El conseller Puig ve "un intento de destrucción" política en las acusaciones de presunta corrupción
- El conseller de Empresa declara ante la comisión del Parlament del 'caso Pujol'
- De todo lo que se le acusa no ha habido "una instrucción judicial", señala
- El empresario Sergi Alsina niega haber pedido nada "ilícito" a Oriol Pujol
El conseller de Empresa y Empleo, Felip Puig, ve una "intencionalidad de destrucción política" en las acusaciones de presunta corrupción de las que ha sido objeto, según ha asegurado este martes en su comparecencia ante la comisión de investigación del Parlament creada a partir del caso Pujol para explicar sus relaciones con el expresidente catalán, Jordi Pujol, su primogénito, Jordi Pujol Ferrusola, y los casos que afectan a su partido, CDC.
Puig ha admitido que quedó "consternado" por la confesión de Jordi Pujol sobre la fortuna que ocultó en el extranjero más de treinta años, pese a lo cual sigue considerándole como un personaje "simbólico" para Cataluña y asegura que se cree su versión y la de su hijo mayor. Si luego la justicia concluye que el expresident miente, entonces, se "repensará" sus "convicciones".
En cuanto a su persona, Puig ha incidido en que "de todo" lo que se le acusa no ha habido "ni una instrucción judicial", y que tampoco ha sido citado "como testigo ni como imputado".
Además, ha manifestado que le extraña que "se produzcan manifestaciones tan graves y nunca haya habido una instrucción" y, en este sentido, ha apuntado a una "intencionalidad de destrucción política" en la "instrumentalización" que se ha hecho a partir de acusaciones de las que no ha habido "ninguna prueba fehaciente".
El informe de la UDEF es "rotundamente falso"
En este sentido, ha recalcado que el informe de la UDEF de octubre del 2012 que le acusaba de actividades presuntamente ilícitas es "rotundamente falso" y contiene "manifestaciones surrealistas" e "incluso delirantes".
El conseller ha garantizado que no dispone de ninguna cuenta en Andorra y ha dicho que solo ha acudido "cuatro o cinco veces" al país pirenaico "para esquiar".
Puig ha defendido que mientras fue secretario de Organización de CDC no dirigía las finanzas de la formación, que tiene su sede embargada como fianza por el caso Palau de la Música, una responsabilidad que recaía directamente en el secretario general del partido.
En todo caso, ha manifestado su confianza en los últimos responsables de finanzas de CDC, Carles Torrent y Daniel Osàcar, y el actual, Francesc Sánchez.
No ha compartido empresas con Jordi Pujol Ferrusola
Puig ha destacado asimismo que tenía una empresa, que liquidó en 2012, con la que facturó a CDC "de forma legal", pero no a la Generalitat ni a ninguna empresa concesionaria y que tampoco compartió empresas con Jordi Pujol Ferrusola ni con los hermanos de éste ni con sus propios hermanos, dos están imputados en un caso de blanqueo de capitales.
Al comparecer en la comisión de fraude del Parlament, se ha negado a utilizar su primer turno de palabra, y, a preguntas del diputado Oriol Amorós (ERC), ha dicho que siempre ha identificado "muy claramente" los límites entre las actividades públicas y privadas suyas y de terceras personas, y que no ha tenido más empresa que la que tuvo antes de entrar en política en 1988.
También ha explicado que conoce a Jordi Pujol Ferrusola desde los seis años porque iban a la misma escuela, que trabaron una fuerte amistad en el bachillerato, y que después esta relación ha tenido "altos y bajos", aunque asegura que nunca ha tenido la impresión de que tratara de aprovecharse de su amistad.
Alsina niega haber pedido nada "ilícito" a Oriol Pujol
También ha comparecido este martes ante la comisión de investigación del Parlament el empresario Sergi Alsina que ha reconocido ser amigo del exsecretario general de CDC Oriol Pujol, pero ha asegurado que "nunca le ha pedido nada que pudiera tener la menor apariencia de ilícito" ni que pudiera vulnerar ningún deber suyo como responsable político y parlamentario.
En su intervención inicial ha defendido su actuación al frente de Alta Partners tanto en los aspectos relacionados con la concesión de ITV como en la deslocalización de las plantas de Sony, Sharp y Yamaha en Cataluña.
Sobre este último caso, ha explicado que, cuando contactó con las tres multinacionales japonesas, éstas ya habían decidido marcharse y despedir a todos los trabajadores, y ha reivindicado que es gracias a la actuación de Alta Partners que se logró "evitar el despido de 1.400 personas".
Mientras, la secretaria y socia de Jordi Pujol Ferrusola, Cristina Isabel de Francisco, se ha negado a responder las preguntas de los grupos del Parlament catalán y ha alegado que ya declaró como testigo en la Audiencia Nacional el pasado septiembre.
De Francisco ha pronunciado unas palabras al inicio, con las que ha avisado de que se acogía a su derecho a no declarar porque ya lo había hecho en la Audiencia Nacional y, además, ha precisado que su declaración se podía encontrar en internet.