El mexicano Jorge Zepeda gana el Planeta por su novela 'Milena y el fémur más bello del mundo'
- El ganador había ocultado su nombre tras el seudónimo de Eduardo Nevado
- La periodista Pilar Eyre ha sido finalista por Mi color favorito es verte
El escritor mexicano Jorge Zepeda Patterson (Mazatlán, 1952) ha ganado la LXIII edición del Premio Planeta, dotado con 601.000 euros, por su novela Milena y el fémur más bello del mundo.
La novela ganadora ha concurrido al certamen bajo el seudónimo de Eduardo Nevado y con el título Los crímenes del cromosoma XY, y es una obra de estilo anglosajón que habla sobre mafias ucranianas establecidas en Marbella.
La novela ha sido seleccionada entre las diez finalistas de este concurso de las letras castellanas -al que se han presentado 453 obras-, y se ha anunciado a lo largo de una cena literaria en el Palau de Congressos de Catalunya, en Barcelona.
Mientras que la periodista Pilar Eyre, que se escondía tras el seudónimo de Coral Teide, ha sido la finalista por la novela Mi color favorito es verte.
La novela ganadora se centra en un grupo de antiguos compañeros de colegio, que actualmente ocupan importantes puestos en diversos ámbitos de la sociedad, que salvan la vida de una prostituta croata, Milena, víctima de una red dedicada a la trata de personas.
El jurado del premio Planeta estaba integrado por Alberto Blecua, Juan Eslava Galán, Pere Gimferrer, Carmen Posadas, Rosa Regàs, el debutante Fernando Delgado y el editor Emili Rosales.
"Compromiso con una situación social"
En nombre del jurado, Pere Gimferrer ha dicho que la novela ganadora exhibe "una trama hábilmente enlazada, con una red que se va alimentando a sí misma y se van extendiendo" y Rosa Regàs ha subrayado que "desde la narrativa, Zepeda muestra el compromiso con una situación social, no sólo de la corrupción, sino de cosas que nos horrorizan y espantan, y apela a nuestra conciencia, a que todos somos responsables de lo que ocurre en este mundo".
Nada más conocerse el fallo, Zepeda ha dicho que "la protagonista, Milena, es una mujer de una belleza extraordinaria y eso, como suele suceder, es el origen de su tragedia".
Es una historia, ha dicho el autor mexicano, "de misterio, de amor, de aventura", que transcurre en España, Croacia, Ucrania y parte en México.
Para Zepeda, la novela ganadora narra una historia complicada que nos habla tanto de "la vida cotidiana, pero también de la condición humana".
Primer mexicano galardonado con el Planeta
No ha ocultado su satisfacción por haber ganado un premio tan importante con su segunda novela: "es un salto cuántico, me siento como un futbolista de barrio que de pronto es fichado por el Barça o el Madrid" y además "ser el primer mexicano es un aliciente añadido", un galardón que confirma "el peso de las letras hispanoamericanas en la globalidad".
La historia de Milena arranca a los 16 años cuando sale de Croacia y lo único que quiere es que cuando muera no jueguen los niños con su fémur, y en esa búsqueda termina siendo víctima de la esclavitud sexual.
"La historia que podría parecer negra y deprimente, se transforma en un relato de amor y supervivencia, en lo que esta mujer hará para sobrevivir y en el proceso acabará tejiendo poco a poco en Marbella vínculos con el poder, y atesorará secretos que le permitirán ver una luz al final de túnel".
La realidad en ficción
Aclara Zepeda que su novela es también "una historia de amistad, pues en el camino se encontrará con dos o tres amigos que vendrán en su ayuda", pero en el contexto en el que se mueve "el amor se vuelve complicado y a ella misma le cuesta reinventarse como ser humano".
Zepeda se siente pertenecer a "la estirpe de periodistas como los Pérez Reverte, Roberto Saviano o Stieg Larsson, que hemos sentido que, después de dos décadas de ejercicio periodístico, hay rincones de la realidad que la ficción puede tratar mejor ese lado oscuro de la realidad".
El lector descubre de la mano de Milena qué está pasando en esa zona del sur de España, en el que "el mundo construido por Jesús Gil y Gil no se ha ido del todo y que gracias a la globalización, lejos de convertirse en anacrónico, se ha profesionalizado".
Denuncia Zepeda que las cadenas de tráfico de personas tienen hoy un nivel de profesionalización del que carecían hace quince años, y para Milena, añade, "salir de ese mundo supone una lucha permanente".