El CSN detecta "carencias" de información en el proyecto del almacén de residuos nucleares
- Solicita un informe a la Empresa Nacional de Residuos (Enresa)
- Enresa asegura que es algo "normal" en el proceso para autorizarlo
- El Gobierno escogió el municipio de Villar de Cañas, en Cuenca
El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), ha solicitado a la Empresa Nacional de Residuos (Enresa) más información sobre el proyecto del Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares de alta actividad y combustible gastado que se va a instalar en el municipio de Villar de Cañas, en Cuenca, tras detectar algunas "carencias" en la información de los trabajos previos para su construcción.
La intención del Gobierno es que los trabajos comiencen en la primavera de 2015 para que el silo nuclear pueda empezar a almacenar residuos a finales de 2017 o principios de 2018.
Respecto a este informe, al que ha tenido acceso Europa Press, fuentes de Enresa han afirmado que está ultimando la preparación de la información adicional solicitada por el CSN, y que estos requerimientos son "algo normal dentro de un proceso de licenciamiento". En este sentido, han añadido que tiene previsto entregar estos datos al organismo regulador a mediados del mes que viene.
El informe solicitaba a Enresa que le enviase los datos requeridos antes del 31 de octubre porque, entre otras cosas la información actual sobre abastecimientos, movimiento de tierras y medidas de protección, entre otros, es insuficiente.
En concreto, el informe, que ha sido realizado por el director técnico de seguridad nuclear del CSN, Antonio Munuera, reclama un estudio de caracterización del emplazamiento que incluya tres informes resumen y que integre con una única terminología los datos aportados hasta el momento: geológico-geofísico-sismológico; geoquímico-petrológico- mineralógico-sedimentológico y otro que incluya los aspectos hidrológico-hidrogeológico e hidroquímico.
Estabilidad del terreno y riesgo de inundación
Para el CSN la documentación adicional solicitada a Enresa deberá "contener evidencias y demostrar", entre otros asuntos, la estabilidad y competencia del terreno de cimentación, acotar los posibles riesgos de colapso y subsidencia; el comportamiento de las aguas subterráneas y su contribución a los riesgos de posible colapso y confirmar que la cota de explanación prevista evita el riesgo de inundación externa.
En cuanto a la hidrología superficial quiere el "detalle necesario" para identificar de forma inequívoca el nivel máximo de inundación sin riesgo para la instalación.
Por otro lado, sobre los aspectos de geología estructural, el informe de Munuera destaca que "faltan datos estructurales" para dilucidar la interpretación cartográfica y el sentido de movimiento de las fallas y que los perfiles geológicos deben tener mayor longitud "hasta zonas fuera del emplazamiento".
Sobre el abastecimiento, señala que no se informa del lugar exacto del sondeo ni la profundidad a la que se extraerá el agua ni el volumen. En cuanto a la explanación de tierras, de acuerdo con los planos aportados parece que el edificio de espera de contenedores y el propio almacén de residuos se encontrarían cimentados sobre un terraplén.
Al mismo tiempo, indica que "no existe" una cartografía estructural con la interpretación cinemática de las estructuras frágiles y dúctiles. También exige a la empresa estatal de residuos radiactivos que realice catas o trincheras más profundas para obtener un perfil hasta la zona no alterada que permita distinguir las posibles fracturas y sugiere que se ejecute algún sondeo como complemento.
Una información "crucial" sobre la estructura
En este sentido, cree que Enresa debe "justificar" su afirmación de que "los mapas no se han extendido a la nueva zona cartografiada pues carecían de interés" porque para el director de seguridad nuclear es "crucial" a la hora de interpretar la estructura profunda.
El informe contiene asimismo una batería de propuesta de actividades relativas a estos aspectos. En concreto, sobre geotecnia cree necesario justificar la ausencia de una adecuada justificación de los puntos planteados supondría que la definición de las condiciones de cimentación de los diferentes edificios y servicios del ATC carecería de un conocimiento suficiente para garantizar el comportamiento seguro de los mismos.
Por otro lado, sobre los aspectos de sismología quiere que Enresa aclare distintas cuestiones relativas al potencial de las fallas activas en la comarca y considera que restringir el análisis de deformación reciente y paleosismicidad "a un área tan pequeña como ocho kilómetros alrededor del emplazamiento" ya que "no parece suficiente por lo que se debe abordar una superficie mayor.