Podemos se querellará contra Aguirre al no alcanzarse un acuerdo en el acto de conciliación
- Aguirre asegura que Podemos quiere "acallarla, amedrentarla y amenazarla"
- Bescansa: "A los adversarios se les combate con ideas y no con calumnias"
- Pablo Iglesias interpuso una querella contra la presidenta del PP de Madrid
Podemos se querellará finalmente contra la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, después de no haberse alcanzado un acuerdo en el acto de conciliación previsto para este martes tras unas declaraciones en las que la popular se refería a la vinculación de esta formación con el chavismo, el castrismo y ETA.
Tras una hora en el Juzgado 97, el acto de conciliación ha terminado sin acuerdo. El pasado 16 de octubre ya se tuvo que aplazar este acto de conciliación, previo al desarrollo de la querella, por la falta de un poder notarial que permitiese al dirigente de Podemos Juan Carlos Monedero representar a su partido en este trámite.
A su salida, la secretaria de Análisis Político y Social, Carolina Bescansa, ha lamentado el "nerviosismo" de Aguirre y que no se haya retractado de sus palabras ni pedido disculpas.
"Tendrá que ser la vía judicial la que le explique a la señora Aguirre que a los adversarios se les combate con argumentos e ideas y no lanzar calumnias", ha declarado, tras acusar a la conservadora de haber "presidido uno de los gobiernos más corruptos que se recuerdan a nivel autonómico".
Aguirre califica la querella como "ataque a la libertad de expresión"
A su entrada a los juzgados, Aguirre ha dicho que Podemos quiere acallarla, amedrentarla y amenazarla con la exigencia de que pague 100.000 euros a través de la querella interpuesta contra ella que ha motivado este acto de conciliación con dirigentes de este partido.
Aguirre ha calificado la querella de Podemos como un "ataque a la libertad de expresión" por parte de los de Pablo Iglesias y un uso "torticero" de los tribunales.
"Es la primera vez en la historia que se dirimen diferencias ideológicas en los tribunales de justicia, es una utilización torticera de los tribunales y un ataque a la libertad de expresión", ha declarado ante una nube de periodistas. Así, Aguirre ha insistido en que ella se limitó a "leer las portadas de dos de los periódicos de mayor difusión, 'El País' y 'El Mundo'".