Paneles solares 'invisibles' que se integran en las fachadas de los edificios
- Los nuevos paneles solares pueden ser de cualquier color, incluso blancos
- Son flexibles y se integran en los edificios resultando 'invisibles'
- Pueden aplicarse en edificios de nueva contrucción o ya existentes
Los avances recientes en el desarrollo de paneles solares, aún tratándose todavía de tecnologías en desarrollo en la mayoría de los casos, deberían de servir como estímulo para evolucionar las redes eléctricas de tal modo que la electricidad de origen solar se integre en ellas de forma fácil y efectiva.
Y aunque en este sentido el de la eficiencia es el mayor de los desafíos -es decir, obtener la máxima cantidad de electricidad en relación a la energía solar captada- además de reducir los costes, existen otros obstáculos, incluyendo la integración técnica y estética de los paneles solares en el entorno.
“La eficiencia es el mayor de los desafíos en energía“
Por ahora los paneles solares son grandes, rígidos y de color oscuro, difíciles de integrar cuando se desarrolla un diseño arquitectónico o en edificios ya existentes más allá de la cubierta. Esto está cambiando poco a poco.
Paneles solares transparentes
Recientemente, investigadores de la Universidad de Michigan anunciaron que han creado paneles solares transparentes capaces de convertir las ventanas en generadores de electricidad.
Unos años atrás SRS Energy mostró sus paneles solares con el tamaño y la forma de las tejas convencionales de terracota.
En ambos casos la eficiencia energética sigue siendo muy reducida. Este tipo de paneles apenas convierte en electricidad entre un 5 y un 8 por ciento de la energía solar recibida.
En esta misma línea, que busca la mayor integración de los paneles solares en los diseños de los edificios, la compañía suiza CSEM ha dado a conocer su desarrollo de paneles solares blancos y de colores.
Paneles solares que exteriormente pueden presentar cualquier color y en los cuales no son visibles las células fotovoltaicas ni las conexiones.
“En estos paneles las células fotovoltaicas y las conexiones son invisibles“
De este modo, sirven como recubrimiento para las fachadas de edificios, que se convierten en enormes parques fotovoltaicos verticales sin alterar su aspecto, de forma invisible, tanto en superficies lisas como curvas.
Los colores posibles son todos -también colores personalizados- incluyendo el color blanco, que añade la ventaja de que además de producir electricidad sirve como material reflectante para mantener controlada la temperatura del edificios, reduciendo a su vez el consumo energético.
Conversión de energía en electricidad
Según CSEM estos paneles funcionan como 'fuentes de energía oculta' en las edificaciones y otros objetos. Por ejemplo, la tapa de un ordenador portátil o la cubierta posterior de un teléfono móvil o tableta e incluso las vallas publicitarias.
Internamente consiste en paneles solares convencionales flexibles a los que se les superpone una capa o recubrimiento coloreado fabricado con nanotecnología.
“Los paneles funcionan como fuente de energía oculta“
Este recubrimiento refleja la luz visible -la energía solar correspondiente al espectro captado por el ojo humano- mientras que deja pasar la luz invisible a simple vista, caso de los rayos infrarrojos, que alcanzan la superficie del panel solar situado debajo. La energía recibida correspondiente a la zona infrarroja traspasa el recubrimiento y es la que el panel convierte en electricidad.