Mario Vargas Llosa: "El terrorismo es una peste del siglo XXI"
- Vargas Llosa sube al escenario y representará su obra Los cuentos de la peste
- La pieza se estrena en el Teatro Español el miércoles 28 de enero
- Es una adapatación del Decamerón y le acompañará Aitana Sánchez Gijón
El escritor y premio Nobel Mario Vargas Llosa (Arequipa, 1936) sube al escenario y se mete en la piel de uno de sus personajes. Será el duque Ugolino en Los cuentos de la peste, su última e inédita pieza teatral. Acompañado por Aitana Sánchez Gijón (en el papel de la condesa de la Santa Croce) y bajo la dirección de Joan Ollé, la obra se estrena el miércoles 28 de enero en el madrileño Teatro Español.
El autor pone así carne y hueso al fruto de su pluma, un texto basado en El Decamerón de Bocaccio. "No me asusta la reacción de la crítica, estoy concentrado en el trabajo, con inseguridades como la desmemoria, lo que me obliga a improvisar rápidamente", ha admitido Llosa este jueves en la presentación de la obra junto al resto del elenco, Pedro Casablanc, Marta Poveda y Óscar de la Fuente.
En palabras del responsable, "Mario ha sido un colaborador crítico y entusiasta, en los cinco textos que llevamos volcados". El director ha descrito con humor al bisoño intérprete como "un actor que tiene más posibilidades de un segundo Nobel que de un Max o un Goya", y lo que Vargas Losa define como "inseguridades", Ollé lo transforma en "Mario tiene una virtud, se subvierte a él mismo y no siempre dice la palabra que escribió, y eso es ver como el autor redacta el texto en directo", y añade que "trabajar con Mario es así, vivimos en la felicidad provisional".
Diluir la vida para olvidar la muerte
En esta libre versión de los cuentos de Bocaccio, son cinco los personajes que se encierran en Villa Palmieri para escapar de la peste, en una atmósfera que oscila entre realidad y ficción, verdad y mentira, la ilusión, lo alegórico y la literatura. Cinco personajes que improvisan un laberinto de invenciones para diluir la vida real.
"Se tocan temas problemáticos en relación a la pareja, el amor, y también hay una relación sadomasoquista entre Ugolino y su invención, la condesa de Santa Croce", explica el Vargas Llosa, que también advierte que no pretende "dar una interpretación de estos problemas". El autor reconoce que en el ámbito de la ficción, "nunca he escrito nada para mandar un mensaje determinado, solo he querido contar una historia de la forma más persuasiva posible". Y además, en palabras de Aitana Sánchez Gijón, de un modo "bellísimo y exquisito, sin ninguna vulgaridad, y con mucho humor".
"Hay sexo implícito", dice el actor Óscar de la Fuente -Pánfilo en la obra- durante la presentación. "¡Y explícito!" replica inmediatamente entre risas de complicidad Marta Poveda, la mujer de sus sueños ficticia, Filomena, "un personaje con mucha ingenuidad, lo que la hace más arrojada para lanzarse a los cuentos", describe Poveda.
La peste como símbolo
La peste que azotó Europa a mediados del siglo XIV materializó en la memoria colectiva la identidad de la muerte devastadora. "No nos hemos librado de las pestes, se reproducen, se renuevan. Es un temor colectivo a una catástrofe en ciernes o explícita", ha reflexionado Mario Vargas Llosa este jueves.
"Hemos prosperado desde la epidemia de peste bubónica, que dejó 30 millones de muertos. Actualmente, el terrorismo es una peste del siglo XXI que tiene distintas manifestaciones, religiosas y políticas", ha añadido el autor, afirmando que "el terrorista es el protagonista de este siglo".
El escritor ha contextualizado con la temática teatral diciendo que "La peste tiene un valor simbólico y en el Decamerón encarna algo más que la muerte física".
Amigos bajo los focos
La escenografía de Los cuentos de la peste se adentrará en el público, en la platea. El escenario se apodera del patio de butacas y se rodea literalmente de la atención de los oyentes que recibirán "la escritura escénica", en palabras de Ollé, decantada de la "escritura teatral".
El director sentencia un fin "La escritura se tiene que volver gestos, pasos y tonos. Las palabras salen del texto, se mueven, el verbo se hace carne", y un estado junto a su amigo el Nobel: "Hacemos una camino compartido".
"Cuando supe que uno de los actores iba a ser Vargas Llosa, pensé 'me da igual el papel que haga, quiero estar ahí'", confiesa Pedro Casablanc, que asumirá el papel de Giovanni Bocaccio.
Los cuentos de la peste es la cuarta producción del Teatro Español de una obra teatral de Vargas Llosa tras El loco de los balcones, protagonizada por José Sacristán; Kathie y el hipopótamo, por Ana Belén, y La Chunga, por Aitana Sánchez Gijón. Será también la cuarta vez que el escritor sube a un escenario en calidad de actor tras su aparición, también junto a Aitana Sánchez Gijón, en La verdad de las mentiras, Odiseo y Penélope y Las mil noches y una noches.