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Una treintena de inmigrantes consiguen entrar en Melilla en un nuevo salto masivo de la valla

  • Este salto ha sido protagonizado por unos 600 inmigrantes subsaharianos
  • Se trata del tercer intento de salto en una semana
  • Tres inmigrantes han estado encaramados a la valla más de cinco horas

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Una treintena de inmigrantes consiguen entrar en Melilla en un nuevo salto masivo de la valla

Unos 30 inmigrantes han conseguido entrar este martes a Melilla en un nuevo salto masivo a la valla, el tercero en menos de una semana, que se ha registrado por la zona del paso fronterizo de Barrio Chino, según ha informado en un comunicado la Delegación del Gobierno en Melilla. En el salto han participado más de 600 inmigrantes subsaharianos.

Fuentes policiales han informado a Efe de que los inmigrantes se han aprovechado de las malas condiciones meteorológicas que sufre Melilla, donde la lluvia y el viento dificultan la labor de control fronterizo.

El primer salto se produjo sobre las 6.45 horas en la zona próxima al Barrio Chino y fue protagonizado por unos 150 inmigrantes, de los que 30 lograron entrar y tres se han quedado encaramados en la valla.

Posteriormente, a las 7.00 horas, cerca de la zona al cauce del Río de Oro, otro grupo de unos 500 se han aproximado a la valla, pero la cooperación entre Guardia Civil y fuerzas de seguridad marroquíes han evitado que lograran intentar saltar.

Los tres subsaharianos que se quedaron encaramandos han permanecido en la valla de Melilla más de cinco horas por la zona cercana al paso fronterizo de Barrio Chino, que ha estado cortado al tránsito desde las siete de la mañana.

Durante el tiempo en el que han estado encaramados han estado custodiados por varias patrullas de la Guardia Civil, que trataban de convencerles para que bajaran y ponerlos en manos de las autoridades marroquíes, como finalmente ha ocurrido hacia las 12.45 horas.

La situación ha obligado a mantener cerrado el paso fronterizo de Barrio Chino,  viéndose afectado el tránsito de porteadores marroquíes que desde primera hora de la mañana pasan mercancía desde Melilla hasta Marruecos en el denominado comercio atípico.

Fuerte despliegue de seguridad

La Guardia Civil ha llevado a cabo un fuerte despliegue de seguridad en el perímetro fronterizo, en el que también ha participado el helicóptero para la vigilancia de la frontera desde las seis de la mañana.

Una vez sobrepasados los obstáculos, los inmigrantes se han adentrado en Melilla a la carrera en dirección al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), que sigue saturado muy por encima de sus 480 plazas de capacidad máxima.

Fuentes del CETI han informado a Efe de que en el centro se han vivido momentos de alegría y euforia después de esta entrada, una de las más numerosas desde que fue instalada la malla antitrepa en el perímetro.

Presión migratoria

Melilla vive una extrema presión migratoria desde hace meses que obligó al Ministerio del Interior a reforzar el perímetro y la dotación de efectivos de la Guardia Civil en la ciudad autónoma.

El último intento de entrada se registró el pasado viernes, cuando 10 inmigrantes consiguieron entrar a Melilla de forma clandestina de un pequeño grupo de 16 que se aproximó por los cortados de Agudú, la zona más al norte de la valla.

Un día antes, el 27 de noviembre, otro medio millar protagonizó una madrugada de intensa presión sobre la valla en la que ningún subsahariano consiguió su objetivo de entrar a la ciudad autónoma.

En lo que va de año, Melilla lleva registrados más de 15.000 intentos individualizados de acceso por la alambrada, de los cuales alrededor de 2.000 se han materializado en entradas. Con el salto de este martes, ya son más de 65 los que se han registrado en la frotera melillense en lo que va de año.