Hallan nuevas fosas comunes en México donde desaparecieron los 43 estudiantes

• Los cadáveres también están calcinados como el resto encontrados
• Peña Nieto pide que se agilice la investigación
• De momento no se ha confirmado que los cuerpos sean de los estudiantes

La policía de Iguala investiga en el área donde han sido encontradas las nuevas fosas comunes.

El caso de los 43 estudiantes desaparecidos en la ciudad mexicana de Iguala se ha avivado de nuevo este viernes con el hallazgo de cuatro fosas donde podrían encontrarse más cadáveres, tras los 28 cuerpos hallados la semana pasada.

El procurador (fiscal) general de México, Jesús Murillo Karam, ha anunciado el descubrimiento de las nuevas fosas gracias el testimonio de cuatro personas detenidas en las últimas horas y que confesaron haber depositado en ellas "cuerpos de los estudiantes asesinados".

Las autoridades han añadido que esos últimos detenidos no son policías y que se investiga a quién respondían los cadáveres.

El fiscal ha explicado también que los primeros restos que se hallaron en las nuevas fosas están calcinados de manera similar a los encontrados en las cinco descubiertas el sábado, pero que aún no saben cuántos cuerpos podrían encontrar. Hasta ahora, ha indicado, no se ha podido confirmar que los restos sean de los estudiantes desaparecidos y se esperará a que concluya el proceso de levantamiento de los cadáveres.

La identificación de los restos humanos localizados está a cargo de peritos mexicanos y argentinos, aunque es un proceso que puede tardar de dos semanas a dos meses.

Peña Nieto pide avances en la investigación

Murillo Karam ha revelado estos avances en el caso horas después de que el presidente de México, Enrique Peña Nieto, urgiera al gabinete de seguridad a agilizar la investigación sobre los hechos de violencia en Iguala y dar con los responsables de los actos criminales.

Peña Nieto ha calificado lo sucedido como "verdaderamente inhumano, prácticamente un acto de barbarie", y ha pedido acelerar la investigación para "dar con aquellos que por negligencia o actuación permitieron o solaparon que esto hubiese ocurrido en Iguala".

El anuncio del avance de la investigación también corresponde al clamor de miles de mexicanos que el miércoles exigieron al Gobierno justicia y encontrar a los desaparecidos en manifestaciones multitudinarias en diversas ciudades y en otros países.

El pasado 26 de septiembre pasado, la policía municipal de Iguala atacó a tiros a un grupo de estudiantes que se había apoderado de unos autobuses, lo que causó seis muertos y 25 heridos, mientras que 43 estudiantes siguen desaparecidos.

El alcalde de Iguala, en busca y captura

Después del hallazgo de las primeras cinco fosas con cuerpos calcinados el sábado pasado en un sitio cercano a Iguala, el Gobierno mexicano tomó el control de las investigaciones y envió a las fuerzas federales para encargarse de la seguridad en este municipio.

Después de casi dos semanas de esos hechos, las autoridades han arrestado a 30 personas, de las que 22 son policías municipales presuntamente vinculados con Guerreros Unidos, un grupo que surgió en 2011 como una escisión del cártel de los hermanos Beltrán Leyva.

Por otra parte, los agentes de la fiscalía trabajan para localizar al alcalde de Iguala, José Luis Abarca, a su esposa, María de los Ángeles Pineda, y al director de seguridad pública municipal, Felipe Flores, para aclarar su vinculación con los actos de violencia.

El objetivo es que declaren sobre esos hechos y una vez lo hagan se podrá saber si se les imputan responsabilidades penales.