Fin a la campaña del "tiki taka", los "conejos en la chistera" y las bayetas anticorrupción

• Los líderes nacionales cierran en Andalucía la campaña electoral
• Díaz ha hecho campaña 'sola' y Moreno ha estado muy arropado
• UPyD ha inventado micromítines y Podemos, mítines participativos
• Díaz se lleva un ajuar para su bebé en una campaña tensa

Los militantes pelean por hacerse fotografías con los candidatos y líderes políticos.

A las 00:00 de esta noche la campaña electoral de las elecciones andaluzas habrá llegado a su fin. Quince intensos días en los que el ritmo, intensidad y dureza de los mensajes han ido 'in crescendo', según se iba calentando el ambiente con "puñaladitas" y "peleas a lo Pimpinela", tal y como definió el candidato de IU, Antonio Maíllo, los mensajes no de amor precisamente que se dedicaron en el debate en TVE la candidata del PSOE, Susana Díaz; y el del PP, Juan Manuel Moreno.

Una campaña en la que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha sacado a la luz los "conejos en la chistera". No los suyos, dijo, los de los "bisagristas", tal y como definió a los nuevos partidos- Podemos y Ciudadanos- que han tenido un claro protagonismo ante unas encuestas que les dan un papel decisivo en el próximo arco parlamentario andaluz.

Rajoy ha recorrido unos cuantos kilómetros por Andalucía estos últimos 15 días, los suyos y los que no ha hecho el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, otro de los protagonistas de la campaña, por ausente. Solo ha acompañado a su candidata en una ocasión, aunque este viernes cerrará con ella la campaña en Sevilla.

También acompañarán a sus candidatos en la noche final el resto de líderes nacionales de los principales partidos, muy conscientes de que las elecciones de este domingo son el primero de los cuatro partidos que se juegan este año. A estos comicios seguirán las elecciones municipales y autonómicas, en mayo; las catalanas, en septiembre; y las generales, previsiblemente antes de que acabe 2015.

El coordinador federal de IU, Cayo Lara; el candidato a la Presidencia del Gobierno de IU, Alberto Garzón; y los líderes de Ciudadanos, Albert Rivera, y de UPyD, Rosa Díez, también han estado casi todos los días por tierras andaluzas desde que arrancó la campaña, el 6 de marzo. Hasta el histórico dirigente de IU Julio Anguita, que llevaba sin dar un mitin 14 años, se ha lanzado de nuevo al ruedo mitinero para volver a los viejos tiempos y elevar los ánimos de la izquierda.

Por decisión propia o ajena, lo cierto es que Susana Díaz ha realizado su periplo andaluz practimente en solitario y claro, tanto mitin sin grandes teloneros, la dejaron a mitad de campaña casi sin voz. Sí la suficiente para atacar constantemente al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y a la "romería de ministros" que, en su opinión, han ido a la región. Poco se ha acordado, eso sí, del nombre de su rival en el PP, Juanma Moreno (como le gusta que le llamen), al que poco o nada ha citado en los mítines.

Moreno ha interpretado este "ninguneo", como él mismo lo ha definido, como una prueba más del "anhelo" de Díaz para dar el salto a la política nacional y competir con Rajoy por el sillón de la Moncloa. "Señora Díaz, que estamos en Andalucía", le ha repetido una y otra vez.

Los hijos de Díaz y Moreno, las bayetas magenta y naranjito

Gane o pierda, a Susana Díaz le quedará un buen recuerdo de esta campaña por la cantidad de regalos que ha recibido para su futuro hijo. En cada pueblo le han obsequiado con patucos, ropa de bebé y peluches.

Los tres hijos de Moreno también han acudido a algún acto de partido, junto a su esposa, que ha tenido su protagonismo en la campaña. En algunos mitines se ha proyectado un vídeo en el que la mujer y la madre de Moreno destacaban las cualidades del candidato 'popular', al que molestó y mucho que se filtraran datos de escolarización de sus hijos y que Díaz se hiciera eco de ello en un mitin. Denunció el caso ante la Fiscalía de Menores.

Rosa Díez, la líder de UPyD, no ha parado de 'limpiar' Andalucía de corrupción. Y esto es literal. Bayeta magenta en mano, y junto a su candidato, Martín de la Herrán, ha querido dar lustre a la comunidad "para eliminar los gérmenes". Pero no solo ha limpiado ella. Ha repartido bayetas por doquier. No había pescadero, quiosquero o mirón de turno que se le resistiera. También, pertrechada con su bata blanca, ha puesto vacunas contra la corrupción.

UPyD ha querido innovar y además de estas 'performances' en plena calle, ha inaugurado los micromítines en tranvías, ante la sorpresa de los pasajeros que se encontraban con el diputado y candidato a la Presidencia de Valencia, Toni Cantó, repartiendo propaganda electoral en pleno viaje.

Podemos, por su parte, se ha lanzado al mitin participativo. Así, su candidata, Teresa Rodríguez, ha respondido a las inquietudes de los ciudadanos en plena calle, a lo 'Tengo una pregunta para usted'.

Aunque por muchos actos que se inventen, el rey de la campaña sigue siendo el mitin. Y en estos el guion no cambia, solo los colores: azul PP, rojo PSOE, magenta UPyD, morado Podemos y naranja Ciudadanos. Los colores que les unen a todos: el verde y blanco de la bandera andaluza, que se ha visto en los actos de todos los partidos.

Salvo en los colores, por tanto, pocas diferencias entre unos mítines y otros. Banderolas en alto; pancartas con más o menos ingenio; candidatos que se ven presidentes y se vienen arriba; gritos de 'guapa' o 'guapo' a los políticos, lo sean o no; peleas por conseguir un 'selfie' con el líder de turno; y besos, abrazos y achuchones sin medida y control. Y en el caso de Andalucía, muchos 'olés'.

Besos, los muchos que dio el líder de Podemos, Pablo Iglesias, a su candidata Teresa Rodríguez, y los que se llevó el número dos de la formación, Íñigo Errejón, por el que hubo empujones en varios mítines del público más joven.

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, recibió con mucho humor y una sonrisa la camiseta de naranjito que le regalaron en un acto.

Y como en toda buena campaña que se precie, no pueden faltar las clásicas instantáneas llegando a un acto montado en diferentes medios de transporte. Aquí, Maíllo se ha llevado la palma. Se le ha visto en bici y en moto. Moreno ha preferido el camión y Martín de la Herrán, el tranvía.

Otra de las anécdotas, aunque poca gracia hizo a todos los candidatos andaluces, incluido el del PP, vino de la mano de los 'populares' extremeños, que lanzaron una miniserie de animación que mostraba, a modo de parodia, las diferencias entre Andalucía y Extremadura.

Los innombrables presentes en campaña

Pero no todo es diversión en las campañas y los momentos más tensos han venido vinculados a los casos de corrupción que afectan al PP y al PSOE.

Moreno ha sacado a pasear, muy a pesar de Díaz, dos fotografías de la candidata con los expresidentes Manuel Chaves y José Antonio Griñán, imputados en el caso de los ERE. Lo hizo en los debates televisados de TVE y Canal Sur, en los que se han vivido los momentos más broncos de estas dos últimas semanas.

Díaz, que avisó de que no entraría en 'el y tú mas', entró para citar el caso Gürtel y el caso Bárcenas, en el primer debate. En el segundo se acordó hasta del caso de los trajes del expresidente valenciano, Francisco Camps, y del caso Pujol, entre otros.

En los mítines de este viernes echarán el resto. Todos los candidatos han pedido a sus militantes un último empujón para convencer a los indecisos.

Podemos, con un claro revés al PSOE, dará ese empujón final en el velódromo de Dos Hermanas, un espacio vinculado al socialismo andaluz y en el que desde el expresidente Felipe González hasta el exvicepresidente Alfonso Guerra han dado históricos mítines para el PSOE andaluz.