La reforma laboral de Renzi mantiene la obligación de reinserción laboral por despido injustificado

• El empresario no podrá eludir con el pago de una indemnización esta obligación
• De marcha atrás a lo planteado inicialmente ante las críticas de la sociedad
• "Nadie puede poner excusas para no invertir en Italia", dice el primer ministro

El primer ministro italiano Matteo Renzi durante la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros del 24 de diciembre de 2014.

El primer ministro italiano, Matteo Renzi, ha presentado algunas de las medidas incluidas en su reforma laboral con la que quiere sacar al país de la recesión y en la que se mantendrá la obligación de reinserción laboral en caso de despido injustificado, al contrario de lo previsto inicialmente.

El líder del Partido Democrático (PD, en el Gobierno) anunció hace meses que estaba contemplando esta posibilidad dentro de la modificación que hará del polémico artículo 18 del Estatuto de los Trabajadores, una iniciativa que levantó críticas entre la sociedad y que fue el detonante de una huelga general.

"Italia entra en una fase de extraordinario cambio y de extraordinaria apertura", ha dicho Renzi durante la conferencia de prensa celebrada al término del Consejo de Ministros.

Según el proyecto presentado por el Gobierno, se mantendrá la obligación, contenida en dicho artículo, de que el empresario, en caso de despido improcedente, pague una indemnización al trabajador.

Dos meses por año trabajado

Las indemnizaciones, sin embargo, en los casos de despido por naturaleza económica pasan ahora a ser de "dos meses por año trabajado y, en ningún caso, serán inferiores a 4 meses o superiores a 24 meses" para empresas con más de 15 trabajadores, ha explicado Renzi.

En cuanto a las pequeñas empresas, la remuneración que deberán otorgar en estos casos será la misma que contempla la Ley actual, es decir, "de entre 2 y 6 meses, con un sistema gradual vinculado a la antigüedad" en el puesto.

Pero la gran novedad anunciada por Renzi es que el empresario no podrá eludir con el pago de una maxi-indemnización la obligación de reincorporar al trabajador a su puesto laboral en caso de despido injustificado.

Esta era una de las medidas que analizaba el PD inicialmente y que fue propuesta por el grupo conservador Nuevo Centrodestra (NCD), escisión del Pueblo de la Libertad (PDL) del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, cuyo máximo líder es Angelino Alfano, actual ministro del Interior.

Se mantiene, por tanto, esta medida incluida en el Artículo 18 del Estatuto de los Trabajadores del 20 de mayo de 1970 que protege a trabajadores de empresas con más de 15 empleados contra los despidos improcedentes y avala su derecho a obtener una indemnización o a ser reintegrados en su empleo.

Renzi: "Nadie puede poner excusas para no invertir en Italia"

La intención del exalcalde de Florencia de cambiarlo levantó ampollas entre los representantes de los trabajadores y también en las filas de su propio partido, e incluso fue motivo de la primera huelga general que tuvo que afrontar su Ejecutivo el pasado 12 de diciembre.

"Lo fundamental es que con esta nueva reforma laboral nadie puede poner excusas para no invertir en Italia, ningún empresario puede decir que existe en Italia un sistema que desalienta la libre empresa y ningún trabajador puede decir que el Estado se despreocupa por él", ha dicho Renzi.

En las próximas semanas, el Gobierno seguirá perfilando las líneas de su Reforma Laboral, con la que Renzi pretende fomentar la contratación e incentivar el crecimiento de la economía de Italia.