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El FROB manda a la Fiscalía hipotecas de particulares de Catalunya Banc de 2004 a 2008

  • En ese periodo dirigía la caja el exvicepresidente del Gobierno, Narcís Serra
  • La morosidad en esos préstamos hipotecarios llegó al 60%

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El FROB ha acordado enviar a la Fiscalía Anticorrupción un expediente sobre una cartera de hipotecas a particulares concedidas por Catalunya Banc, en su mayoría en el periodo comprendido entre 2004 y 2008, cuando la entidad estaba presidida por el exvicepresidente del Gobierno Narcís Serra.

Según ha informado el FROB en un comunicado, la decisión la ha tomado su comisión rectora tras recibir el análisis de los informes forensic, aquellos que se realizan para investigar posibles fraudes.

Esta es la segunda vez que el FROB envía irregularidades de Catalunya Banc, después de que a mediados de octubre mandara a la Fiscalía 16 operaciones sospechosas que habían causado un perjuicio para la entidad de unos 900 millones.

En aquella ocasión se trataba fundamentalmente de operaciones llevadas a cabo entre 2005 y 2008 de financiación y refinanciación para la adquisición de inmuebles y/o participaciones en sociedades, así como refinanciación para la adquisición de sociedades.

Hipotecas de la burbuja inmobiliaria

Ahora, sin embargo, se trata de la concesión de hipotecas en plena burbuja inmobiliaria que, según avanzó recientemente el ministro de Economía, Luis de Guindos, en las que se aprecian indicios de un delito de administración desleal.

Por eso, el FROB pide al fiscal que las analice desde el punto de vista de las implicaciones penales que pudieron cometer los antiguos gestores de Catalunya Banc, entidad con una morosidad en algunas hipotecas de particulares del 60%, diez veces superior a la media.

Y es que la entidad, que costó al contribuyente 12.000 millones de euros y fue adjudicada al BBVA, concedió préstamos por 1.000 millones que superaban el 100% del valor de la propiedad, e incluso el 120%, según desveló en su momento De Guindos. Dicha entidad también otorgó hipotecas a particulares que no tenían ingresos suficientes e incluso créditos en yenes por más de 100 millones.