Las claves de unas elecciones andaluzas a las que todos los partidos miran con lupa

• El PSOE se la juega en su feudo, con el liderazgo nacional a debate
• El PP podría enfrentarse a su primera derrota importante desde 2011
• Tras su irrupción en las europeas, Podemos se enfrenta a su primer exámen
• Ciudadanos también mide su fuerza fuera del Parlament de Cataluña
• Sigue en RTVE el especial elecciones andaluzas de este domingo

Cerca de seis millones y medio de andaluces están llamados a las urnas

Las elecciones, en cifras:

-10º elecciones autonómicas en Andalucía

-Primeras elecciones anticipadas desde el año 1996

-6.496.685 electores convocados a las urnas

-245.202 nuevos electores

-3.835 colegios y 9.873 mesas electorales

-86 millones de papeletas y 7 millones de sobres

-22 partidos, una coalición y una agrupación electoral

-Sevilla y Málaga son las provincias con más electores

-120.000 personas trabajarán en la jornada electoral

-El presupuesto del dispositivo electoral: 11,8 millones

Andalucía celebra este domingo sus elecciones autonómicas, las primeras anticipadas desde 1996, después de la ruptura del Gobierno en coalición entre PSOE e IU, que apenas ha alcanzado los tres años de duración. A pesar del carácter regional de esta cita con las urnas, toda España y, en especial, todos los partidos, miran al sur, a unos comicios convertidos en el banco de pruebas de la política española en un año clave.

Primera de las cuatro citas electorales del año

Así, 2015 será decisivo en lo político por las cuatro importantes citas electorales que se celebran. Los andaluces marcarán este 22M la salida de un año determinante en la configuración de un nuevo mapa político en España con elecciones municipales y autonómicas, en mayo; elecciones catalanas, en septiembre; y comicios generales, previsiblemente en noviembre.

Un nuevo escenario que ya se empezó a configurar en las elecciones europeas de mayo de 2014, en las que ganó el PP pero el bipartidismo se hundió al no sumar 'populares' y socialistas juntos el 50% de los votos, en el que fue su peor resultado histórico.

Todas las encuestas sobre las elecciones andaluzas, las previas a la campaña y las realizadas después del 6 de marzo, consolidan esa tendencia que pronostica el fin del bipartidismo y de las mayorías absolutas y la irrupción con fuerza de dos formaciones políticas nuevas: Podemos y Ciudadanos.

Aunque cada proceso electoral tiene sus condicionantes propios y no son comparables ni extrapolables unos resultados a otros, lo cierto es que los partidos mirarán con lupa lo que pase en Andalucía, que repercutirá en las estrategias nacionales de cara al resto de elecciones que vienen.

Más que significativo ha sido el interés que han puesto casi todos los líderes nacionales en estos comicios, volcándose en su campaña, muy conscientes de lo que se juegan más allá de Despeñaperros.

El PSOE se la juega en su gran feudo

Andalucía ha celebrado nueve elecciones autonómicas- las de este domingo son las décimas- y en ocho de esas nueve citas electorales el PSOE ha sido la fuerza más votada.

Solo en las anteriores elecciones de 2012 el PP rozó el sueño de arrebatar este feudo socialista en el que nunca ha gobernado nadie que no sea el PSOE en más de 30 años.

Los populares- con Javier Arenas al frente- consiguieron el hito histórico de ganar las elecciones en una comunidad siempre pintada de rojo en los mapas electorales. Pero no siempre ganar es gobernar y se quedó a las puertas del Palacio de San Telmo, sede del Gobierno andaluz, al que entraron de la mano PSOE e IU.

Todas las encuestas señalan una victoria socialista este domingo pero lejos de la mayoría absoluta que marcan los 55 diputados. Los pactos se convertirían así en los verdaderos vencedores de este 22M si se cumplen los pronósticos y no hay sorpresas.

Pero ¿cómo gobernaría el PSOE? ¿con quién pactaría? ¿lo haría en solitario con apoyos puntuales? Todo está en el aire y lo único que ha repetido la candidata, Susana Díaz, en campaña es que quiere gobernar en solitario y que su "único pacto es con los andaluces".

El escenario de pactos se vislumbra complicado a juzgar por los mensajes que han lanzado en campaña los partidos que pueden convertirse en llave de Gobierno. Así, IU, que según las encuestas se hunde, ve difícil repetir bipartito; Podemos aboga por una alianza de izquierdas, en la que no parece contar con el PSOE, y descarta entrar en un Gobierno de Díaz; y Ciudadanos ve "casi imposible" pactar con alguien porque no quiere entrar, dice, en el juego de la "vieja política de sillas".

PP, pendiente de ¿su primera derrota importante desde 2011?

Pero si el PSOE se la juega en estos comicios, el PP no se queda atrás. Desde 2011 ha ido cosechando triunfo tras triunfo en las urnas.

En ese año, en mayo, los 'populares' arrasaban en las municipales y autonómicas y teñían de azul la mayoría de municipios y comunidades españolas. El partido continuó su ascenso y en noviembre de 2011 logró el mayor poder de su historia en unas generales.

No se quedó ahí y en 2012, aunque finalmente no pudo gobernar, consiguió un triunfo histórico en Andalucía; y en 2014 también ganó las europeas, aunque ahí ya se vislumbró el fin de las mayorías aplastantes.

Se enfrentan por tanto en Andalucía a la que podría ser su primera derrota importante desde 2011, pasando de los 50 diputados en los anteriores comicios a los 34 que les dan algunas encuestas.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, volcado en la campaña, y su candidato, Juan Manuel Moreno, no se han cansado de repetir que el "único voto útil real es el del PP" porque todo lo demás supone, en su opinión, que el PSOE se "perpetúe" en el poder a través de los pactos.

Rajoy ha insistido en que es partidario de que en Andalucía gobierne el partido más votado y, en este sentido, ha dicho que no forzará que Díaz tenga que pactar con fuerzas como Podemos si se cumplen las encuestas y ella gana las elecciones pero se ve con la imposibilidad de formar un gobierno estable. También el presidente ha señalado que, en caso de que el PP ganara las elecciones en esta región y tuviese que llegar a acuerdos, "no hay que hacer grandes esfuerzos para intuir con quien podría entenderse".

IU podría hundirse y pasar de la tercera a la quinta fuerza

IU podría ser una de las fuerzas más perjudicadas por la entrada de nuevos partidos como Podemos y Ciudadanos, tanto que algunas encuestas llevan a la coalición hasta la quinta posición en el arco parlamentario andaluz.

De ser la llave de gobernabilidad en las anteriores elecciones andaluzas, con 12 escaños, podrían pasar a los 4-5 que les otorgan algunos sondeos.

Su candidato, Antonio Maíllo, ha tratado de ignorar las encuestas y convencer a los votantes de que ellos son la "verdadera izquierda" en Andalucía y ha marcado las distancias con el Gobierno del que IU ha formado parte tres años.

Podemos y Ciudadanos y el cambio en el mapa político andaluz

Podemos fue la gran sorpresa en las elecciones europeas el año pasado y, con su líder a la cabeza, Pablo Iglesias, consiguieron cinco escaños en el Parlamento Europeo, partiendo de la nada.

10 meses han pasado de ese primer golpe en la mesa de esta formación, que parece consolidarse también a nivel autonómico y nacional, según todas las encuestas. El último CIS sitúa a Podemos en segunda posición en intención de voto en unas elecciones generales, desbancando al PSOE a un tercer lugar. El barómetro de noviembre les llegó a situar como la primera fuerza en voto directo.

Con este escenario, de momento ficticio, Podemos se enfrenta así a su segundo examen importante en las urnas. En el caso del Parlamento andaluz, los sondeos sitúan a este partido en tercera posición.

Si fueron la sorpresa en las europeas, ahora quieren serlo, dicen, en las andaluzas, donde salen "a gobernar", ha señalado la candidata, Teresa Rodríguez.

Utilizando el mismo lenguaje, Ciudadanos ha señalado en campaña que también aspira a ser "la gran sorpresa" de este domingo. Las encuestas les sitúan en cuarto lugar, por encima de IU.

Ciudadanos también se enfrenta a su prueba de fuego fuera de Cataluña. En esta comunidad ya consiguió grupo propio en las últimas elecciones catalanas de 2012, cuando se alzaron con 9 escaños triplicando los obtenidos en 2010. Y en las europeas, obtuvieron dos diputados. Ahora toca ver su efecto fuera del que ha sido su espacio natural en los últimos años.

El presidente de C's, Albert Rivera, con la mente puesta en la Moncloa, ha usado la campaña andaluza para situarse como líder más nacional que catalán y venderse fuera del Parlament. Su candidato a la Presidencia de la Junta, Juan Marín, ha insistido en que este partido será "clave" en Andalucía, hasta el punto de que puede ser la llave del Gobierno.

UPyD y su oportunidad perdida en las elecciones de 2012

Todos los sondeos dejan fuera a UPyD del Parlamento andaluz. Ya lo intentó en 2012 con el mismo candidato, Martín de la Herrán, el único que repite este domingo como cabeza de lista electoral, y no obtuvo representación.

Entonces UPyD representaba el papel de lo nuevo, pero ahora ese rol se lo han quitado Podemos y Ciudadanos, que han puesto a la formación 'magenta' la prueba más dificil que nunca.

También lo tiene más que complicado, a juzgar por los sondeos, el Partido Andalucista (PA) y su candidato, Antonio Jesús Ruiz, cuyo objetivo es recuperar la representación parlamentaria perdida en 2008.

¿Cómo afectará el resultado al liderazgo en el PSOE?

El resultado de este domingo marcará el futuro político de Susana Díaz pero en Ferraz estarán más que pendientes. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ya ha dejado claro que quiere ser el próximo inquilino de la Moncloa, pero la sombra del PSOE andaluz y de la todopoderosa Díaz es más que alargada y sin el 'visto bueno' de esta federación, poco o nada podrá conseguir Sánchez.

Ella ha insistido, una y otra vez, en que solo le interesa Andalucía y los andaluces, pero se niega a mostrar un apoyo público a su jefe de partido de cara a las primarias que el PSOE celebrará en julio para elegir a su candidato en las próximas elecciones generales. Díaz aupó a Sánchez a la Secretaría General en julio de 2014 y ella sabe que puede reforzar su liderazgo o casi acabar con él.

La frialdad entre los dos es notoria y, fuera de campaña, indisimulada. Sánchez solo ha ido dos veces en estos últimos quince días a apoyar a la candidata, que, por el momento, no quiere entrar "en líos de partidos". De momento.

Los 'barones' socialistas y candidatos a alcaldes además tienen en el punto de mira el posible triunfo del PSOE en Andalucía para agarrarlo como bandera en las elecciones municipales y autonómicas, que están a la vuelta de la esquina.