Enlaces accesibilidad

El juez procesa al presunto pederasta de Ciudad Lineal por cuatro agresiones a menores

  • También le acusan de cuatro delitos de detención ilegal y tres de lesiones
  • Solo ve indicios fuertes de cuatro de los siete hechos investigados
  • Los delitos sumarían 90 años de cárcel, considerando las penas máximas

Por
LA POLICÍA DIFUNDE IMÁGENES DE LA DETENCIÓN DEL PRESUNTO PEDERASTA DE CIUDAD LINEAL
Imagen de la Policía Nacional de la detención del presunto pederasta de Ciudad Lineal

El juez de Instrucción número 11 de Madrid ha procesado al presunto pederasta de Ciudad Lineal, Antonio Ortiz, por cuatro agresiones sexuales a menores, cuatro de detención ilegal, dos delitos de lesiones y una falta de lesiones ante los fuertes indicios de su autoría, además de ratificar su situación de prisión provisional.

En el auto de procesamiento dictado este lunes, el magistrado Juan Javier Pérez ha requerido al acusado que preste una fianza de 120.000 euros para asegurar las responsabilidades pecuniarias que se le pudieran imponer, y le ha apercibido de que procederá al embargo de sus bienes en el caso de que no deposite dicha cantidad.

Antonio Ortiz fue detenido el pasado 24 de septiembre en Santander acusado de ser el presunto pederasta que había secuestrado y abusado sexualmente de varias niñas en el barrio madrileño de Ciudad Lineal.

Asimismo, el juez acuerda ratificar su situación en prisión provisional, que cumple desde el pasado 26 de septiembre. Recientemente, se le trasladó a la prisión de Herrera de La Mancha, en Ciudad Real.

Contra esta resolución, cabe interponer por parte de las partes recurso de reforma y apelación. Si se confirma el procesamiento, se procederá a la apertura de juicio oral una vez concluya la causa.

En cuanto a las penas de los delitos, el de detención ilegal acarrea una condena de cinco a seis años de prisión; el de agresión sexual, una pena de entre doce y quince años de cárcel; y el de lesiones, una pena de seis meses a tres años de prisión. Por tanto, los delitos sumarían 90 años de cárcel, teniendo en cuenta las penas máximas.

No supone la finalización del sumario

Respecto a otros hechos que se le imputaban al inicio de la causa, el magistrado recalca que la investigación "no ha permitido alcanzar evidencias o indicios de peso que permitan su procesamiento en relación con otros tres hechos" investigados en la instrucción.

Por ello, aclara que este auto no supone la finalización del sumario, que se halla pendiente de diversas diligencias de investigación, entre ellas la recepción del informe de la clínica médico forense sobre la veracidad del relato de las menores.

En la resolución, el magistrado especifica los hechos que se le imputan relativos al 24 de septiembre de 2013; al 10 de abril de 2014; al 17 de junio de 2014; y al 22 de agosto de 2014.

El juez cuenta como pruebas de incriminación las ruedas de reconocimiento que practicaron las menores en las que Ortiz fue reconocido como su agresor sexual.

Además, la Policía Científica halló sangre de una de las víctimas en el piso de Santa Virgilia número 3, donde los investigadores realizaron un exhaustivo registro. También se encontró una huella de una de las niñas en el plástico de un colchón.

Los restos de sangre pertenecían a una niña de nueve años que fue secuestrada el 10 de abril de 2014 a las 20.40 horas. La pequeña habría sido llevada a este piso, que por aquel entonces estaba de obras.

El juez habla en el auto de un informe sobre análisis de datos del teléfono del acusado que concluye que coincide con la ubicación de dicho terminal en el lugar donde se cometieron los siete hechos investiogados.