La sonda Philae entra en "modo inactivo" tras enviar a la Tierra la información recabada
- Sus baterías se han agotado pero pueden activarse si recibe luz solar
- La ESA asegura que ha conseguido rotar sus paneles para lograrlo
La sonda Philae de la Agencia Espacial Europea (ESA), que está sobre la superficie del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko, ha entrado en "modo inactivo" después de restablecer durante unas horas la señal y enviar todos los datos recabados según ha informado la agencia en su cuenta de Twitter.
Según ha señalado el director del proyecto, Stephan Ulamec, "antes de silenciarse, el módulo de aterrizaje fue capaz de transmitir todos los datos científicos recogidos".
La misión espacial ha peligrado desde su aterrizaje, aunque logró comenzar sus experimentos en el cometa, ya que la sonda recibe cinco horas y media menos de luz solar de lo previsto después de que se deplazara un kilómetro del punto en el que tenía que haberse posado por un fallo en el aterrizaje.
"Esta máquina trabaja magníficamente en condiciones difíciles, y podemos estar plenamente orgullosos del éxito científico" ha destacado Ulamec.
Podría reactivarse si recibe luz solar
A mediodía de este sábado podría abrirse la próxima ventana de comunicación, aunque con las baterías agotadas y sin posibilidad de recargarlas por falta de luz solar es una posibilidad lejana a pesar de que los científicos de la agencia han logrado reorientar con éxito los paneles solares del aterrizador.
Philae, que se encuentra en una zona oscura, probablemente en el anillo externo de un cráter, tiene una limitación de combustible y necesita recibir luz solar para transformarla en energía.
"Vamos a ver si puedes conseguir un poco más sol @ Philae2014!" indicaba un tuit de la ESA que revelaba que el módulo estaba realizando una maniobra de 'elevación y giro' de su tren de aterrizaje en un intento de reorientar el aparato para que sus paneles solares accedan a los rayos solares.
Al parecer y según el twitter de la ESA, la operación habría conseguido su objetivo de rotar 35 grados: "También mi rotación fue un éxito (35 grados): parece un nuevo cometa desde este ángulo", tuiteó la agencia espacial.
27 años de misión
La misión Rosetta, de la Agencia Espacial Europea (ESA) culmina un proyecto que ha llevado 27 años de trabajo y que busca encontrar respuestas científicas al proceso de formación de los planetas y más concretamente, de la Tierra.
A lo largo de los diez años que ha durado su viaje al encuentro del cometa 67P, Rosetta ha dado varias vueltas alrededor del Sol, ha sobrevolado la Tierra en tres ocasiones (2005, 2007 y 2009), también Marte -operaciones para captar energía- y se ha encontrado con dos asteroides en 2008 y 2010.
Durante dos años y medio entró en estado de hibernación ya que no recibía suficiente luz solar para producir electricidad y recorrió desactivada el tramo más solitario y frío de su viaje.