Miles de personas marchan en Washington contra los abusos policiales a los negros
- Organizaciones de derechos civiles han convocado la manfiestación
- Protestan por las muertes de hombres negros en incidentes policiales
- Ocurre después de que no se procesara al policía que estranguló a Eric Garner
Miles de manifestantes protestan este sábado en la capital de Estados Unidos, Washington, para reclamar atención por las muertes de hombres negros desarmados a manos de la policía que se han sucedido este año y para demandar al Congreso acciones legislativas que protejan a los afroamericanos de la violencia policial injustificada.
Con el lema "Justicia para todos", organizaciones de derechos civiles han convocado la marcha junto a las familias, entre otros, de Michael Brown y Eric Garner, dos hombres de raza negra que murieron en incidentes con agentes de policía, poniendo hincapié en la brutalidad policial.
Las manifestaciones, algunas de ellas violentas, se han sucedido a lo largo de Estados Unidos desde que el pasado mes la justicia declinó implicar a los agentes en las muertes de Brown y Garner, lo que ha puesto en la agenda nacional estadounidense el tema del tratamiento policial a las minorías raciales.
La de Washington coincide con otras marchas paralelas en Nueva York, Boston y San Francisco, y está previsto que sea una de las principales de la reciente ola de protestas en contra de la muerte de varios civiles negros por parte de los agentes en Ferguson, Missouri, Nueva York, Cleveland y otros lugares.
En Washington, miles de personas se han congregado en la plaza de la Libertad, a un par de manzanas de la Casa Blanca, antes de empezar una marcha para concluir con una concentración frente al Capitolio.
Precisamente, el actual inquilino de la Casa Blanca, Barack Obama, el primer presidente negro de la historia de EE.UU., ha reafirmado recientemente su compromiso con la mejora de la relación entre la policía y las minorías del país y ha coincidido con los manifestantes en definir esta violencia no como un problema racial, sino como un "problema estadounidense".
"Las vidas negras importan"
En un ambiente festivo, los congregados -jóvenes y ancianos, blancos y negros- caminaron hasta el Capitolio, sede del Congreso, pertrechados de pancartas en las que se leían consignas como "Las vidas negras importan", "Manos arriba, no disparen" o "El racismo en una enfermedad letal".
En esta protesta participan los familiares de Eric Garner y Akai Gurley, asesinados por agentes de la policía de Nueva York; Trayvon Martin, asesinado por un vigilante de barrio en Florida en 2012; y Michael Brown, muerto a tiros a manos de un agente de Ferguson.
También evocaron los manifestantes el caso del pequeño Tamir E. Rice, de 12 años, que murió en Cleveland en noviembre por los disparos de un policía que confundió la pistola de juguete que portaba el menor con un arma de verdad.
"He salido en busca de justicia y también para que se cambie la política en cuanto a la vigilancia policial en todo el país", ha dicho a Reuters Aisha Wilson, un manifestante de Paterson, New Jersey.
"Este es un momento histórico", ha afirmado la madre de Eric Garner, Gwen Carr, quien vestía una sudadera con la frase "No puedo respirar", pronunciada por su hijo antes de fallecer víctima de una llave de estrangulamiento que practicó sobre él un policía.
“Piden que las investigaciones contra los abusos policiales dependan de los fiscales federales“
El reverendo Al Sharpton, líder de la Alianza de Acción Nacional, una organización pro-derechos civiles que convoca la marcha, ha leído un comunicado antes de esta: "Necesitamos algo más que palabras", ha dicho. "Necesitamos una acción legislativa que cambie las cosas, tanto en los libros como en las calles".
Sharpton ha instado al Congreso a que apruebe una legislación que permita que los fiscales federales se hagan cargo de las investigaciones sobre actuaciones policiales, para evitar que los fiscales de los distritos locales, que a menudo trabajan con la policía, caigan en un conflicto de intereses a la hora de investigar estos casos.
En Nueva York, se espera que los actos reúnan a más de 40.000 personas. "Ahora es temporada de caza de negros", ha dicho Umaara Elliott, coorganizadora de la marcha en Nueva York, en un comunicado, según informa Reuters. "Por eso pedimos que se tomen medidas a todos los niveles del Gobierno para asegurarnos de que cesen estos asesinatos racistas por parte de la policía".