Un hombre mata a ocho personas y luego se suicida en la República Checa
- Se ha producido en la localidad de Uherske Brod
- El autor avisó de sus intenciones a una televisión
Un hombre ha matado a tiros a ocho personas y después se ha suicidado en un restaurante de la localidad de Uhersky Brod, al este de la República Checa.
Este es el acto de violencia con mayor número de víctimas en el país centroeuropeo en los últimos diez años. El ministro de Interior, Milan Chovanec, ha descartado categóricamente que se trate un atentado terrorista.
Restaurante lleno para el almuerzo
El suceso ha tenido lugar este martes cuando el céntrico restaurante "Amistad" de Uherske Brod, una localidad de 17.000 habitantes, se encontraba en plena hora del almuerzo.
Alrededor de las 13.00 horas, el tirador ha entrado en el local y ha comenzado a disparar de forma indiscriminada con un arma de calibre 9 milímetros, según informa la cadena de televisión pública Ceská Televize.
Un testigo que se ha salvado porque estaba en el lavabo ha declarado que había unas 20 personas comiendo y el agresor ha efectuado alrededor de 25 disparos de manera indiscriminada.
De las ocho víctimas mortales, siete son hombres y una es una mujer, mientras que otra mujer ha sido ya operada tras sufrir impactos de bala en el esternón y permanece en la unidad de cuidados intensivos en un hospital de una localidad cercana.
Las unidades especiales que se desplazaron al lugar no han tenido que intervenir porque el presunto atacante se ha suicidado antes de su llegada.
El responsable de Interior ha confirmado que el presunto autor del tiroteo contaba con una licencia de armas.
Llamó para anunciar sus intenciones
Por el momento se desconoce el motivo del agresor. Lo que sí se sabe es que, minutos antes del ataque, a las 12.56 horas, el presunto autor llamó por teléfono a la cadena de televisión privada Prima y avisó de sus intenciones.
"Nos dijo que tenía grandes problemas con muchas personas, que muchos le hacían daño y que no tenía otra salida, ya que las oficinas públicas no le ayudan y que, como tenía pistolas, lo iba a solucionar a su modo", según ha explicado Pavel Lebduska, redactor de la cadena.
"Me di cuenta de que el hombre no estaba bien de la cabeza y llamamos enseguida a la Policía", ha añadido.
Patrik Kuncar, alcalde de esta localidad fronteriza con Eslovaquia, ha declarado que no había que descartar que el presunto criminal sufriera alguna "perturbación".