La Asamblea francesa aprueba el simbólico reconocimiento de Palestina como Estado

• La resolución ha sido aprobada con 339 votos a favor y 151 en contra
• El texto no es vinculante, ya que la política exterior depende del Gobierno
• El Senado votará el reconocimiento el próximo 11 de diciembre

La Asamblea Nacional vota una resolución de la mayoría socialista que pide al Gobierno el reconocimiento de Palestina como Estado.

La Asamblea Nacional francesa ha aprobado este martes una resolución de la mayoría socialista que pide al Gobierno el reconocimiento de Palestina como Estado. El texto ha salido adelante con 339 votos a favor, procedentes del gubernamental Partido Socialista (PS), de los neocomunistas y de los ecologistas, mientras que han votado en contra 151 diputados, esencialmente de la conservadora UMP y de los centristas.

La iniciativa tiene sobre todo un carácter simbólico, ya que sólo el gobierno tiene la potestad en materia de política exterior. Sin embargo, la medida, ya adoptada por otros países europeos, ha generado el rechazo de Israel.

"Este voto eliminará las posibilidades de llegar a un acuerdo de paz", ha reaccionado la Embajada israelí en París, que ha considera que Francia "envía el mensaje equivocado a los líderes y pueblos de la región".

Con esta resolución, Francia se sitúa en la órbita que en Europa pretende presionar a Israel para retornar a la mesa negociadora, una táctica iniciada por Suecia, el único país de la Unión Europea que ha reconocido el Estado palestino, y seguida de los parlamentos británico y español.

A día de hoy, 135 de los 193 países de la ONU han reconocido el Estado palestino.

Presión sobre Israel

La jefa de la diplomacia comunitaria, Federica Mogherini, también se ha mostrado favorable a abrir esta vía a la vista de la parálisis del proceso de paz.

“Es urgente salir de este callejón sin salida“

Es este un argumento en el que se han apoyado los diputados socialistas para impulsar la resolución, que "invita al Gobierno a reconocer el Estado palestino con el fin de obtener un arreglo definitivo del conflicto", al considerar que "la solución de los dos Estados, promovida de forma constante por Francia y la UE" así lo presupone. Una resolución similar, presentada esta vez por los comunistas, será votada en el Senado el próximo día 11.

"Este voto, fuerte, es un llamamiento a los beligerantes a relanzar el proceso de paz. No compromete al Gobierno, pero muestra que es urgente salir de este callejón sin salida", ha afirmado el secretario de Estado de Asuntos Europeos, Harlem Désir, encargado de defender el texto por parte del Ejecutivo.

Rechazo de la derecha

Los conservadores han mostrado su oposición a la resolución que, a su juicio, "puede dar argumentos a un grupo terrorista como Hamás". La semana pasada, el expresidente Nicolas Sarkozy, electo el fin de semana jefe del principal partido de la oposición, instó a sus partidarios a votar contra la resolución.

"Somos favorables a la solución de los dos Estados, pero para eso es preciso que ambos Estados lo reconozcan de forma recíproca", ha explicado el portavoz conservador, Christian Jacob, que ha recordado que "en los territorios palestinos, hay terroristas que siguen buscando la desaparición de Israel".

Tensión a las puertas de la Asamblea

En los últimos días, el Gobierno francés parece apoyar más la vía de la ONU, respaldando la iniciativa que la Autoridad Nacional Palestina quiere presentar en ese foro para solicitar la retirada de Israel de los territorios ocupados. A finales de 2011 Palestina fue admitida como Estado miembro en la Unesco y un año después la Asamblea General de la ONU le concedió la condición de Estado observador.

Francia cuenta, además, con organizar una conferencia internacional para estimular el retorno de israelíes y palestinos a la mesa negociadora.

Símbolo de la tensión que esta cuestión despierta en Francia, el país que acoge la mayor comunidad judía de Europa, es la manifestación convocada a las puertas de la Asamblea Nacional poco antes del voto, que reunió a un centenar de personas con pancartas que comparaban a Palestina con un Estado terrorista.