Una marcha nacional clama justicia en la capital de México por los 43 desaparecidos en Iguala
- Tres manifestaciones han llegado al DF en el aniversario de la Revolución
- "El país está plagado de cadáveres", grita la sociedad mexicana
- Piden el fin de la impunidad y condenan a todo el sistema político
- Un grupo de encapuchados ha provocado disturbios tras la protesta pacífica
Una ola de indignación sin precedentes ha recorrido México. Miles de ciudadanos han protestado este jueves en la capital del país para exigir justicia por la desaparición de 43 estudiantes en la ciudad de Iguala en una fecha en la que se conmemora el CIV aniversario de la Revolución Mexicana.
Tres multitudinarias marchas procedentes de la Plaza de las Tres Culturas, Ángel de la Independencia y Monumento a la Revolución, han confluído de manera pacífica en el Zócalo, la plaza principal de la capital mexicana.
Al finalizar la marcha, grupos de manifestantes encapuchados y con los rostros cubiertos han provocado disturbios ante las puertas del Palacio Nacional, sede del ejecutivo mexicano. Cientos de antidisturbios de la Policía Federal han respondido con cargas al lanzamiento de cócteles molotov. Hay quince personas detenidas por este suceso.
Durante el día, decenas de miles de mexicanos se han reunido en diversas concentraciones, en su mayoría sin incidentes, por todo el país.
Disturbios puntuales durante el día
En el estado de Guerrero, donde desaparecieron los jóvenes, integrantes del sindicato Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) han liderado manifestaciones de más de 2.000 personas, cortando durante varias horas el tráfico por la autopista que conecta el DF con el balneario de Acapulco.
En las movilizaciones en Guerrero los manifestantes llevaron carteles de "Fuera Peña" y gritaron consignas contra los diputados regionales y el gobernador estatal, Rogelio Ortega.
En algunos casos, las manifestaciones se han visto salpicadas por bloqueos de avenidas, detonación de cócteles molotov contra policías y la irrupción en un desfile conmemorativo de la Revolución.
“La situación ya no es sostenible. La sangre está por todos lados“
Concretamente en Ciudad de México y Chiapas se han producido algunos sucesos violentos por el lanzamientos de bombas caseras y agresión a comercios.
Unos 500 jóvenes con los rostros cubiertos han bloqueado una de las avenidas de acceso al Aeropuerto Internacional de Ciudad de México. Algunos de ellos han lanzado cócteles molotov a policías en uno de los momentos más tensos de la primera mitad de la jornada. El enfrentamiento ha dejado dos agentes heridos y 15 manifestantes detenidos.
"Este es un momento de hartazgo, la situación ya no es sostenible. La sangre está por todos lados, el país está plagado de cadáveres", ha afirmado Efe una universitaria en el lugar.
Peña Nieto, centro de las protestas
Con las calles del país llenándose de manifestantes, el presidente Enrique Peña Nieto ha mantenido su agenda oficial y ha celebrado dos ceremonias de condecoración a militares.
El mandatario ha asegurado que su Gobierno "no cejará" los esfuerzos para que impere el Estado de derecho y la justicia, y ha condenado la violencia "cualquiera que sea su origen".
“Los mexicanos decimos no a la violencia“
"Los mexicanos decimos no a la violencia" y "rechazamos categóricamente cualquier intento por provocarla o alentarla", ha añadido el jefe del Ejecutivo. México "está dolido, pero el único camino para aliviar este dolor es el de la paz y la justicia", ha apuntado tras destacar que el país quiere "que se aplique la ley, que prevalezca el orden" y que todos los ciudadanos avancen "juntos".
Tras la cancelación por parte del Gobierno del desfile conmemorativo de la Revolución, que todos los años se realiza en el Zócalo, las movilizaciones han provocado también la suspensión de la sesión en la Cámara de Diputados mexicana. Allí, legisladores de izquierda han colocado en la tribuna pancartas alusivas a los jóvenes desaparecidos con lemas como "Enrique Peña Nieto ¡Renuncia ya! Ayotzinapa Vive".
Los padres esperan respuestas
Esta es la cuarta jornada de movilizaciones generales para exigir el regreso a casa de los 43 jóvenes que desaparecieron el 26 de septiembre pasado tras una serie de ataques a tiros ordenados por el entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca, en los que murieron seis personas y otras 25 resultaron heridas.
Una de las líneas de investigación oficial apunta a que los 43 jóvenes habrían sido asesinados por miembros del cártel Guerreros Unidos y después quemados en un basurero de Cocula, vecino a Iguala.
Los restos hallados en el lugar son analizados en un laboratorio de Austria para confirmar si se trata de los estudiantes, pero los padres y compañeros de los desaparecidos han dicho que no creerán esa versión hasta que tengan pruebas científicas avaladas por expertos internacionales.