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Shell acuerda la compra del grupo británico BG por 64.400 millones de euros

  • El gigante petrolero pagaría unos 1.350 peniques por cada acción de BG
  • Se trataría de la cuarta mayor fusión del sector desde 1996

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Logo de Shell en una estación de servicio
Logo de Shell en una estación de servicio de Londres.

La petrolera británico-holandesa Royal Dutch Shell ha realizado una oferta para comprar BG Group que valora el tercer grupo energético del Reino Unido en unos 47.000 millones de libras (unos 64.400 millones de euros), en lo que será la primera gran fusión en el sector del crudo desde hace una década.

En un comunicado conjunto, las dos sociedades han explicado que el acuerdo alcanzado por sus consejos de administración establece que Shell pague 383 peniques en efectivo y cerca de la mitad de una de sus acciones B por cada título de BG, lo que equivale a unos 1.350 peniques por cada título de la empresa británica. Esa oferta eleva en un 52% la media de la cotización bursátil en los últimos tres meses.

Con esas condiciones, una vez cerrada la compra, los accionistas de BG Group controlarían en torno al 19% de la compañía resultante de la fusión.

Si se incluye la deuda neta de BG -que alcanza los 12.000 millones de dólares-, la operación se convertiría en la mayor de este año y la cuarta más grande a nivel global en el sector del petróleo y el gas desde 1996.

Impacto de la caída del precio del petróleo

BG Group tiene un valor de 46.000 millones de dólares en Bolsa, mientras que la capitalización de mercado de Shell alcanza los 202.000 millones de dólares. La estadounidense Exxon, la mayor firma mundial del sector, está valorada en 360.000 millones de dólares.

Los precios del petróleo han caído a la mitad desde mediados de 2014 debido al auge en EE.UU. del petróleo no convencional (el obtenido mediante la técnica del fracking y conocido como shale oil) y a la decisión de Arabia Saudí de no reducir la producción de la OPEP, lo que ha creado una coyuntura similar a la de principios de la década de 2000, cuando se produjeron varias grandes fusiones.

En ese momento, British Petroleum compró Amoco y Arco, Exxon adquirió Mobil, y Chevron se fusionó con Texaco.

BG emplea a unas 5.200 personas en 24 países y tiene unas metas muy ambiciosas de crecimiento de producción y proyectos de miles de millones de dólares en Brasil, África Oriental, Australia, Kazajistán y Egipto, pero desde el inicio de la caída del precio del crudo, su valor en Bolsa ha bajado casi un 28% y ha sido objeto de especulaciones sobre posibles movimientos de concentración.

Antes de que se confirmase el acuerdo anunciado este miércoles, una fuente bancaria de Londres apuntó que la operación podría encontrar algunos lastres, como la investigación abierta en Brasil sobre la corrupción en torno a la petrolera estatal Petrobras. BG también ha tenido muchos problemas en Egipto, y el valor de su negocio de petróleo y gas en el cuarto trimestre del año pasado se redujo en 6.000 millones de dólares.

Shell ha indicado que el acuerdo le ayudará a ampliar sus reservas de petróleo y gas natural en un 25% y mejorar la producción en un 20%, así como acelerar su estrategia de crecimiento. Además, le permitirá mejorar su posición en nuevos proyectos de gas y crudo, especialmente en Australia y Brasil.

El presidente del gigante petrolero, Jorma Ollila, ha puntualizado que esta combinación de los negocios creará una compañía más fuerte y competitiva para los accionistas de ambas empresas en momentos de "volatilidad de los precios".

También ha descartado que se tengan que vender activos para poder obtener luz verde por parte de las autoridades reguladoras, aunque sí ha confirmado que habrá desinversiones posteriores de las carteras de ambas empresas.