación por el primer contagio de ébola en Europa continúa para esclarecer en qué momento falló el protocolo. Desde CC.OO. aseguran que cosas que no eran correctas "ahoran se están solucionando". "Ahora hay cámaras", han explicado, al tiempo que han criticado que "no puede ser suficiente una fotocopia" para saber cómo ponerse o quitarse un traje.
Piden el cese de Mato y Rodríguez
El secretario general de CC.OO. Madrid, Jaime Cedrún, relaciona el temor de los compañeros con la falta de confianza hacia los que gestionan la Sanidad, por lo que pide un "cambio urgente" y el cese de la ministra Mato y del consejero madrileño, Javier Rodríguez.
Cedrún ha calificado de "bochornoso desencuentro" la relación entre el Gobierno central y el regional en esta emergencia sanitaria, y ha criticado las "declaraciones explosivas" con las que buscan "linchar" a las víctimas.
“ Solo hubiera sido necesario adecuar los protocolos con un esfuerzo mínimo“
El sindicato ha exigido a la Fiscalía de siniestralidad que investigue los hechos porque considera que "se ha expuesto a los trabajadores a un riesgo" y ha tachado de "decisión errónea" y "profundamente desacertada" traer a España a los dos misioneros contagiados, pues en su opinión el Hospital Carlos III no estaba preparado para tratarlos.
Denuncian que el que en su día fue el centro de referencia para las enfermedades infecciosas, tenía la sexta planta "semidesmantelada" cuando debía recibir a los enfermos con ébola. Asimismo, aseguran que hasta el día 7 de octubre, mismo día en que ingresó la auxiliar de enfermería, no se publicó en la intranet del hospital el protocolo de actuación contra el mortal virus.
"Esto ha sido una crónica anunciada", afirma el sindicato, que achaca el contagio de la empleada a la falta de precaución. "Estas situaciones son previsibles (...) Solo hubiera sido necesario adecuar los protocolos con un esfuerzo mínimo".