Javier Gutiérrez: "Esperemos que la comunión del espectador con nuestro cine no se rompa "
- Directores, actores y productores reconocen una mayor sintonía con el público
- Sacristán: "Los títulos han coincidido en cantidad y calidad y ojalá se repita"
- El cine español afronta 2015 tras lograr su mejor taquilla histórica en 2014
"Ha sido un año muy importante y esperemos que haya en ese sentido un efecto dominó y que esta comunión del espectador con nuestro cine no se rompa y que siga apostando por el cine español", son las esperanzas que Javier Gutiérrez, candidato al Goya a mejor actor por La isla mínima, ha expresado a RTVE.es. Y es lo que los profesionales de la industria empiezan a vislumbrar en el año que comienza.
Una esperanza traducida en la afirmación con la que Enrique González Macho, presidente de la Academia de Cine Española saludaba a los presentes en la tradicional fiesta de los nominados a los premios Goya en su edición de 2015: "Es el año en que el cine español ha conseguido la mayor cuota de pantalla desde que hay estadísticas. Mejor no lo podíais haber hecho".
Según los registros de los productores audiovisuales, FAPAE, cuatro películas españolas superaron el millón de espectadores durante 2014. "Por primera vez las películas más vistas han sido películas españolas y no foráneas (...) y el motor ha sido Ocho apellidos vascos", celebraba González Macho en ese acto.
La película de Emilio Martínez-Lázaro es el largometraje español con mayor recaudación de todos los tiempos y el segundo en términos generales, solo por detrás de Avatar. Alcanzó los 56 millones de euros y los 9,5 millones de espectadores. Le siguen El Niño, que ha llegado a 16,2 millones de euros; Torrente 5: Operación Eurovegas, con 10,7 millones de euros recaudados, y La isla mínima, que todavía está en cartel, ha superado los seis millones de euros y ha sido reconocida con 17 nominaciones a los Goya,.
Según Alberto Rodríguez, director de este film, "la mayor masa de público se ha hecho con películas que se han promocionado mucho en cadenas privadas (...) las cifras están bien pero es más importante la percepción que se tiene del cine español, la gente empieza a sentirse orgullosa de sus propias películas, tiende a reconocerse en una pantalla, a ver su cultura, a ver sus calles y ver sus ciudades".
Nominado como actor revelación por Ocho apellidos vascos, el actor Dani Rovira explica a RTVE.es que la historia entre Andalucía y el País Vasco "ha tocado una tecla. Creo que la gente se ha sentido muy partícipe, se ha visto súper identificada y ha dicho ‘hostias, habéis hecho una peli que cuenta nuestras historias’, que está muy bien la ciencia ficción, las historias enrevesadas, lo que quieras… pero esto es una historia sencilla sobre nosotros. Creo que eso es el secreto".
Cultura fiscal, para la cultura
Sin embargo, aunque los datos de taquilla de 2014 son un grito de júbilo, no expresan un triunfo definitivo. Con esta batalla ganada, la guerra para la industria cinematográfica española es situarse difinitivamente en la rampa de recuperación en la gestión de una crisis económica general que afecta a todos los ámbitos del país. Los productores han afinado en 2014 el mecanismo de consumo combinando facilidades, seducción y calidad, y la promoción privada también ha hecho su trabajo.
Sin embargo, los profesionales del cine y la cultura españoles aún debaten con el 21% que marca el IVA cultural vigente desde septiembre de 2012. Acogido a la racionalidad de los economistas gubernamentales, este peaje fiscal no agiliza la ya complicada pasión entre el público y el celuloide español. Aunque, según la SGAE, por este motivo 2013 acabó con pérdidas del 18,5%, los exhibidores reconocen que "ya tenemos un precio competitivo, con una media de 6,3 euros (...) Con un esfuerzo se puede ajustar más y si nos ayudan bajando a un IVA normal como el resto de Europa, seguro que estaremos ahí", ha argumentado a RTVE.es Juan Ramón Gómez Fabra, presidente de la Asociación de Cines de España.
Así las cosas, el cine, además de relatos, es una industria, y el dinero, como la vida, parafraseando al matemático encarnado por Jeff Goldblum en aquel diálogo inolvidable de Jurassic Park (1993): "se abre camino". En 2014 ha ocurrido y "los productores han tenido la capacidad de conectar con el público", nos ha reconocido Ramón Colom, presidente de FAPAE, y ahora miles de trabajadores y empresarios miran con esperanza a 2015.
2015, se rueda
¿Qué traerá 2015 para las producciones nacionales? ¿Queda fijada la clave del éxito? "No hay fórmulas", dice el actor José Sacristán, nominado a mejor actor de reparto por Magical girl. "Se han dado unos títulos que han coincidido en cantidades y calidades y ojalá se repita", añade.
Otra de las nominadas, Nerea Barros, candidata en la categoría de actriz revelación por su trabajo en La isla mínima, también nos ha manifestado su opinión en este sentido: “Creo que empieza a haber cambios. Ha habido un declive muy grande porque ir al cine se convirtió en algo muy caro. Una familia con dos niños y un trabajo no puede permitirse gastar 60 euros en una tarde porque eso es la cena más el desayuno más la comida del día siguiente (...) Hay días del espectador, días que el cine sale más barato, la gente reacciona, se atreve, entran, ven películas de súper calidad y salen satisfechos. Es un camino a recorrer y lo estamos recorriendo”.
Un camino nuevo, apuntado y deseado: "El público no es tonto y lo que quiere son facilidades. Este país no las ha tenido últimamente, así que creo que hace falta un cambio. A la gente le gusta el cine, es cultura y es necesario para que un país no se quede pequeño", afirma a RTVE.es la actriz María León, candidata al Goya a la mejor actriz por su papel en Marsella.
El año revelará si los rodajes en curso (según el MCU) consolidan la tendencia y no se rompe el cristal de seducción. El programa de cinematografía en los Presupuestos Generales del Estado contempla una dotación para 2015 de 50,69 millones de euros. Una cifra que supone un incremento de un 5,1 por ciento, pero aún muy lejos del monto destinado a ese fin en Francia, que aunque se ha reducido un 5 por ciento, supera los 650 millones de euros.
El talento, sobre todo
Ya sea el humor fresco con desparpajo geográfico de Ocho apellidos vascos, las introspecciones psicológicas aferradas a la tierra y a la idiosincrasia de La isla mínima, o la oscuridad de la psique, en Magical girl, o la acción trepidante de El Niño, son historias que han hecho vibrar la pantalla y la taquilla junto al resto de películas españolas, marcando un camino que se ha demostrado posible, rentable en cultura y beneficio industrial.
"Hay crisis económica, pero no hay crisis de talento, ni crisis de ideas, ni crisis de esperanza (...) La peña sigue haciendo películas y este año habrá 10 películas españolas que han hecho taquilla", se reafirma Dani Rovira, que compara con humor las condiciones más allá de los Pirineos: "Somos dos cirujanos buenísimos, pero ellos operan en quirófano y nosotros con un cuchillo".
En la misma dirección González Macho incidía en la fiesta de los nominados, previa a la gala de los Goya que se celebrará este 7 de febrero: "Estamos como nunca, maltratados política y económicamente, pero nuestro talento está más vivo que nunca".