Descubren una cervecería en Tel Aviv de hace más de 5.000 años
- Han sacado a la luz 17 pozos que sirvieron para la fabricación de cerveza
- Se fabricaba a base de una mezcla de cebada y agua parcialmente cocida
- Era una suerte de "bebida nacional", de consumo tan común como el pan
Unas excavaciones en el centro de Tel Aviv han sacado a la luz 17 pozos que sirvieron para el almacenaje de producción agrícola y la fabricación de cerveza hace 5.000 años, según ha informado este domingo el arqueólogo Diego Barkan, de la Dirección de Antigüedades de Israel.
"Entre los cientos de fragmentos de cerámica típicos de la población de la zona, hemos descubierto también varios fragmentos de grandes envases de estilo egipcio que servían para fabricar cerveza", dice Barkan en un comunicado.
El arqueólogo ha agregado que objetos similares ya habían sido descubiertos más al sur, en Ein Habesor, en la parte occidental del desierto del Négev. "Este es el primer testimonio que tenemos de que los egipcios se asentaron en la zona de Tel Aviv", ha explicado el investigador sobre la importancia del hallazgo.
Se desconocía que hubiesen llegado al norte
Hasta ahora se desconocía que los egipcios hubiesen llegado tan al norte en la primera Edad de Bronce, entre el 3.500 y el 3.000 a.C., aunque se sabía de un asentamiento de pueblos locales.
Los envases egipcios eran fabricados entonces con paja o cualquier otro material orgánico para fortalecer la estructura, una técnica que no era conocida por esos residentes.
La cerveza era una suerte de "bebida nacional" en Egipto en tiempos antiguos, de consumo tan común como el pan.
Una mezcla de cebada y agua cocida
Se fabricaba a base de una mezcla de cebada y agua parcialmente cocida y después dejada al sol hasta fermentar.
Los egipcios agregaban a este brebaje todo tipo de concentrados de fruta para hacer más agradable su sabor, y después la filtraban en envases como los encontrados en Tel Aviv antes de beberla.
"Ahora sabemos que los egipcios sabían disfrutar de un vaso de cerveza tanto como los telavivenses de hoy. Parece que hace ya miles de años que Tel Aviv era la ciudad que nunca duerme", ha concluido Barak con humor sobre una urbe que fue fundada realmente hace apenas cien años.