Ocho militares egipcios desaparecen tras el ataque a un buque en el Mediterráneo
- Tras la caída de Morsi los ataques contra las fuerzas de seguridad se han multiplicado
- El ejército califica la agresión de "terrorista"
- 32 personas han sido detenidas por el ataque
El ejército egipcio ha informado de que ocho militares han desaparecido tras el ataque "terrorista" a un buque de su armada en el Mediterráneo por el que 32 personas han sido detenidas.
Desde que el ejército derrocó al presidente islamista Mohamed Morsi en julio de 2013, los ataques contra las fuerzas de seguridad se han multiplicado. Sin embargo, este asalto marítimo no tiene precedentes.
A menudo, estos ataques son reivindicados por los yihadistas, que dicen actuar en venganza por la sangrienta represión que a los partidarios Morsi, que ha dejado más de 1.400 muertos.
El ejército ha indicado en un comunicado que los cuatro barcos usados por los asaltantes en el ataque han sido destruidos, y ha detallado que 32 presuntos militantes han sido detenidos.
La agencia oficial de noticias Mena había informado previamente de que el buque de guerra se había incendiado durante un intercambio de disparos con los atacantes, a unos 70 kilómetros de la costa egipcia, afirmando que la Fuerza Aérea había enviado refuerzos para luchar contra los agresores.
Primer asalto marítimo
Más tarde, el ejército calificó de ataque "terrorista", que tuvo lugar fuera de la provincia costera de Damietta, en el noreste del país.
"Las operaciones de rescate han permitido llevar a cinco soldados heridos en un hospital militar. (...) Ocho miembros de la tripulación aún están desaparecidos y las tareas de búsqueda continúan" ha precisado el ejército en el comunicado.
El Ejército también ha informado de que los agresores detenidos han sido sometidos a interrogatorios. De momento no se sabe por qué la nave estaba tan lejos de la costa, o si se trataba de una patrulla naval cuyo paso fue cortado por los atacantes.
El Mediterráneo es frecuentemente utilizado por narcotraficantes y contrabandistas de inmigrantes ilegales, que en el pasado han sido detenidos en varias ocasiones por el ejército egipcio.
Mientras el ejército continúa luchando desde hace varios meses contra la insurgencia yihadista en el norte de la península del Sinaí, no había tenido lugar ningún asalto marítimo.
Ataques continuados
El ataque del miércoles se produjo después de la principal grupo yihadista en Egipto, al-Ansar Beit Maqdess, prometiera lealtad a la organización del Estado Islámico (EI), que se está librando en Irak y Siria.
El grupo centra sus ataques contra la policía y el ejército en el norte de Sinaí, pero también lleva a cabo grandes ataques con coche bomba en el resto del país.
Fundada en favor del vacío de seguridad tras la caída de Hosni Mubarak en 2011, el grupo ha demostrado ser capaz de hacer los ataques más sofisticados a pesar de la ofensiva del ejército. Varios de sus miembros han luchado con grupos rebeldes islamistas en Siria.
A finales de octubre, 30 soldados murieron en un atentado suicida en el norte de Sinaí. El ataque, el más mortífero contra las fuerzas desde el derrocamiento Morsi, y aunque no ha sido reivindicado, lleva la impronta de Ansar al-Beit Maqdess.