EE.UU. dice que tiene permiso para usar bases militares turcas contra el EI pero Turquía lo niega
- Sí hay acuerdo para entrenar a grupos rebeldes sirios en territorio turco
- Los choques continúan en Kobani para evitar que la conquisten los yihadistas
El Gobierno turco ha asegurado este lunes que ha alcanzado un acuerdo para que las fuerzas de la coalición puedan usar el territorio turco para dar entrenamiento a grupos rebeldes de la oposición siria, aunque ha negado que se haya alcanzado todavía un nuevo acuerdo para permitir a Estados Unidos utilizar su base aérea de Incirlik, en el suroeste del país, cerca de Siria, en la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
"No hay ningún nuevo acuerdo sobre Incirlik. El uso (de la base) continúa en el marco de los anteriores acuerdos. Hay demandas y expectativas (del lado estadounidense) y las negociaciones continúan", ha indicado la Oficina del primer ministro turco, Ahmet Davutoglu en una nota.
Este comunicado matiza las afirmaciones de Susan Rice, principal asesora de seguridad del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien declaró a la cadena NBC que Turquía permitirá a la coalición internacional el uso de sus bases militares para sus ataques aéreos contra el EI.
"Es un nuevo compromiso y lo acogemos con gran satisfacción", anunció Rice. El secretario de Defensa de Estados Unidos, Chuck Hagel, ya adelantó la semana pasada que el uso de las bases militares turcas era una de las peticiones clave para Washington en su lucha contra el EI.
Entrenamiento para los opositores sirios
Turquía ha apuntado una serie de condiciones para abrir Incirlik a esas operaciones, y que son: establecer una zona de exclusión aérea en Siria, así como una "franja segura" para los refugiados sirios, que en Turquía ascienden a unos 1,3 millones de personas. Se prevé que un equipo del Departamento estadounidense de Defensa viaje a Turquía esta semana para ultimar los detalles del acuerdo que aún negocian ambas partes.
Según Rice, asimismo las fuerzas de la coalición podrán usar el territorio turco para dar entrenamiento a grupos rebeldes de la oposición siria, lo que Turquía ha confirmado también. "Hay un acuerdo sobre la formación (militar) de la oposición, pero no está claro dónde y cómo serán entrenados", señala el comunicado oficial turco.
Davutoglu explicó este domingo al diario turco Star que desde Incirlik "continúan los vuelos de reconocimiento a Irak" y ha añadido que se sigue negociando su uso para operaciones de mayor envergadura.
Continúan los bombardeos en Kobani
Las fuerzas militares estadounidenses lanzaron entre este domingo y este lunes ocho nuevos ataques aéreos contra el grupo yihadista Estado Islámico en Siria, según ha informado el Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM).
Cuatro de los ataques se efectuaron en el suroeste de Kobani, enclave kurdo fronterizo con Turquía y objetivo de la ofensiva de los yihadistas desde hace casi un mes, y permitieron destruir una ametralladora pesada del EI.
Otros tres ataques golpearon el noreste de Kobani y dañaron varios edificios en poder del grupo extremista, y otra operación en el noroeste de Raqqa impactó a una guarnición del EI. Estos ocho nuevos ataques se llevaron a cabo con la colaboración de aviones de combate de Arabia Saudí, de acuerdo con el CENTCOM.
Durante las últimas 36 horas las fuerzas estadounidenses han lanzado al menos 23 ataques con el EI en Kobani y sus alrededores, detallaron fuentes militares a la cadena NBC.
"Kobani no es responsabilidad de Turquía"
Desde que el pasado 16 de septiembre se inició la ofensiva del EI sobre este enclave kurdo-sirio, al menos 554 personas han perdido la vida en enfrentamientos, bombardeos, emboscadas o asesinatos, según datos del OSDH. Entre los fallecidos, al menos 20 son civiles, 298 miembros del grupo yihadista, 226 integrantes de las YPG, nueve rebeldes de otras brigadas que apoyan a las milicias kurdas y un voluntario opositor al EI.
El 40 % de Kobani está controlada por el Estado Islámico, que la mantienen rodeada por todas partes, excepto por el norte, donde limita con Turquía, hacia donde miles de refugiados kurdo-sirios huyen de los combates. Además de la presión migratoria que recibe Ankara, también se han levantado numerosas voces que piden al Gobierno turco que intervenga militarmente en Kobani o que permita la entrada de las fuerzas kurdas iraquíes o "peshmergas" y de armamento a través de territorio turco.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha insistido este domingo en que Kobani no es responsabilidad de su país y calificó de traidores a quienes le acusan de apoyar al EI.