Secuestran a un miembro de la ONU y dos cooperantes en República Centroafricana
- Atribuyen los raptos en Bangui a las milicias cristianas Anti-Balaka
- Entre los rehenes está una francesa que lidera una ONG cristiana
Un miembro de la misión de la ONU en la República Centroafricana ha sido secuestrado por un grupo de hombres armados en la capital del país solo unas horas después del secuestro de dos cooperantes, una francesa y un religioso centroafricano, según ha informado la propia organización internacional.
No obstante, la Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de República Centroafricana (Minusca) no ha informado de la nacionalidad ni rango del secuestrado. Solo ha precisado que los atacantes han asaltado el vehículo de seguridad en el que viajaba en Bangui este martes.
Según otra fuente de la Minusca citada por AFP, la acción ha tenido lugar cuando el miembro de la misión iba a trabajar y la ha atribuido a "hombres asemejados a los Anti-Balaka", la milicia cristiana a la que las autoridades francesas atribuyen el rapto del lunes.
República Centroafricana vive una espiral de violencia sectaria iniciada en 2013 que ha provocado miles de muertos y decenas de miles de desplazados.
"Estas prácticas son contrarias a los esfuerzos actuales a nivel nacional e internacional para facilitar la reconciliación y el retorno de la paz permanente en el país", ha subrayado la ONU, que ha exigido la liberación "inmediata e incondicional" de su empleado y de los dos secuestrados el lunes.
En el mismo barrio
La mujer secuestrada el lunes, de 67 años, es la fundadora de la ONG cristiana Imohoro vinculada a Cáritas y se encontraba en Bangui junto a un religioso de otra ONG local, sobre cuyo paradero hay confusión.
El ministerio de Exteriores francés informó de que el embajador francés en Bangui estaba en contacto con el arzobispado de la ciudad y que ya había iniciado las negociaciones para la liberación de los dos. (Aunque en un primer momento medios franceses dijeron que el religioso centroafricano había sido liberado, luego rectificaron y dijeron que estaba secuestrado).
Actualmente, esa cooperante es la única rehén francesa en el extranjero, tras la liberación el pasado 9 de diciembre de Serge Lazarevic entre la frontera de Mali y Níger, después de más de tres años en manos de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).
El secuestro del lunes tuvo lugar en BoyRabé, baluarte de la lucha anti-Balaka en un suburbio del noreste de Bangui, la capital centroafricana. El de este martes ha tenido lugar en Combattant, otro barrio del norte de Bangui, cerca del aeropuerto, según la fuente de Minusca citada por AFP.
Escalada de tensión en el país
Las milicias anti-Balaka, literalmente "anti-machete", son un grupo extremista animista y cristiano que se formó en el país tras el ascenso al poder en 2013 del líder del grupo rival musulman, los Séléka, Michel Djotodia al derrocar al entonces presidente cristiano François Bozizé.
Pese al anuncio de disolución del Séléka en septiembre de 2013, los militantes de ambos bandos continúan enzarzados en un círculo de violencia que no ha hecho más que crecer.
En 2014, Amnistía Internacional ha reportado varias masacres cometidas por los anti-Balaka contra civiles musulmanes, lo que ha forzado a muchos de ellos a abandonar el país.
El pasado fin de semana las fuerzas de la ONU tomasen el control del noroeste del país.