Andalucía y Asturias piden un fondo para financiar nuevos medicamentos como los de la hepatitis C
- Creen que serviría para evitar "oligopolios" en la industria farmacéutica
- El consejero de Sanidad de CyM lo rechaza: "Sería un tiro en el pie"
- Se celebra el primer Consejo Interterritorial de Salud presidido por Alonso
Los consejeros de Sanidad de Andalucía y Asturias, María José Sánchez y Faustino Blanco, respectivamente, han exigido este miércoles al Gobierno un fondo para financiar medicamentos innovadores y poder así afrontar todos los tratamientos que vayan surgiendo tanto los de la hepatitis C como los de otras enfermedades.
Esta propuesta ha sido rechazada por el consejero de Sanidad de Castilla La Mancha, José Ignacio Echániz, que ha asegurado que sería "pegarse un tiro en el pie" a la hora de negociar con los laboratorios farmacéuticos.
A la entrada del Consejo Interterritorial de Salud que se celebra este miércoles, los consejeros de Andalucía y Asturias han considerado que el Sistema Nacional de Salud (SNS) debe abordar el problema de la necesidad de financiar nuevos tratamientos y que el Gobierno debe pedir a Europa que establezca relaciones con la industria farmacéutica para "evitar oligopolios".
La consejera de Salud de Andalucía, María José Sánchez, ha destacado la necesidad de un nuevo fondo para los tratamientos que vayan surgiendo, no solo para la hepatitis C.
Defensa de un "espacio de reflexión" sobre el tema
"Este fondo tiene que existir como nuevo fondo o mediante un incremento del fondo de compensación", ha dicho la consejera antes de añadir que lo importante es "disponer de ingresos para atender a los enfermos".
Sánchez, que espera que el nuevo ministro de Sanidad, Alfonso Alonso -que preside por primera vez la reunión con las autonomías- "adopte una actitud diferente" respecto a la solución de los problemas, ha señalado que es necesario garantizar a los pacientes con hepatitis C que tengan los tratamientos que precisen.
En este sentido, ha defendido un "espacio de reflexión" en el que participen los profesionales, los pacientes y las comunidades autónomas.
Tras asegurar que en Andalucía se está prescribiendo el tratamiento para la hepatitis C "de manera compasiva desde noviembre de 2013" y que "se va a seguir haciendo", ha apuntado que "esto no se puede hacer de manera aislada por parte de las comunidades", ya que "hay que hacerlo con una estrategia".
Ha destacado el "esfuerzo muy importante" que se está realizando en Andalucía, al tener una "población muy alta", pero ha pedido el "consenso" del Consejo Interterritorial de Salud para poder lograr el apoyo económico del Ejecutivo.
Sánchez ha garantizado que todos los enfermos que padezcan Hepatitis C en Andalucía y Asturias recibirán el tratamiento, pero ha vuelto a insistir en que es necesario "un refuerzo" económico.
Piden al Gobierno que tome la iniciativa en Europa
En el mismo sentido se ha pronunciado el consejero asturiano, quien ha asegurado que llegaba al Consejo con "la firme voluntad" de alcanzar acuerdos en esta materia porque, a su juicio, es "absolutamente necesario y urgente en estos momentos".
La apuesta de Blanco, al igual que la de la consejera andaluza, es la de crear un fondo de cohesión para la financiación de medicamentos innovadores: "En el caso de la hepatitis C es un claro ejemplo, pero seguro que hay más", ha señalado.
El consejero ha augurado que tras las declaraciones del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien dijo que todos los enfermos de hepatitis C a los que le sean prescritos los nuevos fármacos los recibirán, el Consejo Interterritorial mostrará un compromiso "explícito" para crear el fondo.
"No se entendería otro mensaje por parte del Gobierno, sería abdicar de su responsabilidad como autoridad sanitaria publica", ha subrayado.
Se ha mostrado convencido de que el SNS es el que tiene que abordar la problemática y el Gobierno tomar la iniciativa en Europa y trasladar a los estados miembros "el gran reto" de garantizar la sostenibilidad de los sistemas sanitarios.
"Europa se debe poner al frente de los problemas", ha aseverado el consejero, quien ha dicho que es la UE la que debe establecer las relaciones con la industria farmacéutica "para evitar oligopolios".
Ha insistido en que tanto Asturias como Andalucía mantendrán "los criterios de dar fármacos adecuados a cada paciente que lo precise" porque "no seria entendible otra actitud.
Echániz aboga por dejar que Sanidad "negocie"
Por su parte, el consejero de Sanidad de Castilla La Mancha, José Ignacio Echániz, ha rechazado la propuesta de sus homólogos de Andalucía y Asturias aludiendo a que obstaculizaría la negociación con los laboratorios farmaceuticos.
Echániz ha recordado este miércoles que el Ministerio de Sanidad está negociando en estos momentos con los laboratorios el precio de los medicamentos para tratar la hepatitis C.
"Pedir un fondo en estos momentos significaría pegarse un tiro en el pie en el ámbito de la negociación", ha advertido el también secretario de Sanidad y Asuntos Sociales del PP.
Echániz ha abogado por dejar al Ministerio que negocie con los laboratorios los precios "más inteligentes" para estos fármacos y, a partir de ese momento, "buscar cómo financiarlo".
Ha subrayado que lo más importante ahora es saber qué pacientes se pueden beneficiar de estas medicinas "para que ningún español que lo necesite no lo tenga a su disposición".
El consejero de Sanidad de Castilla La Mancha ha explicado que en su comunidad todos los enfermos de hepatitis C que necesitan los nuevos medicamentos -menos de 100- los están recibiendo y ha asegurado que en aquellas CCAA en las que gobierna el PP "todos los pacientes que han recibido la prescripción de esos tratamientos los están recibiendo".
Ha afirmado que entiende las demandas de los pacientes y los familiares que, ante una nueva terapéutica, quieren poder tener acceso al tratamiento de su enfermedad. "Lo que entendeos peor es la utilización política, demagógica y torticera de determinados políticos que intentan hacer con la sanidad campaña electoral", se ha quejado.
También ha subrayado que España es uno de los cuatro países de los 28 de la UE que está proporcionando los medicamentos de última generación registrados y ha asegurado que ningún español está exento del tratamiento que convenga a su enfermedad.