Europa desvela este domingo la solvencia de sus bancos al culminar los test de estrés
- El BCE examina el estado de salud de 123 bancos de 19 países de la eurozona
- Ha evaluado la calidad de sus activos y ha realizado una prueba de tensión
- España se muestra optimista y cree que sus 15 entidades pasarán el test
El Banco Central Europeo (BCE) y la Autoridad Bancaria Europea (ABE) publicarán este domingo los resultados de la prueba de solvencia que han realizado a los bancos europeos, que tiene como objetivo ver la capacidad de estos para absorber pérdidas en circunstancias adversas y restaurar la confianza de los mercados financieros.
El BCE ha examinado el estado de salud de 123 bancos de diecinueve países de la zona del euro mediante dos evaluaciones, una revisión de la calidad de sus activos y una prueba de tensión.
Las instituciones de crédito significativas de la zona del euro contabilizan casi el 85% de los activos bancarios totales en la eurozona. El importe total de los activos ponderados por riesgo de las carteras seleccionadas para el análisis es de 3,72 billones de euros, lo que equivale al 58% del total de activos ponderados por riesgo de todas las entidades.
Por su parte, la ABE ha realizado las pruebas a los bancos de los países europeos que no pertenecen a la zona del euro, como el Reino Unido, Dinamarca, Suecia, Noruega y Polonia.
Requisitos para aprobar
El BCE publicará una información general sobre la prueba y también los resultados individuales de los bancos, en los que se distinguirá los déficit de capital identificados en la revisión de la calidad de los activos y en los escenario base y adverso de los test de resistencia.
Los bancos deberán demostrar que pueden tener, como mínimo, un 8% de capital de máxima calidad en el escenario base y un 5,5% en un escenario macroeconómico adverso.
Los que no logren estos porcentajes tendrán dos semanas para informar al BCE de sus planes de capital, detallando qué déficit serán cubiertos. Los bancos deberán incrementar su capital en los próximos cinco o nueves meses.
Los planes de capital que tendrán que presentar los bancos pueden incluir una retención de ganancias, pagos de gratificaciones menores, nuevas emisiones de acciones ordinarias y ventas de activos seleccionadas a precio de mercado.
Asimismo, pueden utilizar parcialmente en determinadas circunstancias deuda convertible para cubrir déficit de capital. No obstante, el uso de instrumentos de capital adicionales está limitado al 1% de los activos ponderados por riesgo.
Supervisión unificada del BCE
El BCE asumirá a partir del 4 de noviembre la supervisión unificada directa de estos 123 bancos de la zona del euro pero antes ha hecho este ejercicio de evaluación sobre la base de los balances de finales de 2013. Los escenarios se han aplicado durante un periodo de tres años, desde 2014 y hasta 2016.
El BCE también ha tenido en cuenta en el ejercicio de evaluación a los bancos las ampliaciones de capital que han acometido a lo largo de este año algunos de ellos, como los alemanes Deutsche Bank o DZ Bank, el italiano Monte dei Paschi y el portugués Millennium BCP.
Los italianos UniCredit e Intesa Sanpaolo y el alemán Commerzbank ya han limpiado sus balances y se han desprendido de activos de riesgo.
La presidenta del consejo de supervisión del mecanismo único de supervisión del BCE, Danièle Nouy, y el vicepresidente del BCE, Vítor Constâncio, informarán de las pruebas en una rueda de prensa el domingo a las 11.30 horas GMT (12.30 hora peninsular española). Asimismo los bancos centrales nacionales de los países europeos ofrecerán detalles de la situación de sus bancos.
Unos 6.000 supervisores y auditores han participado en esta prueba de solvencia a la banca europea, sin contar los propios empleados de los bancos. Algunos expertos consideran que varios bancos tienen que suspender para que las pruebas de solvencia europeas sean creíbles.
España, optimista con su resultado
Los bancos que han sido examinados (15 en España) son los que, a partir del próximo 4 de noviembre, estarán supervisados directamente por el BCE, aquellos cuyos activos superen los 30.000 millones de euros o el 20% del PIB del país de origen -BBVA, Sabadell, Popular, Santander, Bankinter, Ibercaja, La Caixa, Grupo Cajamar, Kutxabank y Unicaja, en España.
Pero también, aquellos que hayan recibido fondos del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), que en el caso español son Bankia, Catalunya Banc, BMN, Liberbank y Novacaixagalicia, ahora rebautizada como Abanca.
Un optimismo razonable domina al sector y a las instituciones económicas, y tanto el Ministerio de Economía como el Banco de España han mostrado su convicción de que las entidades españolas pasarán la prueba.
Aunque el sistema financiero español "se juega mucho", indica Domingo Mirón, gerente de Servicios Financieros de Accenture, no se esperan sorpresas negativas: Los bancos españoles han estado a la altura del reto, atendiendo los distintos requerimientos de información, cumpliendo unas planificaciones muy exigentes y comunicando continuamente el grado de avance.
Y el BCE, prosigue, ha comprometido su credibilidad en estas pruebas sólo unos días antes de empezar a ejercer de supervisor europeo único, y no puede permitirse ningún fallo.