Santos, a las FARC: "La pelota está de su lado"

• El presidente colombiano advierte a la guerrilla que "la paciencia se agota"
• Dice que seguirá negociando, pero defiende que el Ejército pueda atacar

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, entre su ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón (derecha) y el comandante de las fuerzas armadas, general Juan Pablo Rodríguez, en la "Marcha por la Paz" de comienzos de mes en Bogotá

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha dicho a la guerrilla de las FARC que “la pelota queda de su lado” y le ha reclamado pruebas de que su voluntad de paz es real, un día después de que la guerrilla reafirmara su alto el fuego unilateral.

En su discurso de apertura de la tercera sesión del Consejo Nacional de Paz, recogido por Efe, Santos ha dicho: "Señores de las FARC, la pelota queda de su lado, es hora de que nos demuestren que para ustedes la paz es también ese bien soñado y que la legalidad es su próximo escenario".

La dinámica de los diálogos de paz de Colombia, que han cumplido dos años y cinco meses en Cuba, ha sido cuestionada en los últimos días por sectores de la derecha a raíz del ataque de la semana pasada de las FARC contra el Ejército en una zona rural del departamento del Cauca.

Esa acción dejó 11 militares muertos, lo que llevó a Santos a autorizar la reanudación de los bombardeos a campamentos de la guerrilla, suspendidos el pasado 10 de marzo, y a plantearse la necesidad de fijar plazos a la negociación.

Las FARC, que habían puesto un al alto el fuego unilateral e indefinido el pasado 20 de diciembre, han responsabilizado de ese choque al propio Ejército. Con todo, el lunes reafirmaron su compromiso con el alto el fuego unilateral e indefinido y pidieron a Santos que responda con la misma medida.

En su alución de este martes en Bogotá, Santos ha replicado: "No queremos más retórica, no más justificaciones a lo injustificable, no sigan incumpliendo sus promesas (...) El país tiene una paciencia que se le está agotando, no aguanta una frustración más. Saben bien que, como Estado, no dejaremos de atacarlos si vemos que amenazan el bienestar de nuestros compatriotas. Es nuestra obligación y así lo haremos, la protección a nuestros ciudadanos no es negociable".

Y ante las críticas de sectores de ultraderecha colombiana, ha dicho que seguirá enfrentándose al grupo armado (considerado terrorista por la UE) con “firmeza”. "Pero eso no nos puede distraer de una verdad diáfana como la luz: la guerra no es la solución", ha añadido, siempre según Efe.

Críticas de la ONU

Por otra parte, la Alta Comisionada adjunta para los Derechos Humanos de la ONU, Flavia Pansieri, ha concluido una visita de varios días a Colombia y ha declarado que tiene la certeza de que la sociedad "no quiere y no puede esperar más" para que el Gobierno y las FARC firmen la paz.

Tras reunirse con todas las partes, ha pedido al Gobierno que "preste mayor atención a los derechos" de las comunidades indígenas, campesinas y negras, que "han sido desproporcionadamente afectados por el conflicto", aunque también ha reconocido los esfuerzos del Ejecutivo por garantizar los derechos de estos colectivos, informa Efe.