'La isla mínima', el pantano de la Transición
- Tiene 17 nominaciones a los Goya, la cinta con mayor número de candidaturas
- La protagonizan unos inmensos Raúl Arévalo y Javier Gutiérrez
- El rodaje de este thriller fue especialmente arduo
17 NOMINACIONES
Mejor película
Mejor director: A. Rodríguez
Mejor actor: R. Arévalo, J. Gutiérrez
Mejor actor de reparto: Antonio de la Torre
Mejor actriz de reparto: Mercedes León
Mejor actriz revelación: Nerea Barros
Mejor guion original: A. Rodríguez, R. Cobos
Mejor música original: Julio de la Rosa
Mejor dirección de producción: M. Ocón
Mejor montaje: José M.G. Moyano
Mejores efectos especiales: P. Moreno, J.Ventura
Mejor sonido: Zayas, Royo-Vilanova, Gutiérrez
Mejor dirección de fotografía: A. Catalán
Mejor dirección artística: Pepe Domínguez.
Mejor vestuario: Fernando García
Mejor maquillaje y peluquería: Yolanda Piña
Mejor sonido: Daniel de Zayas, Nacho Royo-Villanova, Pelayo Gutiérrez.
Mejores efectos especiales: Pedro Moreno, Juan Ventura.
FICHA TÉCNICA
Año: 2014
Duración: 105 min.
Director: Alberto Rodríguez
Guión: Alberto Rodríguez, Rafael Cobos
Reparto: Raúl Arévalo, Javier Gutiérrez, Nerea Barros, Antonio de la Torre, Jesús Castro, Mercedes León, Manolo Solo, Jesús Carroza, Cecilia Villanueva, Salvador Reina
La Transición. Escrita en mayúsculas. Un nombre propio de significado inconcreto. ¿Cuándo empezó? ¿Dónde acabó? ¿En qué consistió? Es decir, el período histórico como pantano. Y también el marco de La isla mínima, la película de Alberto Rodríguez (Grupo 7) que abrió la competición por la Concha de Oro en el Festival de San Sebastián y que entusiasmó en los primeros pases.
Para los Premios Goya cuenta con 17 nominaciones, la cinta con mayor número de candidaturas.
Unos inmensos Raúl Arévalo y Javier Gutiérrez se meten en la piel de dos policías enviados a las marismas del Guadalquivir para resolver un sórdido caso de desaparición de menores en 1980. O sea, pantano sobre pantano. Un policíaco visualmente impactante envuelto en una alegoría sobre las dos Españas que encarnan los dos policías. “La película es un thriller, un ‘quién lo hizo’, aunque tenga dos lecturas diferenciadas”, afirma el director para subrayar que le interesa la historia por encima de la Historia.
Un rodaje especialmente arduo
La isla mínima fue un rodaje especialmente arduo en las inhóspitas marismas y ahora recoge sus primeros elogios tras la sorpresa de no ser preseleccionada por la Academia de cine para representar a España en los Oscar. “La película era dura y había que sufrirla y saberla sudar, había momentos en los que podían haber dicho: ya no me mojo más. Pero Javi es una actor maravilloso y Raúl tiene una energía total”, afirma Alberto Rodríguez.
Raúl Arévalo coincide al recordar el impresionante (y largo) plano de persecución sobre un descampado de tierra seca. “Valoré lo difícil que es hacer películas de acción a lo Tom Cruise o Matt Damon; de tanto repetir acabamos lesionados”.
Arévalo es el joven policía progresista castigado por criticar el ruido de sables. “Alberto nos recomendó los documentales en los que inspiraron la película (Atado y bien atado y No se os puede dejar solos, de los hermanos Bartolomé), hechos a base de entrevistas a gente en la calle desde el año 77 al 81, justo antes del golpe de estado, y que nos sirvió para trabajar los personajes y entender la tensión que se respiraba en aquella España postfranquista”.
Javier Gutiérrez deslumbra con su papel de policía del régimen, una de las interpretaciones del año para el cine español. Pese a ser amigos y habituales del grupo teatral Animalario, Arévalo y Gutiérrez jamás habían coincido. “Estábamos deseándolo. Convivir con el tres meses fue un regalo, ha sido mi gran apoyo y referente”, dice Arévalo. “Destaco sobre todo su trabajo, me parece mítico. Aunque yo sabía lo gran actor que es, el gran público le conoce por la comedia y Águila roja. Demuestra esa cosa de los grandes cómicos cuando hacen drama, como Landa o Pajares. Me fascina su trabajo”.
Antonio de la Torre, que tiene un pequeño papel, y Jesús Castro 'El niño’, apodado ‘el guapo’ en La isla mínima, también acudieron a San Sebastián para arropar la presentación de la primera película y primera favorita.