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Obama anunciará este jueves la reforma de la ley de inmigración con oposición republicana

  • Lo hará en un discurso a la nación televisado
  • Hay oposición en el ala conservadora de los demócratas
  • El presidente pasará por encima del Congreso usando su poder legislativo

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Obama anunciará un decreto para regularizar la situación de los inmigrantes

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, presentará este jueves por la noche, en horario de máxima audiencia, su reforma migratoria. El mandatario pretende aprobar la medida, que afecta a unos cinco millones de personas, saltándose el cepo del Congreso, algo que no gusta a los republicanos.

Fuentes cercanas a la administración citadas por Reuters aseguran que Obama propondría emitir un indulto de la deportación que cubrirá a algunos de los padres de ciudadanos estadounidenses y residentes legales permanentes en línea con el decreto de 2012 que redujo las deportaciones y dio permisos de trabajo para niños indocumentados traídos a EE.UU. por sus padres.

También se espera que se modifique la seguridad fronteriza y que Obama actúe para ayudar a las empresas a contratar y retener a los trabajadores altamente cualificados del extranjero.

En líneas generales, se espera que el plan de Obama elimine la amenaza de deportación para cinco de los 11 millones de personas que viven de manera ilegan en Estados Unidos.

Pasar por encima del Congreso

Frustrado por años de pasividad del Congreso para enmendar lo que en Washington se define como un sistema migratorio estropeado, Obama parece estar preparado para utilizar su autoridad ejecutiva después de perder hace dos semanas el control de la Cámara de Representantes y el Senado frente a los republicanos.

La trascendencia de esta decisión reside en el intento de Obama de cimentar su legado ofreciendo una solución para la desilusionada comunidad hispana que lo ayudó a llegar a la presidencia en 2008.

La última gran reforma de inmigración que amplió el número de inmigrantes legales se realizó en 1986 con la firma del presidente republicano Ronald Reagan. Desde entonces, el intento más importante yha sido el llevado a cabo por George W. Bush en 2007, que fracasó.

Descontento y amenazas en las filas republicanas

El anuncio de la comparecencia de Obama ha puesto en alerta al Partido Republicano. El representante para política fiscal del partido del elefante, Paul Rayan, se ha referido al plan del presidente como una "bomba partidista", mientras que el portavoz republicano John Boehner ha hablado del "emperador Obama" por actuar de manera unilateral.

Algunos republicanos conservadores han amenazado con luchar contra el movimiento de inmigración mediante la imposición de restricciones de financiación en una ley de gastos de paso obligado, que posiblemente podría conducir a un cierre del gobierno. Sin embargo, los líderes republicanos han insistido en que no permitrán que se produzca una situación similar a la del año pasado.

Además, el gobernador de Texas, Rick Perry, ha anunciado que su estado "probablemente" demandará a la Administración de Obama.

Perry que dejará su cargo el próximo 20 de enero y suena como potencial aspirante a la Presidencia de Estados Unidos en 2016, ha lamentado que Texas haga una inversión "extraordinaria" de cerca de 12 millones de dólares al mes en seguridad fronteriza para prevenir la llegada de indocumentados.

Obama busca apoyos dentro de su partido

Pero el descontento no se encuentra solo en las filas republicanas, Obama ha encontrado voces discordantes en el bloque más conservador de su partido. "Espero que no lo haga", ha declarado el senador por Virginia Occidental Joe Manchin

Líderes demócratas del Senado y la Cámara de Representantes han sido invitados durante la noche del miércoles a una cena en la que el presidente ha explicado los detalles de sus acciones ejecutivas en busca de apoyos.

La revisión unilateral probablemente tendrá un efecto dominó en la campaña para encontrar un sucesor para el presidente en 2016. Si bien los hispanos, sin duda, encantados, los demócratas podrían enfrentarse a una reacción de los votantes.