Barroso se despide de la Eurocámara tras diez años en los que la UE estuvo "cerca del abismo"
- Ha hecho un balance de sus años de mandato
- Juncker asume la presidencia del pleno del Ejecutivo el 1 de noviembre
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, hizo este martes balance ante el pleno de la Eurocámara de los últimos diez años en los que ha estado al frente del Ejecutivo comunitario en un discurso en el que ha recordado que la UE ha llegado a estar “al borde del abismo”.
Sin papeles ni guiones, un emocionado presidente de la Comisión Europea se ha despedido ante el pleno haciendo un balance de sus años de mandato. Barroso ha destacado la capacidad de la UE de salir de su peor recesión aunque, ha reconocido, la Unión ha llegado a estar "al borde del abismo".
"Europa ha sido capaz de mantenerse abierta y unida y no ha caído en las garras del proteccionismo pese al bache económico", ha destacado Barroso que ha hecho un llamamiento a "no subestimar la fuerza de la unidad europea", informa Efe.
"Tenemos más herramientas"
El presidente de la CE ha explicado que ahora la Comisión tiene más competencias en cuanto a gobernanza de la zona euro, el Banco Central Europeo (BCE) tiene mayores poderes de supervisión de la banca europea y se ha puesto en marcha la unión bancaria, "todo ello impensable hace diez años".
"Estamos reforzados y tenemos más herramientas para que otra crisis no vuelva a ocurrir", ha añadido. Barroso ha subrayado que todavía "quedan muchos retos" pendientes y sobre la recuperación señaló que "el crecimiento que empieza aún es demasiado tímido". Pese a todo, defendió las reformas y programas llevados a cabo en los países que sufrieron dificultades en la eurozona y puso entre otros el ejemplo de España para ilustrar la opción de la recuperación gracias a las reformas estructurales.
"Hoy las reformas en España han dejado huella impresionante y la confianza ha regresado", ha asegurado Barroso, que también ha nombrado los programas aplicados en Italia, Portugal, Irlanda y Grecia. De sus diez años de mandato, también ha querido destacar que en 2007 la UE se colocó al frente de la lucha contra el cambio climático con objetivos vinculantes.
Igualmente, se ha mostrado orgulloso de la ampliación Europa que entre 2004 y 2014 ha pasado de 15 a 28 Estados miembros. "Algunos piensan que la Unión Europea cuando había menos países era una UE mejor. Yo creo que ahora Europa es mejor que cuando la mitad estaban bajo el yugo soviético", ha señalado. Como su momento más emotivo, ha destacado cuando tuvo "el honor de representar a los europeos recogiendo el Nobel de la Paz en diciembre de 2012".
En ese sentido, ha querido recordar que la UE "es una unión de valores y no podemos olvidarlos, valores como la paz". Tras sus últimas palabras ante la cámara, el presidente del Partido Popular Europeo (PPE), Manfred Weber, de la familia política a la que pertenece Barroso, dio las gracias al portugués y ha destacado que José Manuel Durao Barroso ha dejado el mensaje de que "los europeos, juntos, pueden conseguir lo que se propongan".
La gestión de la crisis griega
Crítico se ha mostrado sin embargo en nombre de los socialdemócratas europeos (S&D), su líder, Gianni Pittella, quien ha lamentado que Barroso no haya reconocido la comisión "de grandes errores" y se ha referido a la gestión de la crisis griega. "El pecado original se llama austeridad", ha afirmado el presidente del segundo grupo más numeroso de la Eurocámara.
Asimismo, echo en cara al político portugués que en su último discurso no se refiriera ni una sola vez al desempleo, "la mayor lacra que vive la UE", apuntó Pittella. En la misma línea, el líder de los Verdes europeos, Philippe Lamberts, ha arremetido contra Barroso por "responder a la crisis con la troika y la desigualdad" y por "poner los derechos de los acreedores por encima de los ciudadanos".
"La realidad es que hoy hay más personas en paro que cuando usted llegó. Y el crecimiento, ¿dónde dice que está?. Creo que ha pasado de largo y me lo he perdido", ha añadido irónico Lamberts. En la despedida de Barroso han estado presentes la mayoría de los miembros de su último colegio de comisarios pero tan solo dos centenares de los 754 eurodiputados del Parlamento Europeo.
Los miembros del UKIP (euroescépticos británicos) abandonaron la sala tras la intervención del presidente de la CE como protesta porque en la "despedida" de Barroso tan solo hayan intervenido los líderes de grupos políticos y no se haya celebrado un auténtico debate en la Eurocámara. Esta previsto que Jean-Claude Juncker asuma la presidencia del pleno del Ejecutivo comunitario el próximo 1 de noviembre.