Pablo Ibar espera todavía en el corredor de la muerte el dictamen del Supremo de Florida
- La defensa pide la repetición del juicio por los fallos en el primer proceso
La defensa del español Pablo Ibar, condenado a muerte en EE.UU. en el año 2000, espera que el Tribunal Supremo de Florida decida, "en cualquier momento", sobre la anulación de la sentencia y celebración de un nuevo juicio contra su cliente.
Un tribunal del condado de Broward, al norte de Miami, denegó una moción presentada por el letrado de Ibar, Benjamin Waxman, y ahora todas las esperanzas están depositadas en el Supremo del estado, según ha explicado a Efe Waxman.
La agencia informó previamente de que el Tribunal Supremo de Florida había rechazado la petición de anulación de sentencia y el abogado había recurrido esa decisión. RTVE.es recogió esta primera versión que luego ha corregido Efe.
Ibar, de nacionalidad española y estadounidense, se encuentra "ansioso, lo que es comprensible, pero con buen estado de moral", ha añadido el letrado.
El 8 de abril del 2014, Waxman hizo una exposición oral de veinte minutos ante el Supremo de Florida, en Tallahassee, la capital del estado, en la que defendió la anulación del veredicto y la celebración de un nuevo juicio contra su cliente, ante el cúmulo de "pruebas exculpatorias".
"Seguimos a la espera de un fallo, que podría venir en cualquier momento", ha explicado el abogado.
Desde 1994
Ibar, de 43 años, lleva 21 años preso en una cárcel de Florida, 15 de ellos en el corredor de la muerte, condenado por el asesinato en 1994 de dos modelos y el dueño de un local nocturno.
La defensa hace hincapié en dos aspectos. En primer lugar, la poca fiabilidad de la prueba determinante: un vídeo "sin sonido, borroso, granulado", grabado por las cámaras de seguridad de la casa del dueño del club y el testimonio, en ese sentido, de un experto facial que lo tacha de nada fiable.
Y en segundo lugar, la "desastrosa" defensa de Ibar que realizó el abogado de oficio, Kayo Morgan, durante el juicio en que fue condenado a muerte.
Morgan confesó en una audiencia en 2009 en un tribunal de Fort Lauderdale, al norte de Miami, que había cometido graves errores en el proceso y lo justificó por su mala salud, cuadros depresivos y problemas con su esposa, siempre según Efe.
Ibar, que tiene doble nacionalidad estadounidense y española, siempre ha mantenido su inocencia.