El 'efecto nominación' manda en la taquilla de Hollywood

• El anuncio de las nominaciones ha disparado la taquilla de algunas cintas
• Las ocho candidatas han incrementado un 177% su recaudación
• El francotirador, de Eastwood, lidera el ránking de la taquilla

Un fotograma de 'El francotirador', con Bradley Cooper y Jake McDorman.

2008 fue el último año en que había cinco candidaturas por categoría, incluida la de mejor película. Los tres años siguientes se dobló el número y en los dos últimos se rebajó la cifra a nueve. Para las películas estrenadas en 2014 se reduce de nuevo el grupo y serán ocho títulos los que opten al Oscar más preciado.

El efecto en la taquilla norteamericana de los premios del año pasado fue casi testimonial: sólo se incrementó la recaudación de las nueve películas en conjunto en apenas un 2,8%. Entre todas, poco más de 16 millones de euros añadieron a los respectivos parciales. Las nominaciones, en cambio, habían hecho crecer la caja un 22,5% (105,5 millones de euros frente a los 474,4 millones ingresados previamente). La recaudación total de las nueve películas ascendió a 594 millones, de forma que la taquilla le debió agradecer a los Oscar poco más del 20% de sus ventas. Y casi todo generado antes de la ceremonia final.

El título que salió mejor parado tras la gala fue 12 años de esclavitud, la ganadora de la estatuilla a mejor película, que aumentó en 4,6 millones de euros su recaudación. Había ingresado 28,7 millones de euros antes de hacerse públicas las nominaciones, tras las que recaudó un 29% más (8,2 millones de euros). Acumulaba, por tanto, 36,9 millones de euros antes de la entrega de los Oscars, de forma que esos 4,6 millones recaudados con posterioridad suponen un incremento adicional del 12.5%, cuatro veces más de lo que crecieron las nueve nominadas en su conjunto.

Las nominaciones disparan la taquilla en 2015

Las ocho candidatas a hacerse con el máximo galardón en la ceremonia del domingo 22 de febrero acumulaban, diez días antes de esa fecha, 503 millones de los que 176,8 provenían de antes de saberse las candidaturas. Las nominaciones, por tanto, han sido responsables de, al menos, el 65% de ese acumulado (326,2 millones). Dicho de otra manera, las nominaciones supusieron un incremento del 177% sobre la taquilla generada previamente. Porcentualmente es mucho más de lo sucedido el año anterior, lo cual demuestra que, este año sí, las nominaciones han sorprendido y han decidido a muchos espectadores a elegir las candidatas a los Oscar.

Dos son los títulos que reúnen el mayor número de nominaciones, nueve. Y la que acumula una mayor recaudación antes de la ceremonia de entrega de los Oscar es El gran hotel Budapest. Curiosamente, la de Fox Searchlight generó el 100% de sus ingresos antes de saberse las candidaturas. Se había estrenado el 7 de marzo de 2014 en casi 1.500 locales y cerró su estancia en las salas con los 45 millones que atesora actualmente. Su distribuidora no repuso la película como consecuencia de las nominaciones. Inédito. ¿Será que consideran que ya ha cumplido con su cometido comercial (y ya se preocuparán de atacar de nuevo al mercado norteamericano si se alza con algún gran premio) o es que prefieren no interferir en el camino de su otra candidata, Birdman...?

Es precisamente Birdman la segunda película con nueve nominaciones. En este caso, se había estrenado a mediados de octubre en 862 cines y había recaudado 23 millones antes de comunicarse las candidaturas. Tras saberse éstas se exhibió en 976 locales y añadió casi 8 millones a su parcial, un 25% de su recaudación hasta el momento. Comparte con El gran hotel Budapest candidatura a tres galardones de los considerados más importantes: película, director y guion original.

A ocho estatuillas opta la británica The imitation game, cinco de ellas de primer nivel (película, director, actor principal, actriz de reparto y guión adaptado). Se había estrenado a finales de noviembre en 1.566 complejos y recaudó, hasta el 15 de enero (fecha de las nominaciones), cerca de 37 millones. El efecto en taquilla de las candidaturas ha sido contundente; pasó a estar presente en 2.400 locales y añadió otros 29 millones (incremento del 78%) para un parcial de 66,7 millones hasta la fecha.

Taquillazo de Eastwood

El francotirador es, de entre todas las aspirantes a mejor película, la que presenta números más llamativos. En estos momentos acumula 253 millones (tercera mejor marca del año) de los que apenas 3 millones provienen de antes de las nominaciones. La razón es bien sencilla. Se había estrenado a finales de diciembre, con el tiempo justo para optar a los Oscar, en tan solo cuatro cines. Y no aumentó presencia hasta saberse las candidaturas. Pasó entonces a estar presente en 3.500 locales y ahora alcanza casi los 4.000 complejos.

Es la causante, por tanto, de que los números pre y post nominaciones de los ocho títulos candidatos a mejor película en su conjunto tengan el cariz que tienen. Sorprende que entre las seis categorías a que opta no se encuentre la de mejor dirección para Clint Eastwood. Eso sí, por tercer año consecutivo Bradley Cooper aspira al Oscar a mejor actor. No se lo llevó con El lado bueno de las cosas en 2013 ni con La gran estafa americana el año pasado. No lo tendrá fácil tampoco éste.

También seis nominaciones recibió Boyhood, uno de los títulos que, junto a Birdman, más aparece como favorita en las quinielas previas a la ceremonia definitiva. En este caso su director, Richard Linklater, aspira al Oscar por duplicado (dirección y guión original) como también lo hacen los actores de reparto. Con Boyhood sucede todo lo contrario, por lo que al comportamiento en taquilla se refiere, que con El francotirador. Se estrenó en julio en cinco salas y fue aumentando presencia hasta alcanzar los 775 cines a primeros de septiembre. Justo antes de las nominaciones apenas se podía ver en 20 pantallas. Tras ellas llegó a reponerse en 200 cines pero solo 60 resisten en la actualidad. De los 22,2 millones que acumula a diez días de la gran gala el 97% proviene de antes de las nominaciones.

La teoría del todo opta a cinco estatuillas, cuatro de primera categoría (película, actor y actriz principales y guión adaptado) pero sin la posibilidad de ver subir al escenario a su director James Marsh. Estrenada también de forma limitada (cinco cines a primeros de noviembre) fue creciendo en presencia de cara a Navidades (cuando se podía ver en 1.220 locales). Antes de las nominaciones había recaudado 22,6 millones y, con posterioridad, añadió otros 5,4 millones, un incremento del 24%, para un parcial de 28 millones a pocos días de la entrega de premios.

Las pequeñas en competición

La producción comercialmente más “pequeña” de todas las que han sido nominadas a mejor película entre las estrenadas en 2014 es Whiplash.  Entre sus cinco nominaciones tampoco está la de mejor dirección para Damien Chazelle, quien sí opta al galardón por el guión adaptado, y destaca sobremanera la de actor de reparto para J.K. Simmons, candidato muy bien posicionado en buena parte de las apuestas. Whiplash se estrenó en seis salas en octubre y alcanzó su máxima presencia, antes de las nominaciones, a mediados de noviembre (420 locales). Cuando se hicieron públicas las candidaturas se podía ver en 190 complejos y acumulaba 5,3 millones. Tras las mismas pasó a exhibirse en casi 570 cines y ha añadido prácticamente otros 3 millones, de forma que las nominaciones han supuesto un incremento del 56% y representan el 35% de los 8,3 millones acumulados hasta el momento.

La última candidata a mejor película es Selma,  que solo cuenta con una nominación más (mejor canción original). Como ha sucedido y sucede con tantas otras películas llegó a la cartelera norteamericana a cuatro días de finalizar el año para poder optar a los Oscar. Lo hizo desde 19 cines que, el fin de semana previo a hacerse públicas las nominaciones, se habían convertido en cerca de 2.200. Sumaba 14,3 millones que actualmente han crecido hasta los 41,6 millones. Por tanto, tras saberse las candidaturas, ha añadido 27,3 millones, lo que implica un aumento del 84% en relación a su taquilla previa.

Vista la presencia de mercado de unas y otras candidatas a mejor película hay cuatro títulos (Birdman, Boyhood, Whiplash y Selma) que, de recibir los galardones más preciados, estarían en condiciones de incrementar de forma muy notoria su recaudación final. Es así tanto para Birdman como, muy especialmente, para Boyhood, las dos que más suenan como claras favoritas. Ninguna de ellas ha llegado a estar presente en 1.000 cines en ningún momento de su carrera comercial y sus acumulados (31 millones de euros y 22, respectivamente) permiten crecimientos muy significativos.

No serían, en cualquier caso, cifras finales de taquilla espectaculares. Podrían serlo algo más, a pesar de exhibirse en cerca de 2.000 locales, las que generase The imitation game, el título con candidatura a mejor película y mejor director que presenta una recaudación acumulada más elevada y con una muy buena progresión tras las nominaciones.