El arzobispo de Granada admite que los abusos sexuales denunciados son "verosímiles"
- Dice que "no se ha protegido" la intimidad ni la presunción de inocencia
- La Asamblea Plenaria de obispos no trata el tema y Blázquez no se pronuncia
El arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez, ha admitido este jueves que los abusos sexuales denunciados en su Archidiócesis son verosímiles y ha pedido un juicio justo, con derecho a la defensa y todas las pruebas necesarias para los sacerdotes implicados.
Monseñor Francisco Javier Martínez ha lamentado que "no se ha protegido la intimidad ni la presunción de inocencia" en el caso del joven de 24 años que denunció ante el papa un caso de abusos sexuales en la diócesis de Granada y ha asegurado entre lágrimas que es "una herida muy grande". "Perdón, se me saltan las lágrimas pero es que es una herida muy grande", ha indicado.
"Si los hechos son ciertos, es una herida tremenda en el cuerpo de Cristo y ese cuerpo es mi propio cuerpo. Me sangra el corazón, me sangra el alma y es dolorosísimo, y si los hechos no fueran verdad sigue siendo igual de doloroso porque no se ha protegido la intimidad ni la presunción de inocencia de toda una serie de personas, incluido el denunciante", ha explicado en declaraciones a la cadena COPE.
El arzobispo de Granada ha explicado que él tuvo conocimiento de esta denuncia a través de una carta de la presunta víctima en la que le indicaba que había informado a la Santa Sede de los hechos.
Investigación previa que dio "verosimilitud" a la denuncia
Tras recibir la carta del denunciante, Martínez se reunió con él durante varias horas y posteriormente viajó al Vaticano para preguntar por la manera en la que debía actuar, pero antes de iniciar el viaje, la Santa Sede le llamó para decirle que aplicara la doctrina de la Iglesia.
"Yo puse en marcha una investigación previa inmediatamente y concluí que -los hechos denunciados- tenían verosimilitud", por lo que se pusieron en marcha las medidas cautelares "tan pronto como fue posible", el pasado 15 de octubre. Los tres sacerdotes acusados fueron apartados "de todo ejercicio del ministerio sacerdotal público y retirados de cualquier domicilio pastoral o eclesiástico".
Martínez ha señalado que la denuncia implica en los hechos a tres sacerdotes y habla de otros religiosos que habrían conocido lo que sucedía. El arzobispo de Granada ha explicado que no ha tomado ninguna medida sobre estos sacerdotes porque el propio denunciante le pidió que no hiciera nada más para no interferir con la acción de la Justicia.
Por eso la Santa Sede pide secreto, porque las víctimas también sufren con convertir su vida personal en una especie de espectáculo, cuando lleva una herida muy grande dentro que hay que tratar de curar", ha dicho.
Sobre el joven denunciante ha afirmado que durante la reunión que mantuvo con él trató de "darle aliento" y decirle que tiene que haber "un designio bueno" en lo que ha pasado y que podrá ayudar a otras personas y evitar que esto vuelva a pasar.
Los obispos no aborda el tema en su Asamblea Plenaria
Los obispos españoles, reunidos esta semana en Madrid en la CIV Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española, "no" han abordado el caso de presuntos abusos cometidos por sacerdotes en la diócesis de Granada durante su reunión, según han asegurado algunos obispos presentes en la sesión de este jueves.
Entre los prelados que salían de la cuarta sesión de esta asamblea, se encontraba el presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, que no ha querido hacer declaraciones sobre el caso.
La CIV Asamblea Plenaria de la CEE comenzó el pasado lunes, un día después de que se hiciera pública la noticia de que el papa Francisco había llamado por teléfono a un joven español que le había escrito contándole que había sido víctima de abusos sexuales por parte de tres sacerdotes en la diócesis de Granada cuando era menor.