Explota un cohete con dos toneladas de carga para la Estación Espacial Internacional
- El vehículo quedó envuelto en llamas a los seis segundos de despegar
- Tras el accidente no había indicios de daños personales
- Se están investigando las causas de la explosión
Este martes ha explotado un cohete Antares de la firma privada Orbital Sciences Corporation a los seis segundos de despegar de las instalaciones de la NASA en la Isla Wallops, en Virginia.
Así el cohete, que llevaba más de dos toneladas de carga para la Estación Espacial Internacional, quedó envuelto en llamas. Aunque las causas de la explosión aún se desconocen, la compañía está "evaluando el estado de la misión", según ha informado Orbital Sciences.
El vehículo no estaba tripulado, y como señaló la NASA después del accidente no había indicios de que haya habido víctimas. El Antares llevaba material de reabastecimiento para los tripulantes del complejo espacial y para los experimentos que allí se llevan a cabo.
Tanto la NASA como Orbital Sciences decidieron esperar al miércoles para determinar los daños ocasionados en la plataforma de lanzamiento.
Investigación de las causas de la explosión
La cuenta atrás se produjo sin problemas, con las condiciones climáticas casi ideales. En las imágenes del lanzamiento se pudo observar cómo el cohete echaba a arder unos segundos después del lanzamiento lanzando una bola de fuego al cielo.
El vicepresidente ejecutivo de Orbital Sciences, Frank Culbertson, anunció que la empresa no iba a efectuar ningún nuevo lanzamiento hasta conocer qué falló el martes y solucionar el problema.
"Es demasiado pronto para saber los detalles de lo que ocurrió. Llevaremos a cabo una investigación exhaustiva e inmediata para determinar la causa de este fallo y qué pasos debemos dar para evitar que este incidente se repita", ha afirmado Culbertson.
Por su parte, la NASA ha revelado en un comunicado que mantiene su confianza en las empresas privadas nacionales para el transporte de astronautas y material a la Estación Espacial Internacional (EEI) pese a la explosión del cohete no tripulado.
"Lo ocurrido hoy no nos desalentará en nuestros esfuerzos por ampliar nuestra ya exitosa capacidad para enviar cargamento desde suelo estadounidense a la EEI", dijo en un comunicado William Gerstenmaier, responsable adjunto del Directorio de Operaciones y Exploración Humana de la NASA.
Abastecimiento a la EEI
El cohete Antares, cuyo lanzamiento se pospuso el pasado lunes por la presencia de un barco en el perímetro de seguridad, llevaba la cápsula Cygnus cargada con más de dos toneladas de material de reabastecimiento, como alimentos y experimentos científicos.
La NASA asegura que los seis astronautas de la EEI no corren peligro de quedarse sin suministros. El cohete y la cápsula están valorados en más de 200 millones de dólares.
Como la cápsula transportaba "equipamiento criptográfico clasificado", se ha activado un perímetro de seguridad alrededor de la zona del siniestro, según ha explicado el jefe del programa Antares, Mike Pinkston.
Esta era la cuarta misión de Cygnus, incluyendo el vuelo de prueba que hizo en 2013, y el primer lanzamiento nocturno del cohete Antares. Las acciones de Orbital Science han caído un 12,7% después de conocerse el accidente, pasando a costar 26,5 dólares, una bajada de 3,87 dólares.
Lanzamientos por empresas privadas
Orbital Sciences es, junto a SpaceX, una de las dos empresas privadas contratadas por la NASA para llevar material a la EEI, mientras que Boeing y SpaceX transportarán a los astronautas estadounidenses a partir de 2017 desde EE. UU., lo que pone fin a la dependencia de las naves rusas Soyuz.
Orbital Sciences firmó un contrató de 1.900 millones de dólares (unos 1.500 millones de euros) con la NASA para efectuar ocho misiones de abastecimiento, no tripuladas, con los cohetes Antares y la cápsula Cygnus.
Por su parte SpaceX, creada por el cofundador del sistema de pago electrónico PayPal, también ha obtenido un contrato de 1.600 millones de dólares (unos 1.250 millones de euros) para llevar a cabo 12 misiones con su cohete Falcon 9 y su cápsula Dragon, que ya ha empezado a operar.