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La consulta alternativa de Artur Mas rompe el consenso en el bloque soberanista

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La consulta alternativa de Artur Mas rompe el consenso en el bloque soberanista

La renuncia del presidente de Cataluña, Artur Mas, a la consulta soberanista convocada bajo el decreto del 9N y la convocatoria este mismo martes de una consulta alternativa y simbólica ha hecho pedazos el bloque soberanista formado por CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP y el consenso escenificado por estos grupos desde que se convocara el referéndum catalán pese a los reiterados avisos del Gobierno de que éste nunca llegaría a celebrarse.

El propio Mas lo ha reconocido este martes en la rueda de prensa ofrecida para anunciar ese nuevo "proceso de participación ciudadana"."Hoy hay menos consenso que ayer", ha asegurado, para añadir que el Govern lo asume.

El principal apoyo de Mas en el proceso soberanista, ERC, ha ido más allá asegurando que "se ha roto la unidad". "Cuesta confiar en quien no cumple los acuerdos y cuesta llegar a acuerdos con quién no los cumple", ha dicho el líder de los republicanos, Oriol Junqueras, que ha pedido a Mas volver a la consulta soberanista inicial y si no es así, convocar cuanto antes elecciones para conseguir un único fin: la independencia de Cataluña.

Junqueras ha querido dejar claro que esa consulta alternativa "no se ha pactado" y, a su juicio, "no es la solución".

ERC señala que "la solución" pasa por unas elecciones plebiscitarias para declarar la independencia

UDC aboga por agotar la legislatura

Tras la petición de ERC de la convocatoria de las elecciones autonómicas, UDC ha contestado que aboga por agotar la legislatura y ha rechazado una declaración unilateral de independencia.

Desde UDC, que junto con CDC forma CiU, han aplaudido el proceso participativo anunciado por Mas como nuevo escenario en este proceso.

En rueda de prensa, el secretario general de UDC, Ramon Espadaler, ha lamentado la "ruptura del consenso" entre los partidos partidarios de la consulta y ha reclamado recuperar esta unidad, aunque ha avisado de que los democristianos no aceptarán volver al planteamiento inicial de la consulta del 9N.

También el portavoz de CiU en el Congreso y líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, se ha opuesto a una convocatoria de elecciones anticipadas en Cataluña "porque nadie las quiere", ha dicho, y ha apostado por mantener la estabilidad en el Gobierno de la Generalitat.

Ya habían surgido los primeros roces entre ERC y CiU cuando los primeros abogaron por la "desobediencia civil" después de que el Tribunal Constitucional decidiera suspender la consulta. El caso Pujol tampoco ayudó a limar asperezas ya que CiU no vio con buenos ojos el apoyo de ERC a la comisión de investigación sobre el dinero oculto de Jordi Pujol durante más de 30 años, aunque finalmente el partido del expresident también aprobó investigar el caso.

Junqueras ha dicho que "aunque se ha roto la unidad, se puede recuperar" si se vuelve a los términos de la primera consulta, algo a lo que CDC ya se ha negado y a lo que el propio Mas también se opone. No descarta el presidente de la Generalitat, eso sí, las elecciones anticipadas "plebiscitarias" aunque las ha planteado "de aquí a 2016".

Desde ERC han señalado que si finalmente se opta por el modelo de consulta simbólica, la apoyarán "con todas sus fuerzas" a fin de que los catalanes puedan votar el 9N aunque sea de forma simbólica.

ICV critica a Mas y la CUP se siente "engañada"

Los otros dos partidos del bloque soberanista también han criticado con dureza el nuevo escenario. El líder de ICV, Joan Herrera, ha afirmado que su partido no avala la propuesta del presidente catalán porque "no es una consulta alternativa" sino un "sucedáneo y un sustituto" con la que pretende "salvarse", y ve en esta iniciativa un primer "acto de precampaña" ante unas plebiscitarias.

"La propuesta de hoy de Mas, sin un registro de votantes, no es una consulta, no es salvar la consulta, es salvar su promesa, devalúa la consulta y nosotros no lo avalamos", ha dicho el dirigente ecosocialista, quien ve "cálculos electorales" en esta iniciativa del Govern de CiU como un primer acto de precampaña de cara a unas plebiscitarias.

Antes de la comparecencia de Artur Mas, las CUP daban por rota la unidad del bloque soberanista. El diputado de esta formación Quim Arrufat insistía en que el referéndum es "innegociable".

La CUP, que "se siente engañada", ha reprochado a Mas que quiera hacer "una consulta partidista" y ha puesto en duda que el Govern quiera llegar a celebrar este referendo "alternativo", del que se da una semana para decidir si da algún tipo de apoyo.

La nueva consulta tampoco convence al bloque no soberanista

Fuera del bloque soberanista, tampoco convence la nueva consulta. Así, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha calificado de "engaño" y "error" la consulta alternativa, que ven como una suerte de "gigaencuensta presencial o una huida hacia adelante que no merecen los catalanes".

"Venimos de una legislatura que acabó antes de hora y parece que ahora se va a repetir la misma historia", ha declarado el dirigente socialista, que ha recriminado al presidente de la Generalitat que, tal y como ha dicho, "no haya cumplido ninguno de los objetivos: ni el pacto fiscal, ni la reducción del paro a la mitad", ni tampoco la consulta.

Por su parte, la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, ha advertido este martes de que el proceso independentista catalán "se ha acabado", y el presidente de la Generalitat "lo sabe", como también lo sabe el conjunto de los ciudadanos de Cataluña.

En rueda de prensa en la sede nacional del PP, Sánchez-Camacho ha celebrado que no vaya a haber consulta soberanista en Cataluña y ha dicho que lo que ahora plantea Mas celebrar el 9 de noviembre "no es nada"; es solo "un simulacro de votación" con el que quiere "engañar a los catalanes" y "contentar a ERC", porque sabe que no puede haber un referéndum ilegal.

El líder de Ciutadans, Albert Rivera, ha considerado que Artur Mas, hace el "ridículo" con su consulta alternativa de "fin de semana", a la que se enfrenta "solo", sin la unidad del bloque soberanista, por lo que debe dimitir y convocar elecciones anticipadas porque "Mas ya es historia".

La Asamblea Nacional Catalana y Òmnium piden unidad

La Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural han reclamado en Bruselas al bloque soberanista que se mantenga unido como lo hace la sociedad civil para lograr una Cataluña independiente, después de la comparecencia de Artur Mas.

"El presidente ha dicho que se ha resquebrajado (la unidad), pero las cosas se pueden arreglar y nosotros intentaremos hacerlo", ha señalado la presidenta de la ANC, Carme Forcadell, en declaraciones a la prensa en la capital belga tras participar en una conferencia sobre la independencia de Cataluña en el Parlamento Europeo (PE).

"Nos sentimos decepcionados de que los partidos políticos no hayan sabido mantener la unidad como hemos hecho la sociedad civil", ha añadido. La ANC mantendrá la movilización convocada para el próximo domingo en la Plaza de Cataluña, al tiempo que animó a la participación.

Por su parte, la presidenta de Òmnium, Muriel Casals, ha señalado que "ahora no es el momento de desanimarse" y ha añadido que "pese a que el proceso es largo y difícil y el adversario muy poderoso, no nos desanimaremos".