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Una treintena de inmigrantes subsaharianos logra entrar en Melilla tras saltar la valla

  • Unas 20 personas ha permanecido encaramadas a la valla varias horas
  • Un inmigrante resulta herido y una reportera detenida en el intento de salto

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Agentes de la Guardia Civil escalan la valla fronteriza de Melilla para evitar el asalto de los inmigrantes subsaharianos
Agentes de la Guardia Civil escalan la valla fronteriza de Melilla en una imagen de archivo.

Un total de 35 subsaharianos han conseguido este miércoles llegar al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla tras el último intento de salto por la valla fronteriza, en el que ha participado un centenar de personas. Una veintena de inmigrantes han permanecido encaramados a la valla durante varias horas, a pesar de la lluvia y el viento.

En el intento, un joven subsahariano ha resultado herido en las manos y una reportera gráfica ha sido detenida por la Guardia Civil acusada de llevarse inmigrantes en su coche, según ha denunciado la ONG Prodein.

Según han confirmado a Efe fuentes de la Delegación del Gobierno, la tentativa se ha registrado sobre las 6:40 horas de este miercoles por la zona del perímetro próxima al puesto fronterizo de Barrio Chino y el aeropuerto, el lugar elegido por los inmigrantes para las últimas entradas a Melilla.

Una reportera gráfica, detenida

Una reportera gráfica ha sido detenida por la Guardia Civil acusada de intentar llevarse a inmigrantes en su coche, según ha denunciado la ONG Prodein. Fuentes del entorno de fotógrafa, la colaboradora de AFP Angela Ríos, han rechazado esa acusación y la han tachado de absurda, recalcando que el salto se ha producido a pocos metros del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).

Por otra parte, el joven herido presenta cortes en las manos tras sortear la doble valla de seis metros de altura cada una y los cables entrecruzados que hay entre ambas.

Debido a la importancia de las lesiones que presenta en las extremidades, una ambulancia de Cruz Roja le ha trasladado al Hospital Comarcal para ser atendido allí por su personal sanitario en Urgencias. El número de inmigrantes que ha podido pasar aún no ha sido determinado por la Delegación del Gobierno pero se sabe que han sido varios los que lo han conseguido, entre ellos el herido.

Una veintena de inmigrantes se han subido a la valla

Además de los 35 que han logrado acceder a suelo español, alrededor de una veintena de personas se ha encaramado a la valla, donde han permanecido más de cinco horas ante un fuerte despliegue policial, y a pesar de la lluvia, el viento.

Según ha confirmado la Delegación del Gobierno, pasado el mediodía sobre la valla ya no quedaba ninguno de los casi veinte inmigrantes que habían comenzado a subirse a ella sobre las 6:40 horas.

Según ha podido comprobar Efe, los inmigrantes se encontraban encaramados en una zona muy próxima al puesto fronterizo de Barrio Chino, que ha estado cerrado, al igual que un tramo de la carretera de circunvalación, que discurre paralela al perímetro.

Este ha sido, precisamente, el lugar elegido por los inmigrantes para las últimas entradas a Melilla, una coincidencia que se debe a que la proximidad a la valla de una serie de viviendas, en el lado marroquí, facilita a los subsaharianos poder esconderse.

Fuentes policiales han explicado a Efe que, precisamente, los subsaharianos se han podido aprovechar de las malas condiciones meteorológicas que afectan a Melilla, lo que ha imposibilitado la salida del helicóptero de la Guardia Civil, fundamental en labores de vigilancia fronteriza.

Los inmigrantes que han conseguido entrar han llegado al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) escoltados por varios coches de la Policía Nacional.

A diferencia de otras ocasiones, los subsaharianos han llegado más tranquilos, casi caminando, y a las puertas del centro no se encontraban esperándoles sus compatriotas, como sí ha ocurrido otras veces. Eso sí, poco más tarde, ya en el interior del CETI, a lo lejos, se han oído los tradicionales gritos de júbilo y de alegría, al recibir a los recién llegados.

Primer salto desde que Marruecos desmanteló los campamentos

El salto, primero que se produce desde el 10 de febrero cuando Marruecos empezó a desmantelar los campamentos próximos a Ceuta y Melilla donde los subsaharianos esperan para acceder a España.

Desde entonces, se había advertido un descenso de la presión migratoria, aunque la Guardia Civil permanecía en alerta.

En el último salto, de hace nueve días, los 40 inmigrantes que consiguieron acceder a Melilla lo hicieron por la misma zona del Barrio Chino.